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La DC insiste en que el subsecretario “reconoció en el expediente que ocultó la autopsia del Presidente Eduardo Frei” y con eso basta para ser removido de su puesto. Apunta de este modo al rol que cumplió Castillo como director médico del Hospital Clínico de la Universidad Católica en la “cadena de mentiras y ocultamiento” tras la autopsia secreta que le hicieron dos médicos al ex Mandatario y que consta en la causa judicial. Según el expediente, Castillo dio instrucciones al doctor Sergio González de no entregar los resultados de los antecedentes documentales y materiales del procedimiento histopatológico que junto al doctor Helmar Rosemberg le practicaron a Frei Montalva en la Clínica Santa María, horas después de su muerte.
«Este mismo Presidente, que en su momento habló de los cómplices pasivos, hoy lo que hace es respaldar a Luis Castillo en una cosa que nos parece bastante incomprensible”. Con estas palabras, el presidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chahin, insistió en la arremetida DC contra el subsecretario de Redes Asistenciales por su implicancia en el caso del magnicidio Eduardo Frei Montalva.
En el Gobierno se ha sostenido que la permanencia de Castillo no está en discusión, toda vez que no hay una imputación penal en su contra. Sin embargo, el ministro Alejandro Madrid ha dejado abierta la puerta a una posible indagatoria por el ocultamiento de la autopsia del fallecido ex Presidente, lo que podría cambiar el cuadro.
En este punto, Chain insiste en que “para nosotros esto es muy importante, él (Castillo) reconoció en el expediente que ocultó la autopsia del Presidente Eduardo Frei. Más que una imputación penal claramente esta no es una conducta que pueda tener un cargo como un subsecretario”.
La DC apunta a los detalles del verdadero rol que jugó Luis Castillo en el caso Frei Montalva como director médico del Hospital Clínico de la Universidad Católica. Dichos pormenores quedaron en evidencia en un reportaje de Ciper donde se relata la cadena de «mentiras y ocultamientos» que rodean la autopsia no autorizada que se le hizo a Eduardo Frei Montalva y donde Castillo jugó un rol.
“Si bien hasta ahora el ministro Alejandro Madrid no ha abordado la obstrucción de la que fue objeto su investigación en el Hospital Clínico de la Universidad Católica, es muy probable que ahora sí se pronuncie. Pero frente a las evidencias de la cadena de ocultamientos que rodearon la autopsia de Frei Montalva, desde el punto de vista ético y de su juramento hipocrático el doctor Luis Castillo sí tiene problemas para desempeñar un cargo público de alta responsabilidad”, señala el reportaje de Mónica González.
Los hechos se remontan al 22 de enero de 1982 cuando los doctores de la Universidad Católica Sergio González y Helmar Rosemberg procedieron a realizar en la Clínica Santa María una autopsia al cuerpo de Frei sin que nadie de su familia la autorizara. Inyectaron formalina en un procedimiento que tuvo por fin “borrar las huellas de las sustancias que lo envenenaron”.
El procedimiento se mantuvo en completo secreto durante más de veinte años, hasta que mediados de 2002 alguien hizo llegar –bajo secreto profesional- los antecedentes a las manos de Álvaro Varela, abogado de la familia Frei. De hecho, dos años antes, cuando la entonces senadora Carmen Frei planteó en el hemiciclo la acusación sobre la participación de terceros en la muerte de su padre, desconocía la existencia de esa necropsia.
El reportaje añade que tras el revuelo provocado por las palabras de Carmen Frei, el doctor Sergio González le informó a Luis Castillo –en ese momento director médico del Hospital Clínico de la Universidad Católica- “de la existencia en ese hospital de los antecedentes documentales y materiales” del procedimiento que le practicaron a Frei Montalva en la Clínica Santa María, horas después de su muerte.
“El doctor González también le preguntó a su jefe jerárquico qué hacer al respecto. La respuesta del doctor Castillo fue taxativa: le ordenó al doctor González que no hiciera entrega de esas importantes y delicadas piezas a nadie, salvo a la familia Frei o a la Justicia, si es que alguno de ellos lo requerían. ¿Qué hizo el doctor González? Retiró del archivo foliado respectivo el legajo que contenía los informes de la autopsia a Frei Montalva, y lo guardó en su poder”, señala el reportaje de Ciper.
En su declaración en la causa criminal que sustancia el ministro Alejandro Madrid, “Luis Castillo corroboró la instrucción que le dio al doctor Sergio González de no entregar el informe de la necropsia practicada a Frei Montalva, aunque sostiene que lo hizo frente a una petición que venía de “la prensa”, cosa que en ese momento era imposible: “Debo reconocer que esa orden fue dada por mi persona para respetar la legislación vigente, la intimidad de la familia, la confiabilidad de la información y los valores éticos que la universidad preserva como política institucional. Nunca recibí ninguna petición formal de la familia ni de un tribunal” (declaración del 9 de diciembre de 2005)”.
El informe casi completo y los restos que aún se guardaban de la autopsia practicada al ex presidente Eduardo Frei fueron requeridos al Hospital Clínico de la UC, pero ésta se negó a entregarlo en primera instancia y luego sólo accedió a liberar un material parcial. Los datos “solo pudieron ser obtenidos por la justicia a través de un allanamiento, cinco meses después de que el hospital entregara unas pocas fotocopias. Hasta ahora ninguna autoridad del Hospital Clínico de la UC ha podido explicar la razón de ese ocultamiento”, añade el reportaje.
En conclusión, “dicha instrucción del doctor Luis Castillo no hizo más que consolidar el secreto y ocultamiento que por 20 años había protegido una información que, como bien sabían ambos médicos, era fundamental para investigar el eventual asesinato del ex presidente. Allí había información indispensable sobre los hechos que rodearon los días pre y post muerte de Frei Montalva”, precisa la nota.
