La diputada comunista se manifestó satisfecha con las indicaciones con las cuales volvió el proyecto desde el Senado, argumentando que no haber considerado suficiente el avance que el proyecto en sí significaba, la medida habría sido puesta “en riesgo”. Esto porque si no se aprobaba en este trámite, la iniciativa debía pasar a comisión mixta, con lo cual su tramitación quedaba relegada a la siguiente administración, es decir, el segundo mandato de Piñera.
En la sesión de este miércoles, la Sala de la Cámara aprobó en su tercer trámite constitucional, el proyecto sobre Educación Superior, que entre otros aspectos regula el financiamiento de la gratuidad.
Ante este giro en el sistema educativo, la bancada del Partido Comunista valoró el despacho desde el Congreso Nacional -en su último trámite legislativo- el proyecto de Educación Superior, uno de los pilares de la Reforma Educacional establecido en el programa de la Presidenta Bachelet.
La diputada, Camila Vallejo, calificó dicha etapa como un “avance significativo”.
“Esto implica fortalecer las universidades del Estado, y por otra parte, ponerle freno y coto a este libre mercado que existía en el mercado de libre competencia, lucro, sin regulación de ningún tipo, especialmente en el mundo privado. Con esta ley se crea una Superintendencia, se crea un nuevo modelo de aseguramiento de la calidad con nuevos estándares de acreditación”, destacó.
La diputada que es integrante de la comisión de Educación de la Cámara, agregó que de esta forma “se termina con el lucro y avanza en la consagración por ley de la gratuidad universal en la Educación Superior y establece mecanismos para ello”.
De esta manera, Vallejo se manifestó satisfecha con las indicaciones con las cuales volvió el proyecto desde el Senado, argumentando que no haber considerado suficiente el avance que el proyecto en sí significaba, la medida habría sido puesta “en riesgo”. Esto porque si no se aprobaba en este trámite, la iniciativa debía pasar a comisión mixta, con lo cual su tramitación quedaba relegada a la siguiente administración, es decir, el segundo mandato de Piñera.
“Y yo al menos no confío. O sea yo no le creo ni al nuevo ministro de Educación de Sebastián Piñera, ni a Sebastián Piñera. No veo posibilidad de que el proyecto pudiese mejorarse en ese Gobierno. Yo prefiero aprobar lo que tenemos porque le damos seguridad a los estudiantes, a las instituciones y porque, sin lugar a dudas, es un avance importante”, dijo la exlíder estudiantil.
