Declara este lunes ante el Ministerio Público por caso SQM
Para algunos dirigentes políticos, la larga estadía de Marco Enríquez-Ominami fuera del país pudo haberle servido para evadir la tormenta en la que se encontraba tras las citaciones y revisiones de sus cuentas bancarias por parte de la PDI y la Fiscalía, en el marco del caso SQM; sin embargo, otros consideran que cometió el mismo error que criticó duramente al ex candidato presidencial Andrés Velasco, cuando salió a la luz su vinculación con Penta.
«La posición de la derecha y de Velasco es siempre decir ¡aquí está el rigor y aquí están las cifras! y es eso lo que se cae a pedazos». Con estas palabras Marco Enríquez-Ominami criticaba duramente al líder de Fuerza Pública (hoy llamada Ciudadanos) y ex candidato presidencial Andrés Velasco, en octubre de 2014, cuando el ex ministro tuvo que enfrentar a la justicia por el caso Penta. Ahora a ME-O vive una situación muy similar a la de Velasco, ya que este lunes, a las 09:00 horas, deberá presentarse ante el Ministerio Público, en calidad de imputado, para declarar por el denominado caso SQM.
ME-O regresó al país luego de estar fuera cerca de 90 días, situación similar a la que protagonizó Velasco, quien estuvo varios días en Estados Unidos antes de testificar en el caso Penta.
Para algunos dirigentes políticos, la estadía del líder del PRO fuera del país puede haberle servido para «submarinearse» en medio de la tormenta de citaciones y revisiones de sus cuentas bancarias por parte de la PDI y la Fiscalía, pero hay otros que creen que cometió el mismo error que Velasco cuando se hizo pública su vinculación con la compañía de Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano.
En esa ocasión, el ex ministro optó por no viajar a Chile apenas estalló la crisis en torno a su figura, lo cual fue evaluado negativamente por algunos analistas, lo que se vio reflejado en las encuestas que mostraron una baja en su nivel de adhesión.
Los ataques que ME-O hizo contra Velasco durante ese periodo, podrían ser considerados como un arma de doble filo contra el líder del PRO, debido a que fue insistente en criticarle su permanencia fuera del país y no aclarar lo ocurrido con Penta, como también el hecho de mantener su discurso de «malas prácticas».
«Está garantizado en la Constitución su derecho a seguir expresando su discurso hasta que le dé la gana y el país tendrá que evaluarlo. ¿Dónde está el problema? Había una información relevante y él no ha querido aclararla. La posición de la derecha y de Velasco es siempre decir ¡aquí está el rigor y aquí están las cifras! y es eso lo que se cae a pedazos. Los que se reivindicaban con el monopolio de la experiencia y en este caso de la moral, porque hablaban de ‘buenas y malas prácticas’, tú descubres que ellos mismos recurrían a mecanismos de financiamiento para sus vidas –eso habrá que verlo– o para la política con un grupo económico que no es neutro, que está metido en la salud , que está metido en la previsión, que está en todos los sectores en controversia», expresó el 17 de octubre de 2014 al diario La Segunda.
En tal ocasión, agregó que ese detalle «me abrió una gran desconfianza respecto de estos políticos en general, léase dirigentes de la UDI y Andrés Velasco».
Incluso, el 4 de octubre lo conminaba –en declaraciones que recogía La Tercera– a que se pronunciara sobre las acusaciones en el caso Penta, añadiendo que «es raro que yo esté aquí hablando de un tema que no me compete a mí, le compete a él. Yo creo que lo sano es que él responda y su silencio no es sano. No es una buena práctica quedarse callado cuando uno es interpelado”.
[cita tipo= «destaque»]Los ataques que ME-O hizo contra Velasco durante ese periodo, podrían ser considerados como un arma de doble filo contra el líder del PRO, debido a que fue insistente en criticarle su permanencia fuera del país y no aclarar lo ocurrido con Penta, como también el hecho de mantener su discurso de «malas prácticas».[/cita]
ME-O concurrirá a las oficina de la Fiscalía este lunes, a las 09:00 horas, para responder las preguntas que se centrarán en sus posibles vínculos con facturas por $362 millones que SQM pagó a su ex mano derecha, Cristián Warner, como también sus reuniones con el gerente general de la minera no metálica, Patricio Contesse, y los correos electrónicos donde se les menciona a propósito de los pagos a Warner.
La situación que afecta al ex abanderado del PRO también podría repercutir en su futura campaña presidencial, por lo que su equipo está trabajando en lo que será su declaración y así disminuir el impacto que pueda tener su vinculación con el caso SQM.
Además, el daño que ha provocado este hecho también ha repercutido en su relación con la Nueva Mayoría, lugar en el que busca posicionarse como la mejor carta para enfrentar las próximas elecciones presidenciales.
Cabe recordar que la declaración de Enríquez-Ominami sufrió dos retrasos anteriores, ya que la primera citación estaba programada para el 22 de octubre, ocasión en que su abogado, Ciro Colombara, solicitó una copia de la carpeta investigativa para preparar su testimonio.
Para la segunda oportunidad, la Fiscalía le solicitó que concurriera el 30 de noviembre, fecha que nuevamente fue postergada porque tanto el ex abanderado presidencial como su abogado se encontraban fuera del país.
Finalmente, ME-O debía presentarse en una tercera oportunidad, pero –a través de un mensaje en su cuenta de Twitter– se desligó de cualquier responsabilidad por este retraso, indicando que «es importante transparentar que mi declaración de esta semana se postergó por razones ajenas a mí”, añadiendo que “mantengo disposición total a colaborar”.
