Chile Vamos evalúa interpelar a ministro Fernández por caso de la machi y gobierno sale a defenderse

El diputado y presidente de RN Cristián Monckeberg dijo que parlamentarios de su sector evalúan interpelar al ministro del Interior Mario Fernández por el actuar del gobierno en el caso de la machi Francisca Linconao. Para la derecha, que el gobierno haya enviado a La Araucanía un abogado para alegar en favor de quitar la prisión preventiva a Linconao, al mismo tiempo que figura como querellante en el caso Luchsinger-Mackay, constituye una «contradicción que no tiene ninguna justificación».

Según la oposición, es una incongruencia del Poder Ejecutivo que «por un lado se querella y por otro actúa como abogado defensor en la misma causa. Esto fue una decisión política, no fue una decisión jurídica ni judicial, fue una decisión política del Gobierno y hoy día en esta materia el responsable es el ministro del Interior», dijo Monckeberg.

En respuesta a esto, el Ejecutivo salió a responder a través de la vocera Paula Narváez. Para ella existen dos aspectos fundamentales en esta situación. «Por una parte, el que se lleve adelante como querellantes en una causa que nos parece un crimen horrendo, que tiene que ser esclarecido, que tiene que ser sancionado. El segundo interés superior es cuidar la salud de las personas y lo que se hizo fue desarrollar una serie de acciones que tuviesen que ver con persuadir a la machi Linconao para que depusiera su huelga de hambre, cosa que ocurrió por la vía de la resolución de un tribunal de forma autónoma y eso es importante aclarárselo al país», señaló.

Sobre la posibilidad de la acusación a Fernández, sostuvo que «las personas, en nuestro país, habiendo democracia y una institucionalidad clara, pueden hacer las presentaciones que estimen pertinentes en el marco de la ley. Ahora, respecto del actuar del Ministerio del Interior en este caso, quiero ser muy clara y taxativa: aquí se ha actuado apegado a la ley, aquí se ha actuado dando garantías de transparencia a todos los actores y de estar preocupándonos de dos elementos fundamentales, que ambos son intereses superiores», reiterando que el gobierno va a mantenerse como querellante en el caso Luchsinger-Mackay, a pesar de la petición de la familia para que lo abandone.