El nuevo timonel falangista dijo que su colectividad y especialmente sus parlamentarios están disponibles para «construir ese Acuerdo transversal que haga más transparente la política y los negocios, como lo reclama la ciudadanía».
El senador DC Jorge Pizarro se convirtió hoy en el nuevo presidente de la Democracia Cristiana a pesar de los severos cuestionamientos surgidos a partir de que dos de sus hijos, Sebastián y Jorge, aparecen en la lista de las personas que recibieron pagos desde la minera SQM, a través de la firma Ventus Consulting. Uno de ellos explicó que se trató de una «asesoría oral» a la compañía por un monto de $45 millones. El conflicto de interés del nuevo timonel falangista llevó a que el primer vicepresidente, Fuad Chahin, decidiera no asumir su puesto en la mesa.
Con todo, poco antes de las 14:00 horas, Pizarro recibió el cargo de parte del presidente saliente Ignacio Walker y admitió que está en contra de que las empresas sigan aportando a la política. «Hay que instalar una muralla china entre el dinero empresarial y la política. Por tanto, como DC respaldaremos las medidas legales y administrativas que nos proponga la Presidenta Bachelet; en especial aquellas que permitan eliminar los aportes de las empresas», dijo.
«Hay que regular las campañas, rebajar sustancialmente el gasto electoral. Se debe aumentar el aporte público a las campañas y sanciones drásticas para los que no hayan cumplido la normativa sobre gasto electoral», agregó.
El nuevo presiente de la DC aseguró que sus parlamentarios «reiteran su disponibilidad a construir ese Acuerdo transversal que haga más transparente la política y los negocios, como lo reclama la ciudadanía».
Luego de conocerse su vínculo con el caso que involucra eventual financiamiento irregular de campañas, un grupo de militantes impugnó su nombramiento ante el Tribunal Supremo del partido, requerimiento que finalmente no fue aceptado.
