«Lo que hemos visto históricamente es que aparte del empleo –que ha sido la variable principal–, el otro factor que afecta mucho el ánimo del consumidor es la inflación, los precios (alza del dólar y del precio de las bencinas)», puntualizó Roberto Méndez, presidente de GfK Adimark.
El Índice de Percepción de la Economía (Ipec) –que mide la evolución de las percepciones y expectativas de los consumidores chilenos– cayó en enero, alcanzando 54,6 puntos, lo que confirma un retroceso de dos unidades en comparación con la cifra del último mes del año pasado. Así lo reveló un estudio realizado por la empresa GfK Adimark.
Sin embargo –aclara el sondeo–, el índice sigue manteniéndose en el área del optimismo desde hace 20 meses (sobre los 50 puntos).
«Lo que hemos visto históricamente es que aparte del empleo –que ha sido la variable principal–, el otro factor que afecta mucho el ánimo del consumidor es la inflación, los precios (alza del dólar y del precio de las bencinas)», puntualizó Roberto Méndez, presidente de GfK Adimark.
Según Méndez, desde fines de 2013 «hay señales de desaceleración que hasta ahora no se habían reflejado en el ánimo de los consumidores, incluso en las ventas del comercio. Esto en algún momento tiene que corregirse y este dato de enero puede ser la primera señal de que los consumidores están empezando a sentir también esta desaceleración».
«Mi expectativa es que esta baja del Ipec debería continuar en los próximos meses, porque ya no es sostenible que el consumo y los consumidores mantengan esos niveles de optimismo cuando la economía claramente tiene signos de enfriamiento», agregó.
«Pasar a la barrera del pesimismo debería tomar entre tres y cuatro meses, quizás en algún momento del primer semestre, pero no lo veo de inmediato», concluyó.