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Crédito: Agencia UNO
Así lo manifestó el ministro de Justicia, Hernán Larraín, quien tildó el acuerdo como «un hecho muy significativo para el gobierno del Presidente Sebastián Piñera», pues «desde el primer día la gestión de la actual administración ha sido un acto voluntario y resuelto de nuestro gobierno, el reconocer y buscar los mejores medios para alcanzar la mayor dignidad de los trabajadores penitenciarios». [ACTUALIZADA]
Todo parecía indicar que el paro de gendarmes llegaría a su fin esta noche y, después de una maratónica jornada, llena de incertidumbres, pasadas las 02.00 de la madrugada los gendarmes aceptaron la última propuesta del Ejecutivo y depusieron el paro nacional que se extendió por cuatro días.
El secretario de Estado, Hernán Larraín, tildó el acuerdo como «un hecho muy significativo para el gobierno del Presidente Sebastián Piñera», pues «desde el primer día la gestión de la actual administración ha sido un acto voluntario y resuelto de nuestro gobierno, el reconocer y buscar los mejores medios para alcanzar la mayor dignidad de los trabajadores penitenciarios».
Asimismo, el ministro precisó que «Gendarmería ha sido un servicio que los gobiernos en el pasado no han priorizado debidamente. El país debe reconocer en ellos su enorme aporte en un aspecto muy crucial en la vida. Por eso, el presidente Piñera nos pidió desde el primer día que buscáramos cómo poder mejorar muchos aspectos, pero uno muy crucial, la situación de quienes trabajan en la institución».
«Por eso que, no obstante la estrechez fiscal y las dificultades económicas que todavía no hemos podido resolver debidamente, se ha hecho un esfuerzo serio y responsable que permite avanzar en aspectos que son muy necesarios y relevantes para los trabajadores penitenciarios. En ese sentido estamos muy contentos de este logro», agregó la autoridad.
Por último, el titular de Justicia argumentó que si bien, este acuerdo para el gobierno es necesario, no es el único para lograr la modernización de Gendarmería: «Nosotros queremos que sea una institución querida y respetada por todos los chilenos» y para eso, anunció tres pilares fundamentales: carrera funcionaria, infraestructura y equipamientos adecuados, y consagrar aspiración de reinserción como objetivo central.
Cabe recordar que, durante el jueves, la radicalización de la protesta de los gendarmes con el llamado a acuartelamiento en los penales y el inicio de una huelga de hambre de los funcionarios puso en aprietos al Gobierno. La tensión registrada durante la mañana en el acceso al Penal Santiago 1, cuando Fuerzas Especiales de Carabineros estuvieron cara a cara con los funcionarios penitenciarios, encendió la alerta en las autoridades por el impacto mediático y político del hecho.
Así, durante la jornada el Ejecutivo optó por evitar las declaraciones públicas y, en su lugar, se movieron las fichas en una seguidilla de reuniones en varios frentes, sobre todo en La Moneda, con las autoridades políticas tomando las riendas del asunto para retomar la mesa de negociación quebrada, conseguir que aflore “humo blanco” y evitar que escale la crisis.
En este escenario de intensas gestiones, se pudo ver en Palacio al ministro de Justicia, Hernán Larraín, el subsecretario de la cartera, Juan José Ossa, la vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, y el director interino de Gendarmería, Christian Alvear. En medio de este panorama, trascendió que al final de la jornada habría una vocería del subsecretario Ossa, en cuyas manos el Ejecutivo ha depositado públicamente la conducción del tema. Aunque, inicialmente, se había señalado que sería el ministro del Interior, Andrés Chadwick, el encargado de fijar la posición del Ejecutivo.
De todos modos, a estas alturas todo apuntaba a Interior, tanto desde los funcionarios como la oposición. “Desde el Ministerio del Interior se habría ordenado a Carabineros ingresar al recinto donde estamos más de 200 personas al interior llevando, de manera pacífica, nuestra movilización”, denunció Marcos Aburto, dirigente de la Asociación de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), respecto al incidente de la mañana en Santiago 1.
