Ante los dichos de Flores, defensora de la dictadura de Augusto Pinochet, el presidente de RN, Mario Desbordes, salió en su defensa, y aunque aseguró que «se equivocó», «no es para hacer el escándalo que se ha hecho».
La diputada del Partido Comunista (PC), Carmen Hertz, sigue reaccionando a los dichos de Camila Flores, quien en un programa de televisión la acusó de llamar a matar a personas en la dictadura, motivo por el cual anunció una querella en su contra.
En una entrevista con Cooperativa, la parlamentaria sostuvo que personajes como su par de Renovación Nacional (RN) son peligrosos, «porque son una mezcla de una ignorancia supina más la intencionalidad perversa de establecer posverdades en forma desfachatada».
«No es posible que una persona que sea parlamentaria tenga el desenfado y la desfachatez de espetarme en un set de televisión, eso no es posible y nos está dando cuenta de un clima extremadamente peligroso en nuestro país», agregó.
La también abogada explicó que lo que corresponde ante los dichos de Flores es una acción judicial ya que, a su juicio, «no es posible imputarle a una persona actividades criminales y que esta persona lo arregle como si fuera algo que se dijo en una tertulia. Tenemos que, de alguna manera, parar este frenesí en el que están los sectores pinochetistas».
Sin embargo, el presidente de RN, Mario Desbordes, salió en defensa de Camila Flores, y aunque aseguró que «se equivocó», «no es para hacer el escándalo que se ha hecho».
«yo creo que hay que condenar la violencia siempre, condenar las violaciones a derechos humanos siempre, no hay ninguna duda, no tiene contexto, no tiene ninguna explicación, pero también hay que ser muy claro en condenar la violencia política», agregó Desbordes.
Al respecto la legisladora comunista añadió que «recurro a los tribunales de justicia frente al delirio agraviante e insultante de una persona. (…) Renovación Nacional debería haber reaccionado con fuerza. El pinochetismo enquistado en varias partes está envalentonado y eso es peligroso para la convivencia democrática».