Afirma que cuando un hombre le dice que hay mujeres a las que «les gusta mostrar», ella le responde que eso es porque «los babosos que salivan al verlas las están validando socialmente, les están diciendo que de esa manera son aceptadas y veneradas, y lamentablemente no todas tenemos el coraje de mandarlos a la mierda en su machismo de pajas encubiertas».
Una descarnada crítica al sexismo detrás de los desnudos y cuerpos pintados de mujeres con motivo del Mundial de Brasil 2014 que se inició el jueves último, formuló la periodista y comediante de stand-up, Bernardita Ruffinelli.
En su blog Bruffinelli.cl, se preguntó por qué los hombres no hacían lo mismo y se pintaban motivos futboleros en sus genitales.
«Tuve la brillante idea de comentar en tuiter que me parecía que la moda de pintarse las poleras de las selecciones mostrando las tetas, era una práctica que no me parece contribuya a la erradicación del sexismo y la dignidad de la imagen femenina en relación al fútbol. La verdad, es que creo que hay un montón de mujeres futboleras que vibran con el fútbol, entre las que por supuesto no me encuentro, pero a quienes respeto profundamente y creo que ellas deberían ser las primeras en levantar los brazos para quejarse», escribió, advirtiendo que «hombres mandriles me sugieren que no me meta en temas de fútbol, que esa es weá de hombres, pero aparecen las minas en pelota con la raja al aire y las tetas al viento, y entonces los mismos mandriles corren a votar por su madrina favorita”.
Y agregó: «¿Por qué no se pintan un short en la pichula ustedes? Si no es indigno, si no es sexista, si no es una forma de humillación femenina para ser parte de una fiesta mundialera que al parecer no nos pertenece al mismo nivel que ustedes? ¿Por qué no hemos visto sus penes cubiertos de pintura con un emblema nacional? Porque claro, eso no lo veremos (sic) «.
Bernardita Ruffinelli afirmó también que cuando un hombre le dice que hay mujeres a las que «les gusta mostrar», ella le responde que eso es porque «los babosos que salivan al verlas las están validando socialmente, les están diciendo que de esa manera son aceptadas y veneradas, y lamentablemente no todas tenemos el coraje de mandarlos a la mierda en su machismo de pajas encubiertas».
«Y las que si lo tenemos nos vemos en la obligación de levantar la voz por ellas, incluso pese a que ellas parezcan felices mostrando las tetas para encandilar a los hinchas. Si te parece tan fantástico, anda, agarra una témpera y píntate el pico con banderas chilenas, mándanos una foto que incluya tu cara en ella y te haremos famoso. Pongo mis manos al fuego porque esa bandera no llegará. Ahora dime si la weá no es sexista», concluyó.