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El guardián de los intereses de la elite económica Ricardo Lagos y las reformas pro empresariado en su Gobierno 2000-2006

El guardián de los intereses de la elite económica

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Los multifondos, la creación de la Ley de Acreditación, el CAE, el fortalecimiento de la Ley Antiterrorista en la zona de las forestales y el millonario préstamo de BancoEstado al grupo Luksic, figuran entre las iniciativas impulsadas durante la administración del ex Presidente. Según señalan críticos a su gestión, este es parte del legado que hace que los aplausos se concentren en el poder económico.


Los gritos se sucedieron uno tras otro: «Ha endeudado a una generación entera vendiendo la educación a la banca privada», «seis bancos tienen el monopolio de la educación», «hay miles de embargados». El viernes antepasado, un grupo de integrantes del Movimiento Deuda Educativa –que agrupa a profesionales deudores de la educación chilena provenientes de diversas instituciones públicas y privadas– realizaron una funa en contra del ex Presidente Ricardo Lagos, cuando este llegaba a las dependencias de Radio Cooperativa.

Ya era sabido que hablaría como presidenciable y los ex estudiantes quisieron hacer guardia para enrostrarle su participación en un sistema que mantiene como rehenes deudores a miles de jóvenes. «Nos manifestamos en contra de Ricardo Lagos Escobar, a quien consideramos un verdadero criminal de la educación, quien junto a su ex ministro de la Educación, Sergio Bitar, no tuvieron ningún asco en endeudar a más de un millón de personas. Familias humildes que no tuvieron otra forma de acceder a la educación superior si no era utilizando lo que se nos prometió como un beneficio social y que resultó ser nada más ni nada menos que un crédito de consumo, como lo es el Crédito con Aval del Estado (CAE)», dijo Juan Pablo Rojas, coordinador nacional del movimiento.

El CAE, aprobado durante su gestión, estuvo en el corazón de las demandas estudiantiles el año 2011, debido a la opresión que ha significado para millones de bolsillos estudiar con este instrumento con una tasa cercana al 6% –hasta que eso fue rebajado por el Gobierno de Sebastián Piñera– y tomando en consideración lo bien que le fue a la banca.

El año 2006, cuando comenzó a operar el crédito, la Comisión Ingresa –institución que administra el crédito– había entregado $26 mil millones a las universidades, una cifra que ascendió hasta $150 mil millones en 2013. Las instituciones financieras también se habían beneficiado: entre 2006 y 2011, los siete bancos que habían intermediado obtuvieron $150 mil millones de ganancia.

Para los afectados, no solo el CAE es un ejemplo de la vinculación de Lagos con el poder económico. Para el movimiento estudiantil este crédito no actuó solo, sino que la implementación de la Ley de Acreditación también ayudó “para definir de forma tecnocrática cuál era una buena universidad”, señala el ex presidente de la Fech y vocero de Izquierda Autónoma, Andrés Fielbaum. “Ha sido un desastre no solo por su funcionamiento sino porque ha permitido pasarles una cantidad enorme de plata, vía esa ley justamente, a las universidades empresariales. El lucro se consolidó en la administración Lagos, tanto con el CAE como con la Ley de Acreditación”, puntualiza Fielbaum.

Lagos lovers

El entonces presidente de la CPC, Hernán Somerville, lo dejó claro en su minuto con su célebre frase de “mis empresarios aman a Lagos”. El ex Fiscal Nacional Económico durante su mandato, Francisco Fernández, ex PS, es tajante: “Lagos era el regalón de los empresarios. Los benefició en todo lo que pudo”.

El abogado, que renunció al cargo molesto por presiones pro empresa que venían directamente del entonces Presidente, señala que este “tuvo una actitud muy favorable al empresariado nacional, pero también a las transnacionales, a través de las empresas extranjeras con inversiones en Chile, a las que les prodigó, según la experiencia que tuve en la Fiscalía, un trato muy diligente y favorable”.

Para Fernández, Lagos, como carta presidencial, “es como el retorno de lo más conservador de la antigua Concertación. El que llevó adelante algunas reformas políticas que no se pueden desconocer en su importancia, pero que al mismo tiempo contribuyó a agudizar los estándares de desigualdad en Chile. Por ejemplo, en relación con la redistribución del ingreso: no tomó medidas propias de un Gobierno progresista de centroizquierda, como podría haber sido hincarles el diente a las pensiones. Ahora viene a hablar sobre pensiones, cuando durante su Gobierno no hizo ningún intento por modificar el injusto sistema de capitalización individual que tiene a las pensiones por el suelo”.

El ex Fiscal Nacional Económico agrega que “siento que Ricardo Lagos entraña muy bien lo que es el sector de derecha de la antigua Concertación: un sector que quiere mantener las cosas tal como están y hacer correcciones al margen, pero sin ir al fondo medular de los problemas”.

En el contexto de esas correcciones –apuntan quienes creen que ayudó a consolidar el poder de la actual élite–, la creación de los multifondos en el sistema de AFP es un ejemplo de ello.

En agosto del año 2002 comenzó a operar el sistema que ofrecía que, a partir de entonces, los 6 millones 500 mil afiliados en el sistema de Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) podrían optar al nuevo sistema de multifondos de inversión, una iniciativa contenida en la reforma al mercado de capitales impulsada en la administración Lagos. La idea era que cada AFP manejara cinco fondos de pensiones distintos (denominados A, B, C, D y E), diferenciados por las proporciones invertidas en acciones. Sin embargo, para los detractores del sistema, esto no llevó más que a consolidar el negocio de los privados.

