Señala que «en tres o cuatro meses más se sabrá cómo se resuelve esto»
El ex ministro y lobbista también apunta a la derecha, explicando que «usar el sistema judicial para sacar ventaja política sobre otro, para ganarle al otro, es una manera muy mala de hacer las cosas, una manera de deformar la justicia y de deformar la política. Lo que pase en cualquiera de sus aristas afecta a las demás, sean de la corriente política que sean. Por eso, usar estos juicios políticamente no sólo es un acto innoble, también es un error profundo”.
El ex ministro de la Segegob en el gobierno de Patricio Aylwin y dueño de Imaginacción Consultores, Enrique Correa, le quitó dramatismo a la crisis de confianza que atraviesa el país en las instituciones y señala que el financiamiento irregular de la política «no es corrupción».
En ese sentido, Correa sostiene que los casos que afectan actualmente a políticos por aportes irregulares de grupos económicos ya se han normalizado y que ahora hay que observar con «serenidad el curso del proceso judicial».
En entrevista con La Tercera, el lobbista admite la existencia de una gran crisis de confianza en al interior de las elites y de la ciudadanía respecto a las elites, añadiendo que es necesario reconstruir la confianza del empresariado hacia el gobierno, porque esta es la «madre de todas las confianzas y tiene un impacto en la gente. Cada vez que se ha trizado, se ha debilitado o derechamente se ha quebrado, es el país el que ha sufrido».
Explica que Chile es un país de clase media que aspira a una prosperidad mayor y cuando «el nivel de desconfianza entre empresarios y gobierno llegó a su máximo nivel, el país terminó viviendo un horror».
Respecto a si el fallo que condenó al histórico dirigente de la UDI, Jovino Novoa, podría marcar un antes y un después en las investigaciones por financiamiento ilegal de la política, Correa explica que «en tres meses más deberíamos conocer la proporción de todo lo ocurrido, los acuerdos alcanzados con la fiscalía, los nombres de los formalizados y de quiénes van a ser incluidos en la acusación. Tengo la impresión de que los procesos judiciales ya tomaron su cauce más normal y no veo más dramatismo. Hay que esperar que el Ministerio Público haga bien su trabajo”.
El ex ministro afirma que en los casos de financiamiento irregular de la política fueron los propios políticos lo que se autoinfringieron un daño muy grande al «aceptar que sean calificados de corrupción pura y simple».
Agrega que «es claro que el financiamiento de la política debe ser reformado, que debemos cerrar definitivamente esos espacios que permitieron formas irregulares, engañosas, informales -póngale el nombre que quiera- de financiamiento político, pero no es corrupción».
Sobre ese tema, Correa explicó que corrupción supone el intento de enriquecimiento personal ilícito y eso es distinto a lo que pasó en los casos de financiamiento de campañas, pero aclara que «no estoy diciendo que las cosas estuvieron bien hechas, ni que no se debe legislar para cambiarlas. Pero habernos autoinferido este daño como país al decir que todo esto era corrupción, el que la propia elite transmitiera a la gente que todos son corruptos, fue un gran error».
El ex secretario de Estado también apunta a la derecha y el uso que pretende dar a las investigaciones por el caso SQM, indicando que «usar los temas judiciales para resolver los temas políticos es muy mala idea».
Y añade que «usar el sistema judicial para sacar ventaja política sobre otro, para ganarle al otro, es una manera muy mala de hacer las cosas, una manera de deformar la justicia y de deformar la política. Lo que pase en cualquiera de sus aristas afecta a las demás, sean de la corriente política que sean. Por eso, usar estos juicios políticamente no sólo es un acto innoble, también es un error profundo”.
