A las 23:59 horas del miércoles 20 se vencía el plazo de inscripción para las primarias municipales legales y Allende llegó al Servel con casi 15 minutos de retraso de la hora límite, en circunstancias que en las dependencias del servicio estaban todos sus pares de la Nueva Mayoría. Visiblemente complicada, la timonel PS explicó que sus asesores le plantearon que no era necesario que estuviera presente en esa etapa del proceso y reconoció que debido a la serie de actividades que realizó en el marco de los funerales del ex Presidente Patricio Aylwin , así como por las intensas negociaciones electorales, decidió descansar y no estar presente.
No hay registro de un error así, salvo el criticado episodio el año 2001, cuando la DC inscribió erróneamente su lista de candidatos a diputados y senadores para los comicios de ese año. Esa es la magnitud del “bochorno” que protagonizó anoche la Nueva Mayoría, luego que fuera incapaz de cumplir con el plazo ante el Servicio Electoral para inscribir legalmente las nóminas para las primarias municipales del 19 de junio y la responsabilidad recae directamente en la timonel del PS, Isabel Allende, lo que abre una vez más el flanco de críticas a sus falencias de gestión como dirigenta.
Desde primeras horas de la mañana, se cruzaron las llamadas telefónicas en la Nueva Mayoría y entre todos los dirigentes rondó hoy el fantasma del 2001, que llevó a que el entonces presidente de la DC, Ricardo Hormazábal, y toda su mesa directiva renunciaran para asumir la responsabilidad política que les correspondía por el grave error de dejar a la falange sin candidatos parlamentarios, por lo que fue necesario un acuerdo político y una ley exprés –donde la UDI y Pablo Longueira fueron claves– que corrigiera el problema.
A las 23:59 horas del miércoles 20 se vencía el plazo de inscripción para las primarias municipales legales y Allende llegó al Servel con casi 15 minutos de retraso de la hora límite, en circunstancias que en las dependencias del servicio estaban todos sus pares de la Nueva Mayoría. Visiblemente complicada, la timonel PS explicó que sus asesores le plantearon que no era necesario que estuviera presente en esa etapa del proceso y reconoció que debido a la serie de actividades que realizó en el marco de los funerales del ex Presidente Patricio Aylwin, así como por las intensas negociaciones electorales, decidió descansar y no estar presente.
Las explicaciones son totalmente insuficientes y en privado en el PS esta mañana no daban crédito a lo sucedido. “Es la negligencia más grave y grande que se ha cometido, no hay antecedentes de algo así”, reclamaron en el seno del socialismo y diversas fuentes coincidían en señalar como los responsables directos de esta equivocación al secretario general del PS, Pablo Velozo, y al ex vocero de Gobierno, Álvaro Elizalde, quien fue mandatado por Allende para negociar con los aliados de la Nueva Mayoría.
En el PS –desde distintas corrientes internas– insisten en que ambos le dijeron a la timonel que no era necesaria su presencia en el Servel, que incurrieron en esa mala asesoría por inexperiencia y producto del poco convencimiento de ir a dichas primarias, ya que no habrían tenido la “muñeca política” ni el peso suficiente para conducir las negociaciones de una forma favorable para el partido, dejando que la DC impusiera sus términos sin contrapesos. Otros, sin embargo, niegan que Elizalde haya siquiera hablado del punto con Allende y que incluso habría recomendado asistir «por si las moscas», aunque legalmente esto no fuese requisito exigible.
Elizalde se defendió, negó esa versión y dijo a El Mostrador que efectivamente no era necesaria la presencia de Allende, y que “el Servel excedió sus atribuciones legales porque el pacto fue declarado con todas las formalidades que establece la ley”.
Pero entre quienes sí estuvieron en el Servel la noche del miércoles, afirman que Elizalde sí habría estado de acuerdo con que Allende no estuviera presente ya que, según creían, de acuerdo a experiencias anteriores como la de 2013, no era necesaria la concurrencia de los presidentes de partido. Velozo, en tanto, habría puesto su cargo a disposición de la timonel PS ya entrada la madrugada, decisión que tomó visiblemente afectado por la equivocación y por las consecuencias que esto tendría.
El antecedente de Hormazábal no es un elemento menor, porque deja a Allende en una complicada situación, que revive las críticas internas tanto en el PS como en el resto de la Nueva Mayoría a los problemas de liderazgo que ha evidenciado la senadora desde que asumió las riendas del partido.
Básicamente se le cuestiona falta de reacción y de liderazgo, su insistencia por esquivar el conflicto ha llevado a desdibujar la posición del PS en los temas de discusión nacional, como también el hecho de estar rodeada de un equipo de asesores sin la experiencia necesaria ni el peso político que demanda una conducción nacional, lo que ha quedado en evidencia varias veces en la falta de visión política. Hay quienes temen que este error de la inscripción ponga en tela de juicio sus aspiraciones presidenciales, su opción como carta para el 2017.
