En marzo de 2011 cuando fue publicada esta nota, existían dudas sobre si el renunciado presidente del fútbol sabía de la escandalosa situación del su ex jefe, condenado a 15 años de cárcel, quien lo puso en la órbita de la federación de fútbol como dueño de Unión La Calera.
Cuando Sergio Jadue Jadue aceptó ser presidente de la ANFP sabía que existía una querella en su contra por estafa y defraudación. Fue presentada el 11 de mayo de 2010 en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, pero la jueza se declaró incompetente y fue derivada al Juzgado de Garantía de La Calera por un asunto de territorialidad.
Jadue debía suponer que la escandalosa situación del dueño de Unión La Calera, Tomás Serrano Parot, iba a terminar salpicándolo. La querella del agente Juan Carlos Vera por el no pago de una comisión de US$ 10 mil por el préstamo del jugador Diego González al Cruz Azul de México, está dirigida también contra Serrano, el mayor accionista de La Calera, con 47% de las acciones. El 9 de marzo de 2011 Jadue y Serrano se vieron las caras en el juzgado.
Ex dueño de la quebrada corredora de bolsa que heredó de su fallecido padre, Raimundo Serrano Mac-Auliffe, hombre de trayectoria impecable, tiene 25 querellas a su haber. En abril de 2015 la Corte de Apelaciones confirmó su condena a nueve años de presidio por uso indebido de fondos en custodia y seis años por estafa.
adue fue nombrado presidente de Unión La Calera por el directorio en 2009, el mismo año en que estalló el que es considerado el mayor fraude bursátil de los últimos años. La estafa alcanza, al menos, a $20 mil millones, de los cuales $12 mil 500 millones se encuentran acreditados por el Ministerio Público
El modus operandi de Serrano consistía en usar las acciones que sus clientes dejaban en custodia a la corredora para realizar negocios que la Ley de Valores no le permite. Entre ellos, la compra de canales de TV, bienes inmobiliarios y, por cierto, de Unión La Calera y de Deportes Ovalle. En simple, una bicicleta, cuyos alcances aún se desconocen y cuyos protagonistas van en aumento.
Al tenor de los hechos resulta insólito que Jadue se desligara de quien fuera su jefe diciendo: “Tomás Serrano es accionista igual que yo. No me puedo hacer cargo de errores de otros”.
Los dirigentes de la ANFP también conocen el prontuario del dueño del club, pero por lo visto callan.
Tres de los siete directores de Unión La Calera están formalizados. Serrano lo fue en noviembre del 2009, por uso indebido de custodias, falsificación de balances a la Superintendencia de Valores y Seguros y apropiación indebida de valores. En la misma fecha, también fue formalizado Luis Núñez, actual vicepresidente del club, ex jefe de contabilidad y supervisión de la clausurada corredora, por entregar información falsa a la SVS. Núñez es el tercer mayor accionista de La Calera con un 11.95%, y estuvo preso junto a Serrano.
El 21 de noviembre pasado, Jorge Fuenzalida Barraza, segundo accionista del club, con un 24% y ex gerente general y socio de la corredora, fue formalizado por los mismos delitos que Serrano
“Éticamente es impresentable pese a que legalmente se puede”, sostiene el abogado Darío Calderón, quien representa junto a Luis Hermosilla a 17 personas estafadas por Serrano.
El caso estalló el 15 de mayo de 2009 cuando Luis Felipe Lanas, dueño de una automotora, denunció que la corredora no le entregó $ 1.600 millones en acciones que tenia en custodia. A partir de entonces, se fueron sumando clientes, desde grandes empresas a deportistas, quienes se encontraron con que sus acciones habían desaparecido.
Cuando Arturo Chahuán, dirigente histórico del club e hijo de unos de sus fundadores, renunció en 2007 para unirse al directorio de Harold Mayne-Nicholls, entró en su reemplazo Sergio Jadue Jadue. Cuenta que junto a José García, otro histórico, llevaron a un grupo de jóvenes a ayudar antes de que La Calera se transformara en sociedad anónima, cosa que ocurrió en septiembre de 2006. “Él era uno más, participaba en labores menores y con su modo arrollador llegó a donde llegó”, dice Chahuán.
Para algunos, en su historia personal podría radicar el afán de ascender del presidente de la ANFP, quien, a tres días de la denuncia de Zoom Deportivo, anunció que pedirá la renuncia a los dirigentes Luis Faúndez, Gonzalo Febrer y Claudio Daud.
Sin trabajo conocido, con estudios inconclusos de derecho en Viña, cumplir labores en el club debe haber sido una oportunidad. En La Calera todos conocen su compleja historia familiar: el padre de Jadue se casó con su madre, tuvo dos hijos, pero los abandonó tempranamente para trasladarse al extranjero en busca de mejores horizontes. En vista de la larga ausencia, Jadue decidió cerrar ese capítulo cambiándose el apellido de su padre, Sergio Cortés, por el de su madre. Su hermana lo conservó.
Ni él ni su familia directa poseen una situación económica holgada. Viven del apoyo de la abuela materna. Según consta en la declaración judicial de Luis Núñez, uno de los directores formalizados, al repartirse los $400 millones que pagó el cuestionado Miguel Nasur, dueño de Santiago Morning, por un terreno de 12 hectáreas a Unión La Calera, las platas se usaron para cumplir diversas obligaciones, incluido el pago de $4 millones al mismo Núñez, a Serrano, Fuenzalida y “Jadue recibió algo, ya que necesitaba vivir”. Él posee un 0.008% del club. Nasur le compró a Serrano Deportes Ovalle.
La Superintendencia sigue en forma paralela una investigación por entrega de información falsa en contra de Serrano. Y recientemente amplió los cargos a los directores formalizados Luis Núñez y Jorge Fuenzalida además del ex abogado de la corredora, Ernesto De Val.
Sin embargo, no objetó que durante los años 2007 y 2008 los balances de Unión La Calera no aparecieran auditados por un ente independiente como ocurre en cualquier sociedad anónima abierta.
A juzgar por los hechos, sólo puso atención al primero, del año 2006, auditado porEscobar y Merino, la misma firma que revisaba los balances de la quebrada corredora Raimundo Serrano McAuliffe. La compañía fue sancionada con 300 UF por no haber seguido las normas de control de calidad mientras el socio José Escobar, quien firmó el reporte, fue sancionado con 200 UF.
En 2009, el club contrató a un contador auditor –lo normal es que sea una empresa- que parece disculparse más que supervisar. “Esta auditoria constituye una base razonable para fundamentar mi opinión de que los estados financieros presentan razonablemente la situación financiera del Deportes Unión La Calera SADP al 31 de diciembre de 2009”.
El club tampoco envió al regulador los hechos esenciales informando los cambios en el directorio. O bien la SVS no los actualizó. Los datos de la página web del regulador están casi todos malos. Aparecen nueve miembros en lugar de siete. Y dentro de los siete hay dos nuevos no incluidos. Y como presidente figura Jorge Fuenzalida, que es director, y Jadue no debiera estar en la lista, ya que asumió en la ANFP. Y el gerente general ya no es Cristián Zúñiga, porque ahora es director. Demasiados errores para un asunto tan simple.
¿Qué papel juega Jadue en este partido? Considerando que el directorio se fue acotando hacia personas de máxima confianza de Serrano -todos ex ejecutivos de la cuestionada corredora- su responsabilidad era mayor. A menos que supiera y callara. O que se le haya pasado.