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Se suicida líder de la barra de Ñublense chileno por mala campaña del equipo

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José Urriola, conocido como «Jano Loco» en la ciudad de Chillán se ahorcó en su casa, donde dejó una carta en la que explicó que se mataba por la depresión que le provocaron los malos resultados del equipo.


El fundador y líder de la barra «Los de Siempre», de Ñublense, de la Primera División, se suicidó, abrumado por la mala campaña del equipo en la actual temporada, que podría desembocar en su descenso a la segunda división.

José Urriola, conocido como «Jano Loco» en la ciudad de Chillán, donde Ñublense tiene su sede, se ahorcó en su casa, donde dejó una carta en la que explicó que se mataba por la depresión que le provocaron los malos resultados del equipo.

Urriola, que según sus conocidos padecía una depresión desde hace años y era consumidor de drogas, fue el fundador de la barra «Los de Siempre», para alentar en las buenas y en las malas al equipo.

Ñublense, que en la temporada 2008 hasta participó en la Copa Sudamericana, se debate en un triste presente, con sólo diez puntos sumados en igual cantidad de partidos en el torneo de Clausura, con sólo uno de ventaja sobre los colistas, que son Huachipato y Palestino.

Pero lo peor está en la tabla acumulada, que incluye también la campaña del torneo de Apertura y determina el descenso de los dos últimos, en la que Ñublense, con 24 puntos, es el colista absoluto, a cuatro puntos de Santiago Morning, que le antecede y en serio riesgo de perder la categoría.

En la jornada de este fin de semana el equipo de Chillán debe visitar justamente a Santiago Morning, que viene en alza y suma dos victorias consecutivas en las últimas jornadas.

En su anterior partido, el Ñublense perdió en su cancha, por 0-2 ante Cobresal, derrotas que precipitó la angustia de «Jano Loco», según publica hoy el diario La Discusión, de Chillán.

«Tras compartir con algunos miembros de la barra en la sede de «Los de Siempre», José Urriola volvió a la casa que compartía con su abuela y su madre y, según la versión, «se colgó de una higuera en el patio de su casa, vestido con la camiseta roja del Ñublense y portando la bandera del equipo».

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