Pistas van tras el formateo de computadores del organismo
El miércoles la Bicrim visitó las dependencias del SII. Las medidas ordenadas por el Ministerio Público buscan dar con el servidor espejo donde podría estar la información y correos de los computadores de Julio Pereira y Mario Vila. Fuentes cercanas al caso señalan que se decretará el secreto de la causa.
Esta semana y en el más estricto sigilo la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) visitó las dependencias del Servicio de Impuestos Internos (SII). La búsqueda apunta a periciar el servidor espejo que contiene la información intacta de los e-mails del ex director del organismo, Julio Pereira, y del ex subdirector jurídico, Mario Vila.
La indagación, solicitada por el fiscal Marcelo Acuña, se enmarca dentro de la causa conocida como el “perdonazo” tributario a Johnson’s, que significó una millonaria condonación para esa empresa desde el SII. Sin embargo, tira de una hebra que lleva a un escenario insospechado.
Cuando a fines del año 2013 el Ministerio Público ordenó la incautación de computadores del organismo –entre ellos los de Vila y Pereira– estos no estaban en las oficinas, sino que una empresa externa, Adexus. En ese momento, las autoridades del SII explicaron tanto al OS9 de Carabineros, que llevó a cabo el procedimiento, como a la Fiscalía que era un hecho totalmente normal.
Sin embargo, hace tres meses, concurrieron hasta la Fiscalía dos ingenieros que trabajaban en la oficina de Informática del SII cuando ocurrieron los hechos. Ellos dieron cuenta de la irregularidad del formateo.
Según dio a conocer The Clinic en ese tiempo, el 20 de mayo, Víctor Plaza Farías –quien se desempeñó como subdirector de Informática del SII hasta que Pereira le solicitó la renuncia– declaró que “este proceso es muy poco frecuente; se hacía cuando un equipo tenía una cantidad tal de virus que no hacía conveniente mantenerlo en esas condiciones y lo mejor era borrar todo. Al formatear, se respaldaba la información. Lo que era más frecuente era cargar una imagen que consiste en instalar nuevamente el sistema operativo, pero sin haber hecho la función de borrado”.
Estas declaraciones fueron las que aceleraron la investigación y las diligencias que, según fuentes cercanas al caso, son “absolutamente cruciales” para definir el curso de la causa. Las mismas fuentes aseguran que lo más probable es que por estos días se decrete el secreto de la investigación.
