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Lagos se sube al carro de la nueva Constitución y dice que la actual «está impregnada por una visión neoliberal que obliga a tener un Estado Subsidiario» Piñera descarta cambio constitucional y se alinea con sectores más conservadores

Lagos se sube al carro de la nueva Constitución y dice que la actual «está impregnada por una visión neoliberal que obliga a tener un Estado Subsidiario»

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Macarena Segovia
Por : Macarena Segovia Periodista El Mostrador
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Los ex presidentes, Frei, Lagos y Piñera se reunieron con la Mandataria Bachelet para discutir respecto al proceso constituyente dado a conocer la semana pasada. El ex Presidente Frei señaló su oposición a la utilización de la Asamblea Constituyente como mecanismo para la Nueva Carta Fundamental, en tanto que Piñera indicó que le solicitará a Chile Vamos que presente una propuesta de reforma constitucional.


Esta tarde la Presidenta Michelle Bachelet se reunió con los ex mandatarios Ricardo Lagos, Eduardo Frei y Sebastián Piñera, con el fin de saber su parecer respecto a la propuesta del proceso constituyente que dio a conocer la Jefa de Estado la semana pasada.

Eduardo Frei señaló que «creo que nadie en Chile está en contra de un proceso de reforma Constitucional»,al tiempo que agregó que «es interesante la fórmula planteada, en cuanto a que es un procedimiento que escucha a la gente». Además recalcó la importancia del «proceso de educación cívica» y señaló que «sea un proceso dentro de la institucionalidad me parece fundamental».

El ex Presidente aseguró que «estamos dispuestos a colaborar. Esta Constitución es una camisa de fuerza que no sirve para el día de hoy».

Asimismo, explicó que entregó una propuesta para que sea parte de la discusión, la que plantea una mayor estabilidad entre el Poder Ejecutivo y Legislativo, se enfoca en la descentralización del país y la seguridad nacional.

Además, detalló que «la campaña del 2017 va a ser una campaña en la que nuevamente vamos a discutir a este tema» y enfatizó en que «no soy partidario de la Asamblea Constituyente, porque hay un ejemplo internacional que ha sido negativo, se convierte en un instrumento suprainstitucional».

Por su parte, Ricardo Lagos hizo un recorrido por los cambios que ha tenido la actual Constitución y señaló que esta es «la Constitución que utilizamos para derrotar a Pinochet», agregó que «la Constitución del 2005 fue un paso adelante, para recuperar la dignidad de Chile», la que permitió que los altos mandos militares dependan de la Presidencia de la República.

Para el ex Presidente Lagos el actual cambio constitucional significa «actualizar, poner al día la Constitución que pasó el test de la democracia del 2005». «Pero que está impregnada por una visión neoliberal que obliga al establecimiento del Estado Subsidiario», agregó.

También señaló que «lo que yo demandaría de la nueva Constitución, junto con discutir contenido, sin prejuicio del mecanismos», es que no haya un sesgo ideológico. «Así como no me gusta una Carta (Magna) ideológicamente sesgada –refiriéndose a la actual Constitución–, me parece que tampoco debemos tener una Constitución ideológicamente sesgada en el otro sentido».

También se refirió al concepto de la «hoja en blanco», e indicó que esto no significa que se «parte en cero», sino que «quiero tener una situación de igualdad de condiciones, si no hay acuerdo en lo que queremos cambiar, rige lo de hoy», «todos los chilenos tenemos que concordar un cuerpo constitucional (…) esperaría que en este debate ciudadano haya claridad en la opinión publica de lo que es una Carta Constitucional».

Finalmente, Sebastián Piñera fue enfático en manifestar que «hay que perfeccionar y no desmantelar la Constitución que hoy tenemos» e indicó que se necesita un cambio constitucional con «aprobación del Congreso y con un plebiscito ciudadano pueda constituirse en un marco que nos dé estabilidad y certezas».

De esta forma marcó una clara definición de apoyo hacia el discurso que han construido los sectores más conservadores de la derecha, como por ejemplo la oposición de la UDI frente al proceso constituyente que propuso la Mandataria. «Pensar en una nueva Constitución nos parece inconveniente y grave (…). En un momento de tensión y de crispación política Chile requiere de estabilidad institucional», dijo el presidente del gremialismo, Hernán Larraín, la semana pasada, tras una reunión con el ministro Burgos.

Así, Piñera se distancia de sectores más centrales de la derecha, como Evópoli, hasta de RN, que no cerró la puerta al cambio constitucional y esta semana se reunirá con la Democracia Cristiana para discutir el tema.

Además, Piñera recalcó que tras el cambio constitucional de 2005, el ex Presidente Lagos llegó a «afirmar que por fin teníamos una nueva Constitución y democrática».

Según el ex Jefe de Estado, «la propuesta que ha hecho el gobierno ha abierto un largo e incierto proceso de Constitución», el que va a coincidir con las elecciones municipales y parlamentarias.

De acuerdo al ex Presidente, la propuesta del gobierno «no aporta ningún contenido» y solo genera más desconfianza, más incertidumbre e inestabilidad, para Piñera el proceso de reforma «va a agravar el estancamiento que afecta hoy en día a la economía chilena»

El ex Mandatario dijo en dos ocasiones que propondría a «Vamos Chile» –en vez de «Chile Vamos»–, el nuevo conglomerado de la derecha, que genere su propio proyecto de reforma constitucional, que este sea enviado al Congreso y posteriormente, si es aprobado, se llame a consulta nacional.

«Estoy convencido de que lo que quiere Chile hoy es confianza, estabilidad y certeza (…) para volver a poner a poner a Chile en la senda del progreso», aseguró.

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