En ese lugar, los gendarmes mantuvieron bloqueados los ingresos, con una consigna bien clara: “Este territorio es nuestro, no van a ingresar a nuestra unidad”. Así, impidieron el paso de los efectivos policiales que llegaron con la intención de trasladar a los reos a los tribunales.
En el mundo de los funcionarios, la presencia policial fue interpretada como una provocación. “El Gobierno pretende apagar con bencina el incendio, no se entiende la postura intransigente de la autoridad”, señaló el presidente de la Asociación Funcionarios Civiles de Gendarmería (AFUSIG), Gonzalo Legal.
El dirigente además hizo una comparación compleja para esta administración al señalar que “al amenazarnos el Gobierno de Piñera está empleando las mismas prácticas de la dictadura”, dijo, aludiendo además a las advertencias de descuentos y sumarios que hizo en la víspera el subsecretario Ossa.
Desde la oposición, también advirtieron a La Moneda. “Los conflictos laborales no se solucionan ni aplacan con violencia o con excesiva presencia policial. No es el camino presionar a los gendarmes, ahora urge tener una solución dialogada y conversada”, dijo el diputado PS Gastón Saavedra, presidente de la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados.
Otro que cuestionó la estrategia gubernamental fue el senador Alejandro Navarro. “Esta mañana en la USEP de Santiago, funcionarios de Carabineros y de Gendarmería casi se enfrentaron. Si se ordena el ingreso de la policía uniformada a los recintos penitenciarios, hay riesgo de que esto pase a mayores, lo que se debe evitar”, advirtió.
Navarro recordó que“el Gobierno militarizó el discurso al señalar que el paro de los gendarmes es ilegal y que atenta contra el Estado y hoy ordena a las FF.EE. de Carabineros apostarse en los recintos penitenciarios, listas para hacer un ingreso forzoso”.
Mientras, el senador PS Alfonso De Urresti expresó que “hay que hacer todo lo posible para que el conflicto de Gendarmería no siga escalando”, porque “ni la huelga de hambre ni los descuentos a los movilizados ayuda a encaminarse a una solución a este conflicto”.
Este llamado al diálogo fue reforzado por el subjefe de la bancada de diputados socialistas, Marcos Ilabaca, quien llegó hasta el Penal Santiago 1 para entregar el respaldo y solidaridad de los parlamentarios del PS, al Frente de Trabajadores Penitenciarios.
«Lamentablemente, el Estado de Chile y no solo el actual Gobierno, sino que todos los gobiernos, están en deuda con Gendarmería. De manera que es necesario que hoy el Ejecutivo se siente a dialogar en la búsqueda de una solución a un problema que se arrastra de años. En ese marco, le hemos solicitado al Gobierno, e insistiremos, en que se abra al diálogo”, dijo luego de reunirse con los gendarmes.
El presidente de la Comisión de Trabajo también apeló al Ministerio de Hacienda a “tomar cartas en el asunto y dejar de usar mensajeros para solucionar el paro de los trabajadores de Gendarmería”. “Como hay un problema profundo laboral, previsional y de recursos, consideramos necesario que sea el titular de Hacienda quien asuma su responsabilidad y resuelva el conflicto. Por lo demás, estamos hablando de justas demandas de los trabajadores, que no pueden ser acalladas con medidas de presión”, planteó Saavedra.
En medio de este panorama, el senador Navarro anunció que presentará un recurso de protección “en contra de los ministros del Interior y de Justicia, pues no es posible que la solución del Gobierno de Sebastián Piñera a las demandas de los funcionarios de Gendarmería de Chile, sea el uso de la fuerza o el reemplazo de los huelguistas”.
El Poder Judicial también tomó cartas en el asunto, y las presidentas de las Cortes de Apelaciones de Santiago y San Miguel Dobra Lusic y Ana María Cienfuegos, respectivamente, se constituyeron en el Centro de Justicia, donde han debido permanecer los detenidos, ante la imposibilidad de ser trasladados a los penales. Su objetivo fue hacer un catastro y revisar la situación de los imputados que pasaron la noche en los calabozos. Mañana la fiscala judicial de la Corte Suprema, Lya Cabello, también conocerá las condiciones en que se encuentran los imputados.
