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Mario Marcel dice que la reforma tributaria busca reducir «no sólo la concentración de ingresos sino también de poder».

Mario Marcel dice que la reforma tributaria busca reducir «no sólo la concentración de ingresos sino también de poder».

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El economista y representante de la OCDE que lo que el proyecto busca modificar «la estructura del sistema tributario chileno, no es solo un aumento de la carga, sino que también es un incremento de la importancia de los impuestos a la renta».


El representante de la OCDE, Mario Marcel, quien se encuentra de visita en Chile, se refirió a la reforma tributaria impulsada por el gobierno de Michelle Bachelet. Cabe recordar que Marcer fue director de Presupuestos y lideró la comisión de reforma previsional del primer gobierno de Bachelet de la Mandataria.

En medio del debate del último tiempo sobre las alzas en los impuestos de los países más desarrollados, el economista aclaró que las naciones que integran la OCDE «tienen cargas tributarias más altas que Chile, sobre todo en los impuestos a la renta. Todos esos países, durante los últimos 50 años, han aumentando su carga tributaria y desde allá (estos cambios en Chile) se ven con bastante menos dramatismo”, según señaló La Segunda.

En ese sentido sacó a relucir que en los países nórdicos asociados al organismo internacional existen “impuestos a la renta que, en términos de recaudación, son muchísimos mayores a los de Chile y, al mismo tiempo, permiten que esas naciones estén entre las más competitivas del mundo”, ya que “los niveles de protección social permiten que la gente tenga la posibilidad de correr riesgos, de iniciar negocios, de cambiarse de empleo, de contratar trabajadores”.

Así, precisó que lo que hace la reforma tributaria es modificar «la estructura del sistema tributario chileno, no es solo un aumento de la carga, sino que también es un incremento de la importancia de los impuestos a la renta” lo que significa que “se está normalizando la estructura tributaria”.

Agregó que “la visión sobre el futuro que se está construyendo hoy es la de un país en el cual hay un terreno de juego más nivelado que lo que ha existido hasta ahora, donde estamos tratando de reducir los niveles de concentración, no sólo de los ingresos, sino que también del poder, de la influencia y de muchas otras dimensiones que generan las desigualdades tan grandes en Chile”.

En tanto, sobre el debate que ha abierto la opción de derogar el FUT y sobre los beneficios tributarios que permitieron la generación de grandes capitales en un grupo reducido de la población, Marcel aseguró que «en Chile dedicamos demasiado tiempo a recriminarnos el pasado y creo que los países crecen en la medida que son capaces de construir una visión sobre su futuro”.

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