Publicidad
Gaspar apunta a la ideología mercantil de la administración Piñera y su relación con Perú: «Yo no me explico la condecoración a Alan García» Diplomático fue una de las voces críticas de la estrategia con Perú

Gaspar apunta a la ideología mercantil de la administración Piñera y su relación con Perú: «Yo no me explico la condecoración a Alan García»

Publicidad

Consultado por cuál fue su cuestionamiento con respecto a la estrategia de las «cuerdas separadas» que adoptó el gobierno de Piñera, el embajador planteó que “se confundió el interés del mercado con los intereses del Estado. Qué bueno que las empresas comercien y negocien, pero al final el interés de las empresas es privado y el interés del Estado es de todos los chilenos”.


“Esa era la diplomacia del pisco sour”. Así define Gabriel Gaspar (PS) el manejo de la administración de Piñera en el litigio con Perú en La Haya, transformándose, así, en una de las voces más críticas de la estrategia de poner el juicio en un carril separado a los vínculos comerciales con dicho país.

“La crítica principal es que hubo un error de diagnóstico. Porque pasamos de calificar la demanda como una acción inamistosa a un nuevo relato: que vivíamos el mejor momento de la relación bilateral. Cuando uno preguntaba cuál era la base para sostener esa afirmación, se mencionaba el incremento del comercio, de las inversiones recíprocas, del turismo”, afirma.

En consecuencia, agrega que “se confundió el interés del mercado con los intereses del Estado. Qué bueno que las empresas comercien y negocien, pero al final el interés de las empresas es privado y el interés del Estado es de todos los chilenos”, informa La Tercera.

Consultado sobre qué se hizo mal, el embajador dice que no se explica la condecoración a Alan García. “Estaban desconociendo un tratado vigente y entre estados, pero pasamos a los brindis y a las condecoraciones. Hubo un cambio en la estrategia y hay que evaluar si fue positivo o negativo para el país”, comenta.

Sobre la imagen que proyectaba Chile hacia afuera, aseguró que muchos dijeron que la situación enunciada “alentó a Bolivia a presentarnos una demanda, porque los bolivianos decían ‘los chilenos no se molestan porque los demanden’, ‘mira cómo están con los peruanos a besitos’. Entonces se cruzó una línea”.

Además, señaló que serán las instancias políticas y judiciales las que determinarán si hubo conflicto de interés del ex Presidente Piñera. “Lo verificarán instancias del Estado como una comisión del Congreso y una querella judicial, nosotros no podemos adelantarnos a opinar”.

“Algunos dijeron ganamos porque nos quedamos con la mejor pesca. No estaba en juego la pesca, sino que había un elemento fundamental que era de soberanía. Ahora hay una necesidad pendiente de reflexionar, evaluar nuestro desempeño, precisamente para extraer lecciones y construir una estrategia a futuro”, argumenta.

Por último, reflexiona que “las relaciones entre estados tienen que basarse en el realismo, no caer en la ilusión, en el idealismo de pensar que el mercado lo arregla todo. El mercado no lo arregla todo, ni en relaciones internacionales, ni en la distribución del ingreso”.

Publicidad

Tendencias