En la antesala del debate de Anatel
Las declaraciones del ministro Cristián Larroulet, quien advirtió que las propuestas anunciadas por la ex mandataria son las responsables de la desaceleración económica, fueron respaldadas por los timoneles de la Alianza y por el titular de Hacienda, Felipe Larraín. Desde el comando de la Nueva Mayoría, sin embargo, no dudaron en considerarlas como «absurdas».
En la antesala del debate Anatel de mañana martes en la noche y a seis días de la segunda vuelta presidencial entre Michelle Bachelet y Evelyn Matthei, la derecha y La Moneda sacaron toda su artillería para desplegar una suerte de política del terror, advirtiendo de los efectos negativos que tendrá en la economía y el empleo un eventual gobierno de la Nueva Mayoría.
En esta nueva arremetida, fue el ministro de la Segpres, Cristián Larroulet, quien lanzó la primera piedra advirtiendo que las señales de desaceleración que hay en la economía son producto de las reformas tributarias y constitucionales anunciadas por la candidata de la Nueva Mayoría. “Las propuestas de Michelle Bachelet no ayudan a que el país tenga más inversión, más empleo, más crecimiento”, reiteró esta mañana.
Dijo que esa es la conclusión de cualquier “análisis serio y riguroso”, porque cuando se está introduciendo un cambio a un sistema tributario, reformas constitucionales que cambian el tenor del derecho de propiedad” es lógico –recalcó– preguntarse si esas medidas ayudan a la inversión y “por supuesto que no, cualquier persona seria ve que ahí no hay propuestas que fomentan la inversión”, dijo.
No fue el único esta jornada. Su par de Hacienda, Felipe Larraín, se cuadró con esta línea de discurso y salió del comité político que esta mañana se realizó en La Moneda para hablar de este punto. “Hace seis meses hice una advertencia en la misma línea (…) Si uno tiene políticas que elevan el impuesto de primera categoría a las empresas, que eliminan los esquemas de beneficios para las pymes para invertir, aumentan el impuesto al crédito y eliminan el Fondo de Utilidades Tributarias, FUT, lo sorprendente es que constituyan un beneficio y una atracción de la inversión”
Si bien insistió que no ha mencionado a ninguna candidata, hizo hincapié en que “es indudable que el programa que se está planteando no atrae la inversión, lo que ha ocurrido es que la inversión se ha desacelerado (…) Hago llamado a cuidar la inversión y centrarse en políticas que fomentan la inversión, detrás de ella está el empleo, nosotros con orgullo cumplimos nuestros compromiso en materia de empleo, y hemos más que cumplido”.
El ministro Larraín agregó que “nosotros recibimos una economía en recesión, que había caído, que le había ido peor que al resto del mundo. Nosotros estamos dejando una economía que está creciendo a más del 4%, con la generación de más de 800 mil empleos, son condiciones muchísimo mejores que cuando llegamos al poder”.
Luego de estas declaraciones, dijo enfático que, al exponer esta posición, “no se ha hecho ningún llamado a votar, estoy respondiendo preguntas”.
Terminado el comité político, fue el turno de los timoneles de la UDI, Patricio Melero y de RN, Carlos Larraín, de cuadrarse con la estrategia.
“Nosotros no tenemos preocupación por los inversionistas, sino que por la cantidad de trabajo que hay para la gente que quiere trabajar. En la izquierda se da esta obsesión con los ricos, nosotros la tenemos con los pobres, queremos que dejen de serlo y que haya más pan en la mesa”, destacó Larraín.
Agregó que no tiene una bola de cristal, sino que “la relación entre inversión y empleo es conocida, si hay más inversión, hay más empleo y hay más pan en la mesa (…) sin ser técnico, sé que si se deroga el marco jurídico que protege la inversión extranjera, si no habrá beneficio tributario, concluyo que los inversionistas la pensarán”
Melero, en tanto, dijo que desafiaba “al comando de la Concertación y el Partido Comunista a que me digan una, sólo una propuesta en el programa de Bachelet que ayude a mantener y generar empleo, no hay ninguna. Todo lo que hay desincentiva la inversión y el empleo”.
Añadió que en “un mundo global donde el capital y las inversiones miran dónde hay mejores condiciones, nos preocupa esta situación” y reconoció que lo bueno de este debate es que se pueden comparar los programas de gobierno en una “semana que es determinante”, si la oposición “está a favor o en contra de la delincuencia y los encapuchados, de los alumnos más vulnerables (…) no han pasado la prueba».
En tanto, y frente a la arremetida oficialista, los voceros del comando de Michelle Bachelet, Javiera Blanco y Álvaro Elizalde, aseguraron que los dichos de Larroulet se ajustan a «una campaña del terror», insistiendo en que se trata de declaraciones «absurdas».
«Respecto a lo que ha señalado el ministro Larroulet, sólo puedo decir que es lamentable, porque uno espera que un ministro de Estado pueda actuar con altura de miras y básicamente que el ministro Larroulet haga su pega», señaló Javiera Blanco.
A juicio de la vocera, estas declaraciones representan «una vuelta atrás», agregando que «lo que tenemos es una propuesta de Gobierno liderada por Michelle Bachelet que hoy pone sobre la mesa de manera nítida y clara cuáles son las ideas de cambio (…) Sabemos cuánto sale ese programa, cómo lo vamos a financiar de manera seria y responsable».
Elizalde, por su parte, enfatizó que «como ya no pueden echarle la culpa al gobierno anterior, ahora se la echan al próximo gobierno. Eso da cuenta de que no están dispuestos a asumir la responsabilidad por sus errores».
