Haciendo un mea culpa, el senador y militante del PPD reconoce falencias de liderazgo en la actual clase política, algo que según él ha facilitado el posicionamiento de Guillier. «Por no haber tenido la capacidad de entregar respuestas políticas o respuestas culturales tenemos una crisis y, en cierta manera, Guillier representa desde el mundo progresista una respuesta, tal vez más sintomática, a esa crisis», explica.
“Guillier representa también un castigo en cierta manera para todos nosotros”. Con estas palabras, el senador Guido Girardi intentó explicar por qué el senador por Antofagasta es la carta más competitiva de la Nueva Mayoría, de cara a las próximas elecciones presidenciales.
Haciendo un mea culpa, el militante del PPD reconoce falencias de liderazgo en la actual clase política, algo que según él ha facilitado el posicionamiento de Guillier. «Por no haber tenido la capacidad de entregar respuestas políticas o respuestas culturales. Tenemos una crisis y, en cierta manera, Guillier representa desde el mundo progresista una respuesta, tal vez más sintomática, a esa crisis», explica.
Profundizando en la idea anterior, admite que «la política chilena y sus instituciones están totalmente anacrónicas».
Por otra parte, adelantó que el PPD va a iniciar conversaciones con las cartas presidenciales del PR-PS y la DC, antes de definir su opción presidencial, pero asegura que “nos conviene tener un candidato único y dos listas parlamentarias”: una progresista y otra de centro. Asimismo, afirma que es “insostenible un acuerdo parlamentario con la DC si no va a las primarias” y subraya que Goic no debe cometer el error de insistir en el camino propio.
En esa línea, el senador refuerza su intención de unir a la Nueva Mayoría con un solo candidato al decir que «tiene que haber una articulación mucho mayor entre el PS y el PPD para ofrecer al país esa propuesta progresista con la densidad y capacidad de inclusión para garantizar la gobernabilidad», consigna El Mercurio.
Por último, dedica algunas palabras a la derecha y al Frente Amplio. Sobre la primera, dice que no es la derecha compasiva del primer mandato de Piñera, “esta es una derecha donde vienen con la retroexcavadora del desalojo de la sociedad, de las instituciones, del bien público y de la privatización de todo, del agua».
Con respecto al Frente Amplio, plantea que “están demasiado concentrados en decir lo que no les gusta, no en proponer respuestas a la sociedad del siglo 21″.