El teniente coronel en retiro Patricio Morales también involucró a miembros de Hacienda y al propio general director de Carabineros, Bruno Villalobos.
El Teniente Coronel (r) Patricio Morales, uno de los cuatro imputados que quedaron en prisión preventiva por la investigación de Fraude en Carabineros, involucró a funcionarios de la Contraloría, del Ministerio de Hacienda y al propio general director de Carabineros, Bruno Villalobos, en el desfalco.
En entrevista con el programa «Informe Especial» de TVN, el ex uniformado denunció de la existencia de una estructura que se armó al interior de la institución para proteger al alto mando. «Están tratando de acotar las responsabilidades», sostuvo Morales.
«Yo no defraudé al fisco, yo no maquiné ni pensé cómo defraudarlo. Todo lo que hemos hecho, del punto de vista de creación de empresas, ha sido con recursos ganados de forma lícita», precisó Morales, antes de recordar que había funcionarios de la Contraloría que revisaban los informes de bienes fiscales que se manejaban dentro de Carabineros y luego «suavizaban» esos reportes.
“Ellos (los funcionarios de Contraloría) eran los responsables de revisar los recursos públicos de Carabineros, Juan Muniere, Carlos Moreno y otra persona -que no recuerdo su nombre- eran los encargados de revisar que los bienes fiscales fueran bien invertidos. Los informes de auditoría eran muy suaves y más que todo se presentaban sugerencias en ellos”, narró el Coronel (r).
De igual modo, involucró a miembros de la cartera de Hacienda y al al propio general director de Carabineros, Bruno Villalobos: “Una persona de presupuesto venía a buscar su maletín con plata de manera mensual. Cuatro mil o cinco mil millones de pesos fueron desviados (…) (Villalobos) tenía conocimiento pleno de lo ocurrido con los desfalcos”.
Por su parte, el Contralor General de la República, Jorge Bermúdez, afirmó en el mismo reportaje que «la Contraloría es la guardiana de la probidad en la aplicación pública, por lo tanto este estándar que tiene que existir en esta institución, y que es exigible a todos sus funcionarios partiendo por mí mismo, es mucho más alto del que se podría exigir a cualquier funcionario. Por lo tanto, cualquier atisbo de hecho que sea reñido con la probidad debe ser inmediatamente repelido».
«Frente a estas denuncias fundadas que hemos recibido, yo dispuse que a esos funcionarios se les curse la renuncia no voluntaria, que es una facultad que yo tengo como contralor, y que por lo tanto sean separados inmediatamente del servicio», agregó.
