Trece personas se han declarado culpables, entre ellos el ex timonel del fútbol chileno, aceptando cooperar con la fiscalía a cambio de beneficios como la reducción de las penas.
Ante la justicia federal de Nueva York la FIFA interpuso una demanda para recuperar millones de dólares desviados en sobornos para los ex dirigentes de Concacaf y Conmebol procesados en la causa de corrupción.
En la lista de quienes deberían devolver parte de lo que recibieron mientras ejercían sus cargos, aparece Sergio Jadue, ex presidente de la ANFP que viajó a Miami en noviembre pasado a colaborar en la investigación de corrupción en la federación internacional del fútbol, en calidad de culpable confeso.
Según el documento del rector del balompié mundial el calerano debería reponer una suma de US$12.587, algo más de $8 millones, lejos de las cifras que ha trascendido que se desviaron.
“Al privar a la FIFA de servicios honestos, los acusados obtuvieron dinero de la FIFA de manera injusta en forma de salarios, bonos, beneficios y otras compensaciones», afirma la denuncia, precisando que la organización «tiene derecho a la restitución de esos montos», según constata Emol.
La lista incluye a casi todos los ex dirigentes de la Concacaf y la Conmebol que integraron en algún momento el Comité Ejecutivo de la FIFA u otros cargos de la organización. A Ricardo Teixera, ex presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol, se le exigen más de US$3,5 millones mientras que al colombiano Luis Bedoya, ex vicepresidente de la Conmebol que ya se declaró culpable, se le exigen US$517.843. Jadue está entre los que menos dinero deben pagar.
La denuncia presentada por la FIFA subraya la corrupción en la Concacaf y la Unión Centroamericana de Fútbol, UNCAF, en la venta de derechos de comercialización de partidos clasificatorios para la Copa del Mundo. La FIFA apunta a los acusados por aprovecharse del «prestigio» del Mundial para «llevarse dinero y negociar sobornos» por cientos de miles de dólares.
Trece personas se han declarado culpables, entre ellos el ex timonel del fútbol chileno, aceptando cooperar con la fiscalía a cambio de beneficios como la reducción de las penas.