Para Ricardo Hormazábal, quien entonces era presidente de la Democracia Cristiana y ya insistía en la eliminación del sistema de pensiones, la creación de los multifondos no fue más que un “maquillaje”. “Tanto el Gobierno de Lagos como el de Frei mantuvieron el sistema. Lagos podría haber hecho un cambio radical, pero no creía en él”, afirma Hormazábal.

Luis Mesina, vocero de la Coordinadora No + AFP, dice que es evidente que Lagos fue, quizás, uno de los mayores impulsores del fortalecimiento el sistema de ahorro de capitalización individual al crear los multifondos. “Sin la creación de estos, las AFP quizás habrían desaparecido antes. El APV logró que la gente de mayores ingresos aprobara las AFP, porque es una franquicia que permite que la gente con más plata recaude recursos sin pagar impuestos. O sea, de alguna forma los pobres financian a los más ricos que sí pueden tener APV. Con los multifondos, Lagos liberó a las empresas de asumir el costo cuando no lograban rentabilizar y les traspasó el riesgo a los usuarios”.

BancoEstado se pone

El primer año en que Lagos ejerció la Presidencia de la República, Banco Estado entregó un millonario préstamo al grupo Luksic: US$ 125 millones de dólares de la época (UF 4,6 millones), que fueron invertidos en la compra de acciones al Grupo Penta –ligado a Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín– para tomar definitivamente el control del Banco de Chile.

El crédito, que benefició al grupo Luksic –reconocido como un infaltable donante de las últimas campañas parlamentarias y presidenciales a través de diversas sociedades y filiales– se aprobó solo 13 días después que el grupo firmara el acuerdo con Penta, y fue cuestionado públicamente. Incluso fue calificado, por los entonces diputados democratacristianos Pablo Lorenzini y Jaime Jiménez, como “el más grave acto de corrupción de los últimos 20 años”.

En ese tiempo era presidente de BancoEstado el PS Jaime Estévez, que en 2007 –a los pocos meses de haber concluido el periodo de Lagos– aterrizó cómodamente en el directorio del Banco de Chile, cargo que mantiene hasta hoy.

Para justificar la transacción, luego de que los parlamentarios DC quisieron saber los detalles de tal operación, Estévez manifestó que “con los empresarios hacemos negocios, vemos sus balances y les cobramos, pero con los pobres no. Hay cien comunas donde nadie más va y nosotros tenemos que estar en todo el país. El Banco del Estado va a competir y vamos a tratar de estar en todos los grandes negocios”. Y se negó a entregarlos, amparado en la Ley de Bancos.

Angelini

La contaminación del Río Cruces, provocada por la planta de Celulosa Arauco en Valdivia, de propiedad del grupo Angelini, marcó otro hito del Gobierno de Lagos en torno a la élite económica. Comentario obligado fue la visita que el propio Anacleto Angelini hizo a La Moneda, a fin de negociar con el Primer Mandatario, en medio del escándalo que había provocado la masiva muerte de cisnes de cuello negro.

José Araya, histórico miembro de “Acción Por los Cisnes”, recuerda que “la gestión de Lagos en este caso fue generar una serie de acciones institucionales para que la planta siguiera funcionando. Nunca mostró mayor interés por la contaminación ni por los derechos de las comunidades locales, ni el tremendo impacto que significó para Valdivia y el territorio de Los Ríos”.

[cita tipo=»destaque»]Para Ricardo Hormazábal, quien entonces era presidente de la Democracia Cristiana y ya insistía en la eliminación del sistema de pensiones, la creación de los multifondos no fue más que un “maquillaje”. “Tanto el Gobierno de Lagos como el de Frei mantuvieron el sistema. Lagos podría haber hecho un cambio radical, pero no creía en él”, afirma Hormazábal.[/cita]

Araya, que también es miembro del Observatorio Ciudadano, sostiene que Lagos “siempre fue promotor y defensor de la industria forestal en el sur. Una actitud muy distinta a la mano dura que mostró con el mundo mapuche, con la aplicación de la Ley Antiterrorista, que no tenía que ver con la demanda de tierras sino que en la práctica buscaba frenar la demanda social ligada al modelo de industria forestal. En el fondo fue decirles a las familias Matte y Angelini que su Gobierno estaba dispuesto a hacer todo lo posible para frenar la demanda mapuche”.

Si bien la Ley Antiterrorista se creó durante la Dictadura, fue en el mandato de Lagos cuando se fortalecieron los argumentos jurídicos para su uso contra la causa mapuche, pues tiene un carácter punitivo más fuerte y de mayor alcance que la ley común.

En 2002 se presentaron las primeras querellas por parte de su Gobierno, que derivaron en dos procesos investigativos en contra de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM). Uno, que tuvo más resonancia pública, en la IX Región, conocido como Asociación Ilícita Terrorista, significó la inmediata detención y prisión de una veintena de militantes y dirigentes mapuches.

Paralelamente y como resultado de querellas que invocaban la Ley Antiterrorista, presentadas por autoridades locales –entre ellas el ex ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, que a la sazón era gobernador de la Provincia de Arauco–, se abrió otra investigación en el Tribunal de Cañete, que derivó en la misma figura de Asociación Ilícita Terrorista en contra de la CAM, pero esta vez en la VIII Región.

El Mostrador se comunicó con el entorno de Ricardo Lagos; sin embargo, no fue posible obtener una versión del ex gobernante.

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