PAÍS
Camilo Catrillanca, de 24 años, recibió un impacto de bala en la cabeza. El Gobierno optó por poner el foco en que las circunstancias que rodearon su fallecimiento eran delictuales y que, por lo tanto, no ameritaba que desde Palacio alguna autoridad reaccionara. Pero por más que trataron de bajarle el perfil al hecho, es innegable que lo sucedido no solo exacerba las tensiones y el conflicto en La Araucanía, sino que también pone en jaque la viabilidad del plan estrella que estaba impulsando la administración piñerista, con la alianza público-privada, para dar solución económica a problemas de la zona. La figura del ministro de Desarrollo Social, Alfredo Moreno, también queda en tela de juicio, como la decisión del Ministerio del Interior de apostar sus fichas hace meses al despliegue del Comando Jungla, en circunstancias que desde el primer día fue cuestionado por el riesgo que implicaba un equipo militarizado como ese. [ACTUALIZADA]
Cuando fue anunciado el «Comando Jungla» se hizo con bombos y platillos. Desde el Presidente Sebastián Piñera, pasando por diversas autoridades, destacaron el aporte que el grupo de Fuerzas Especiales de Carabineros –entrenado especialmente por sus símiles colombianos– representaba como instrumento para controlar la violencia en la Región de La Araucanía. Pero ayer, desde que se confirmó la muerte del joven comunero mapuche Camilo Catrillanca, de 24 años, en el contexto de un operativo de este equipo policial en la comunidad de Temucuicui, La Moneda guardó un estricto silencio.
Nadie dijo nada, no hubo declaraciones ni vocerías en Palacio desde que se confirmó la información, que primero circuló con la versión de que Catrillanca estaba herido. «Lo confirma la familia, que acaba de fallecer, el peñi murió, la policía lo asesinó al interior de la comunidad y de ahí lo llevaron al consultorio, pero ya no pudieron hacer nada. Lo asesinaron, así de simple», dijo a Cooperativa el werkén Jorge Huenchullán.
El werkén agregó que «ahora Carabineros está sobrevolando la comunidad. Al interior debe haber más o menos unos doscientos efectivos, policías caminando a pie y blindados que están apostados en el camino». Una versión que con el correr de las horas fue respaldada con una serie de videos y audios que circularon en redes sociales en los que se escuchaban las ráfagas de balas al interior de la comunidad, como el despliegue de helicópteros y los antecedentes respecto a que Catrillanca –nieto del lonko de la comunidad Ignacio Queipul Millanao del lof Temucuicui, Juan Catrillanca– murió por una bala que le ingresó por la espalda.
La muerte de Catrillanca no solo exacerba las tensiones y el conflicto en La Araucanía, sino que también pone en jaque la viabilidad del plan estrella que estaba impulsando la administración piñerista, con la alianza público-privada, para dar solución económica a problemas de la zona. La figura del ministro de Desarrollo Social, Alfredo Moreno, también queda en tela de juicio, como la decisión del Ministerio del Interior de apostar sus fichas hace meses al despliegue del Comando Jungla, en circunstancias que desde el primer día fue cuestionado por el riesgo que implicaba un equipo militarizado como ese.
[cita tipo=»destaque»]El senador DC y ex intendente de La Araucanía, Francisco Huenchumilla, apuntó directamente a La Moneda como la responsable de la muerte de Catrillanca. «Esto sucede en el marco de que este Gobierno tomó la decisión política de crear un comando especial, altamente militarizado, entrenado en un país extranjero, donde existía un escenario de guerra interna, de terrorismo y de narcotráfico, y esa fuerza armada la trasladó a la Región de La Araucanía, donde en un procedimiento normal de comisión de un delito, resulta que aparece una persona muerta. Esto significa que la policía de Carabineros, por decisión política del Gobierno, está participando de procedimientos policiales con resultado de muerte».[/cita]
Toda la tarde de ayer La Moneda estuvo en silencio, pero las reuniones, monitoreos y seguimiento al tema no pararon.
En un comité político que se desarrolló entre el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, el ministro Andrés Chadwick –que por estos días ejerce de Vicepresidente de la República, ya que Piñera esta de gira– y la vocera Cecilia Pérez vía telefónica, se resolvió que a los ojos del Gobierno este era un asunto delictual, que ese sería el foco y que Catrillanca no sería una víctima, razón por la que no había necesidad de que alguna autoridad en Palacio saliera a dar explicaciones y que, por lo mismo, solo el intendente de La Araucanía, Luis Mayol, daría una versión oficial.
