Los tres imputados por el ataque terrorista en el centro comercial del Metro Escuela Militar fueron formalizados el martes pasado. Mientras, en el país ibérico se desarrolla un proceso similar contra otros dos chilenos. Francisco Solar y Mónica Caballero, ambos anarquistas, están imputados por haber puesto una bomba en una iglesia de Zaragoza y habían sido absueltos por delitos similares en el país. La Audiencia Nacional de España, que sólo ve casos de terrorismo, recolectó una serie de evidencias para situar a los imputados en el lugar de los hechos y demostrar su afiliación a una organización terrorista, así como su intención de cometer nuevos ataques.
Los tres imputados por el último ataque con bomba en el SubCentro del Metro Escuela Militar fueron formalizados este martes y se encuentran con medidas cautelares. Se trata de Juan Alexis Flores Riquelme, Nataly Casanova Muñoz y Guillermo Cristóbal Durán Méndez, a quienes se les imputa un total de cuatro atentados, con distintos grados de participación. La investigación se puede extender por más de diez meses, mientras que la Fiscalía ya pidió una pena de 5 años y un día de cárcel por cada uno de los atentados.
A la luz de este hecho, es interesante mirar el proceso que la Audiencia Nacional está desarrollando en contra de Francisco Solar y Mónica Caballero –ambos imputados y luego dejados en libertad en el caso Bombas en nuestro país–, por poner un artefacto explosivo en la Basílica de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, España, el 2 de octubre del año pasado.
A Solar y Caballero se les acusa de pertenecer a una organización terrorista, la FAI/FRI/GAC, de haber puesto una bomba que provocó lesiones graves en otras personas y la agravante de haber utilizado “disfraces”: ella con un “pañuelo de tipo islamista” y él con un gorro para la lluvia y gafas.
La Audiencia Nacional, ubicada en Madrid, nació en 1977 en el contexto del conflicto con la organización terrorista ETA. Es una instancia autónoma que sólo se ocupa de casos de terrorismo y es conocida en nuestro país pues uno de sus jueves llevó el proceso contra Augusto Pinochet y sus colaboradores por delitos de lesa humanidad, que terminó con el ex dictador detenido en Londres. El Auto de Procesamiento del pasado cuatro de julio de este año arroja varias claves sobre el desarrollo del proceso contra los dos chilenos y la lógica utilizada para argumentar su culpabilidad.
[cita]La Audiencia Nacional define a la FAI/FRI como una “marca” de la que un grupo anarquista puede formar parte al reivindicar un ataque usando las siglas y cumplir con un “pacto de apoyo mutuo”. Este se basa en ejercer la “solidaridad revolucionaria” y sumarse a los ataques que inicie un grupo que utilice las siglas. El texto da tres ejemplos de atentados en España firmados con las siglas FAI/FRI: 21 de diciembre de 2012 en Barcelona; 10 de abril de 2013 contra un banco en Madrid; 10 de septiembre paquetes bomba contra un banco en Barcelona.[/cita]
La reconstrucción de la escena y del itinerario es el primer punto. Los argumentos se basan en el registro de diversas cámaras de seguridad, en la que se puede ver el recorrido de la pareja sospechosa de poner la bomba. “Se analizaron las imágenes obtenidas por las cámaras de video vigilancia del bar ‘Las Catedrales’, sito en la misma Plaza del Pilar de Zaragoza, observándose a dos personas, hombre y mujer, que aparecieron a las 12:44 horas en la Plaza, una hora antes de la explosión que se produjo a las 13:45 horas, y que por su comportamiento, vestimenta y bultos que portaban llamaron la atención de los investigadores”, dice el documento.
El análisis continúa afirmando que ambos vestían “ropa inapropiada dadas las condiciones climatológicas existentes”, que llevaban “cubierta la cabeza y oculto su rostro” y que el hombre portaba al hombro un bolso con “asas de considerables dimensiones” y del que no se separó “en ningún momento”.
Luego se detalla la reconstrucción del itinerario de las dos personas, el que se inicia en la Estación del Norte de Barcelona, desde donde habían partido en la madrugada en un bus de la empresa ALSA, cuyos boletos habían comprado hace quince días. Expuesta la reconstrucción de escena, el documento sostiene que “por medio de un sistema de reconocimiento biométrico-facial” se concluyó que las personas son Francisco Solar y Mónica Guerrero.
A continuación, enumeran los objetos que se encontraron en el domicilio de ambos: ropa, gafas y zapatillas idénticas a las que tienen los sujetos de las grabaciones.
En el segundo punto del auto de procesamiento, se apunta a la supuesta intencionalidad de ambos imputados de cometer un nuevo acto terrorista. Según las investigaciones y este documento, el comando al que pertenecían Solar y Caballero –el Comando Insurreccional Mateo Moros– “estaba realizando actos preparatorios para una próxima acción terrorista de colocación de artefactos explosivos contra la Basílica de Montserrat de Barcelona”. En el domicilio de ambos la policía encontró dos billetes de tren de la Generalitat de Cataluña para ir a la Basílica y un mapa de ésta, por lo que se revisaron las cámaras de seguridad del tren y de la iglesia.