Será clave cómo reaccionarán las bases del PS, donde ya se habría manifestado molestia por lo ocurrido, ya que se verían perjudicadas las aspiraciones de varios candidatos.
El presidente del Senado, Ricardo Lagos Weber, calificó como «bochornoso» que la Nueva Mayoría no se inscribiera: «Es cierto, se pueden hacer primarias convencionales, pero eso va a requerir mucho esfuerzo y mucha voluntad. Si no fuimos capaces de ponernos de acuerdo para llegar a la hora a inscribir las candidaturas para las primarias legales, porque parece que no había acuerdos, me imagino el esfuerzo que habrá que hacer para tener primarias convencionales (…) si somos los que más hemos abogado por primarias, la Nueva Mayoría o Concertación, somos los que más hemos hecho primarias en Chile, lo de ayer, habrá que esperar la explicación de los dirigentes que fueron parte del proceso para saber qué ocurrió, pero mi primera impresión es que es bochornoso».
El timonel del PPD, Jaime Quintana, en entrevista con T13 sostuvo que “tenemos un problema muy serio, esto es un bochorno democrático sin lugar a duda y hay que decirlo con todas sus letras: aquí no estuvimos a la altura”.
El jefe de la bancada de diputados del PS, Juan Luis Castro, agregó que esta era una situación “inaceptable”, porque “todos conocían las reglas del juego y la nueva reglamentación. Por eso me parece absolutamente condenable que la Nueva Mayoría no haya sido capaz de inscribir sus candidatura a las primarias, debido a un conjunto de errores (…) esto es una vergüenza nacional y, al igual que Condorito, exijo una explicación”.
El presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade (PS), puso paños fríos y dijo que, si bien se había cometido un error, este había sido reconocido, mientras que Quintana, a pesar de las críticas no quiso apuntar los dardos a la figura de Allende y justificó que cualquier colectividad pudo cometer una equivocación así.
Cerca de las 09:30 horas de hoy, los presidentes de los partidos de la Nueva Mayoría llegaron nuevamente hasta la sede del Congreso Nacional en Santiago para sostener una reunión de emergencia para resolver esta situación y un camino a seguir.
A la salida, Quintana dijo que «nuestros antecedentes no fueron recibidos por el Servel, estamos revisando la ley, y estamos verificando que la ley no establece ni exige una comparecencia personal sino documental y esos documentos no fueron recepcionados por el Servel mucho antes de las 00:00 horas». Agregó que «estamos analizando del punto de vista jurídico, con los secretarios generales, con nuestros abogados y no descartamos usar la vía judicial, porque estamos convencidos de que no hemos incurrido en ningún hecho irregular y hemos actuado de completa buena fe, aquí no faltó ningún papel (..). Es de público conocimiento que el Servel se negó a recibir nuestros antecedentes», sostuvo.
En el propio PS reconocen que la alternativa en estos momentos es precisamente apelar al Servel para que acepte la inscripción de candidatos fuera de plazo.
El timonel del PC, diputado Guillermo Teillier, comentó que «llegamos con los papeles al Servel con las debidas firmas de los presidentes y secretarios, y la directora no quiso recibir los papeles porque dijo que faltaba un presidente de la coalición».
Toda la negociación en la Nueva Mayoría fue tensa y eso quedó en evidencia cuando el miércoles aplazaron la pauta original de los timoneles del bloque para asistir al Servel en la tarde hasta las 21 horas. Es que los secretarios generales se reunieron ayer en la sede del Congreso de Santiago desde las 15:00 horas y por más de tres horas tratando de llegar a acuerdo, cita que terminó en una profunda división, debido a que –explicaron algunos de los presentes– la DC desconoció un acuerdo previo no oficializado y sostuvo que no estaban dispuestos para respaldar las primarias en varias comunas.
La Democracia Cristiana habría mantenido la tesis de que solo se realizaran comicios en aquellas comunas donde había más de un candidato oficialista y actualmente gobierna un alcalde de oposición, generando la dinámica en las otras comunas de “el que tiene, mantiene”. Situación que generó el rechazo del PR, el MAS, la IC.
Tras la situación, por ejemplo, los dirigentes del Partido Radical definieron en una reunión en el despacho del senador Alejandro Guillier, en la sede de Santiago del Congreso, rechazar el acuerdo y no firmar nada. Tras varias conversaciones posteriores, en las que se determinó abrir nuevas comunas para las primarias legales, cerca de las 23 horas los radicales aceptaron firmar el acuerdo, no sin antes oficializar su salida de la lista para concejales que habían acordado hace varios meses junto al PPD y al PC. Ahora los radicales compartirán espacio en la papeleta junto a la IC y el MAS.
Pero nada de la tensa reunión sirvió para destrabar la situación, ya que finalmente el retraso de Allende terminó por echar por la borda todas las tratativas.