Un grupo de trabajadores y estudiantes aseguró que elementos ligados a la colectividad oficialista siguen manejando a la institución, a pesar de su salida oficial en 2013, con una lógica autoritaria que incluye amenazas con tinte homofóbico al presidente del sindicato histórico.
Un grupo importante de la comunidad que conforma la Universidad Arcis difundió una declaración pública en la que se apunta como principal responsable de la actual crisis que vive la institución al Partido Comunista, que hasta 2013 perteneció formalmente al directorio del plantel.
«Mediante esta declaración venimos en denunciar a la opinión pública cómo los engranajes partidarios del PC (sus ramificaciones) y el grupo ‘controlador’ erigido actualmente en ARCIS, a pesar de los hechos por todos conocidos, aún continúa manejando ‘subrepticiamente’ la Universidad mediante formas más intricadas de control político. Ahora, éstas, se traducen en el secuestro estatutario de la Universidad, en el gobierno Corporativo y su Directorio», aseguran.
El grupo formado por el Sindicato de Trabajadores Histórico Nº1, Académicos(as) exonerados(as), Estudiantes de base Sociología, Psicología, Antropología, Artes, Trabajo Social, Centro de Estudiantes de Sociología (CESO), Colectivo de Estudiantes “Valech”, afirma en el texto que el presidente del Sindicato, Víctor Hugo Robles, ha sido víctima de continuas amenazas que provendrían desde esta colectividad. «Frente a las veladas amenazas efectuadas por misivas con claro tinte sectario y homofóbico. Por cuanto, saludamos su valentía en denunciar la irresponsabilidad del Partido Comunista (y de sus dirigentes relevantes) con los trabajadores que por varios meses no reciben sus salarios», afirman.
Según los denunciantes el retiro del PC fue en parte nominal, para integrarse sin problemas a la Nueva Mayoría. «Cuando se ‘formalizó’ públicamente el ‘retiro’ de ICAL en diciembre del 2013, en la práctica, sólo se trató de exhibir la ‘prueba de blancura, (¡la escena del retiro¡) para constituir un ‘hecho’ que resultó funcional a sus esfuerzos por integrar el nuevo conglomerado político (Nueva Mayoría); y simultáneamente, sirvió para desentenderse de los compromisos contractuales, académicos y éticos con los trabajadores, estudiantes y profesores de ARCIS», afirman.
En la declaración pública apuntan directamente al PC como responsable de la crisis. «La ‘alborotada’ salida del PC al momento de conformar el nuevo bloque de gobierno, jugó en contra de establecer los procesos auditados, establecer un orden de los pasivos y activos con que contaba realmente la Universidad para enfrentar la crisis del año 2014. La genealogía de la crisis se encuentra en esa salida abrupta caracterizada por la ausencia de cualquier metodología de salida. De allí en más era de prever toda la trama de escándalos que la opinión pública conoce y sanciona».
Pero, según los denunciantes, la salida formal de la colectividad no ha terminado con su nivel de influencia en la institución. «Actualmente se ha impuesto una dinámica ‘estalinista’” (inédita para estos tiempos) que mediante reiterados intentos busca desestimar a como dé lugar cualquier atisbo de pensamiento crítico, que insista en defender el ‘ethos’” de Universidad experimental. Hoy en ARCIS, ante la ausencia de prudencia y el extravío de los principios universitarios, ‘campea’ la desorientación institucional, y cualquier tipo de diferencia con la Dirección es tildada de una maniobra encubierta de la UDI», dicen, y recalcan el papel «nefasto» de los gremialistas en esta crisis.
Por último, insisten en que «la realidad Arciana con su impronta PC, pro-PC o actores inclinados hacia los ‘focos de influencia’ del partido, pululan y mantienen el control subrepticio o transversal de una parte importante de la Corporación».
El Crítico Papel Del PC Frente a La Problemática Arcis. EL MOSTRADOR