Las imágenes, dice el auto, mostraron cómo los imputados “realizaron un recorrido coincidente plenamente con la investigación, dados los antecedentes, el perfil ideológico basado en la documentación hallada en el registro y el modus operandi establecido tras el atentado contra la Catedral de Zaragoza, como un recorrido previo de la elaboración de una información de un objetivo terrorista”.
Solar y Caballero repiten el recorrido, continúa el texto, con el objeto de “ubicar las distintas cámaras de grabación y seleccionar el lugar adecuado para atentar contra el templo. No es presumible que la visita estuviera motivada por intereses culturales, ni de carácter religioso”.
El tercer punto del auto de procesamiento es uno de los más interesantes, en cuanto se expone una serie de argumentos y evidencias que apuntan a vincular a los dos imputados con la FAI/FRI, una organización terrorista internacional prohibida por la Unión Europea.
La sigla FAI no es desconocida en la historia de España. Antonio Elorza –autor de Anarquía y utopía– analiza en una columna del diario español El País el origen de la Federación Anarquista Ibérica (FAI), la legendaria facción creada en 1927 y en la que participó el miliciano Buenaventura Durruti.
La ideología del “anarquismo insurreccionalista” es una rama del anarquismo que “se resume en la idea de atacar al Estado en cualquier lugar siempre que sea posible”, dice el texto del procesamiento. Uno de los ideólogos más influyentes de esta rama del anarquismo es el italiano Alfredo María Bonanno, quien sostiene –según el texto– que “una estructura como la actual del sistema, tecnológica, no puede ser más que destruida, ya que no puede ser utilizada, transformada o mejorada. Es por ello que el concepto mismo de ‘insurrección’ parte del concepto mismo de ataque inmediato contra lo que hoy son las estructuras del Estado”.
La cercanía táctica del “anarquismo insurreccional” y las “células de base yihadista”, cuyo teórico fue Abu Musab al-Suri, conocido como Mustafá Setmarian, es otro de los puntos que aborda el texto. Setmarian está sindicado como un terrorista miembro de Al Qaeda, autor de varios libros y uno de los autores intelectuales tras la “yihad moderna”.
Ambos grupos “tienen perfectamente identificado y acotado a su ‘enemigo’ genérico y, por lo tanto, no necesitan de un órgano superior jerárquico que los adiestre, organice y active para el ataque”, dice el documento.
La Audiencia Nacional define a la FAI/FRI como una “marca” de la que un grupo anarquista puede formar parte al reivindicar un ataque usando las siglas y cumplir con un “pacto de apoyo mutuo”. Este se basa en ejercer la “solidaridad revolucionaria” y sumarse a los ataques que inicie un grupo que utilice las siglas. El texto da tres ejemplos de atentados en España firmados con las siglas FAI/FRI: 21 de diciembre de 2012 en Barcelona; 10 de abril de 2013 contra un banco en Madrid; 10 de septiembre paquetes bomba contra un banco en Barcelona.
Se agrega también la existencia de otra organización: los Grupos Anarquistas Coordinados (GAC). Comparten principios con la FAI/FRI, pero tienen sus diferencias. La primera es una “marca de ataque, de libre adopción para cualquier grupo que realice un ataque”, mientras que los GAC son una coordinadora con un “nivel estructural”, lo que obliga al “conocimiento” entre los grupos que la componen y una serie de “mecanismos de comunicación”.
Expuesto lo anterior, en el cuarto punto el auto de procesamiento se concentra en dar evidencias de que Francisco Solar y Mónica Caballero pertenecen a estas organizaciones mediante el “Comando Mateo Morral”, que se adjudicó el atentado contra la Basílica en Zaragoza y otro de febrero de 2013 contra la Catedral de Almuneda de Madrid.
Para esto se utilizan los documentos que la policía encontró en un USB durante el allanamiento de domicilio donde vivían los chilenos.
El primer documento es una respuesta de Francisco Solar a una carta publicada por CCF/FAI/FRI en septiembre de 2011, en la que se hace un “llamamiento a los anarquistas presos”. Francisco responde enviando una explicación de su situación, entonces procesado por el caso Bombas en Chile, “muy probablemente aportando una de las tres cartas firmadas bajo los seudónimos ‘acusados caso Bombas”, junto a una fotografía. Mónica Caballero también responde pero firma con su nombre e incluye una consigna: “¡Viva la CCF, que se expandan por todo el globo”. El resultado de estas dos colaboraciones, junto a otras de diferentes partes del mundo, se tradujo en un libro titulado Mapeando el fuego.
Otra prueba de la vinculación con la FAI/FRI que se expone es la adecuación del documento que revindicó el atentado en la Basílica de Zaragoza “bajo los parámetros de la CCF/FAI/FRI, en otro texto publicado por Solar y Caballero, denominado ‘La nueva guerrilla urbana anarquista’”.
El último antecedente que expone el documento y que confirmaría la relación de Solar y Caballero con la organización FAI/FRI son los actos de apoyo internacional que comenzaron a mediados de 2013. Entonces la organización lanzó el “proyecto Fénix”, que cuenta los atentados que solidarizan y apoyan a los presos anarquistas. Francisco y Mónica son mencionados en tres atentados: uno en Chile, otro en Indonesia y un último en Berlín, Alemania.
Lea aquí el documento del Auto de Proceso de Mónica Caballero y Francisco Solar.