Así, cerca de las 20:00 horas –casi tres horas y media después del episodio– Mayol puso el foco en el tenor delictual que tenían los acontecimientos: «Desde nuestro punto de vista, son actos de delincuencia común y los afectados son los profesores o personal docente que sufrió el robo de sus vehículos. La persona fallecida tiene antecedentes por receptación de vehículos». Relató que los hechos se sucedieron de la siguiente manera: «Carabineros iba por tierra, llegó al lugar y fue recibido con armamento automático por un grupo indeterminado de personas por ambos flancos. Carabineros enfrentó a estos sujetos (…) posteriormente apareció un tractor con tres sujetos más. El camino estaba bloqueado por árboles, por lo tanto, personal de Carabineros no pudo seguir. Cuando llegaron a ese lugar fue cuando fueron enfrentados», para luego añadir que «uno de los sujetos que iba en el tractor fue el que resultó herido. Inmediatamente, Carabineros a la persona herida la trasladó al Cesfam de Ercilla. En este momento aún se están haciendo las investigaciones del caso».
Cuadrado con la línea discursiva del Ejecutivo, el general director de Carabineros, Hermes Soto, afirmó que “hay una situación que tiene que establecerse y aclararse por parte de los organismos investigadores y por la autopsia de rigor. Esto deberá establecer el origen de la munición y cuál fue la trayectoria. Por eso digo que hasta el momento no podemos asegurar cuál es el origen de ese disparo”, indicó el jefe de la policía uniformada, quien además también puso el acento en que Catrillanca “había participado anteriormente en distintos delitos”.
Por más que La Moneda trató de bajarle el perfil al hecho, lo concreto es que el tema tiene preocupadas a las autoridades, sobre todo por la forma en que esto es percibido por la opinión pública. Fuentes gubernamentales reconocieron que por horas en la tarde-noche de ayer se monitorearon las redes sociales para medir la recepción de la versión del intendente, la temperatura del debate y, sobre todo, a quién está culpando la gente por la muerte de Catrillanca.
No solo eso, también preocupa mucho en Palacio el efecto que esto tendrá en la imagen país y el cuestionamiento que puede generarse desde el concierto internacional.
Quedó claro ayer que las explicaciones de Mayol no frenaron la ola de criticas que cayó sobre la administración piñerista desde la oposición, en redes sociales –el Comando Jungla fue trendic topic por horas– y desde organismos de Derechos Humanos. Todos coincidían en los mismo puntos: la necesidad de esclarecer los hechos, las explicaciones poco convincentes, el uso de violencia desmedida aplicada en la zona de La Araucanía por parte de efectivos policiales, la responsabilidad del Estado en esta muerte.
La Democracia Cristiana (DC) pidió un fiscal preferente para investigar de forma «inmediata y precisa» la muerte del comunero.
A través de Twitter, el diputado RD Giorgio Jackson señaló que «esto no puede pasar desapercibido. Es necesario que se aclaren los hechos para que quienes sean responsables de este asesinato sean reconocidos como asesinos». Su par, Gonzalo Winter, agregó también en la misma red social: «Acabamos de aprobar el presupuesto del Ministerio del Interior, el que financia al Comando jungla. Exigimos que el ministro @andreschadwickp dé explicaciones y aclare la situación de Camilo Catrillanca, comunero mapuche muerto por un disparo. Basta de represión en el Wallmapu!».
El senador DC y ex intendente de La Araucanía, Francisco Huenchumilla, apuntó directamente a La Moneda como la responsable de la muerte de Catrillanca. «Esto sucede en el marco de que este Gobierno tomó la decisión política de crear un comando especial, altamente militarizado, entrenado en un país extranjero, donde existía un escenario de guerra interna, de terrorismo y de narcotráfico, y esa fuerza armada la trasladó a la Región de La Araucanía, donde en un procedimiento normal de comisión de un delito, resulta que aparece una persona muerta. Esto significa que la policía de Carabineros, por decisión política del Gobierno, está participando de procedimientos policiales con resultado de muerte».
El senador agregó que «esto implica que las confianzas en la Región de La Araucanía se terminan absolutamente. Después que el Gobierno había presentado su plan Impulso, donde supuestamente iba a empezar una nueva era, entonces el garrote se hace ver por medio de este comando que es absolutamente desproporcionado (…) el Gobierno tiene que asumir la responsabilidad política en lo que aquí ha sucedido».
La diputada mapuche–huilliche Emilia Nuyado también reaccionó y exigió explicaciones al ministro del Interior, Andrés Chadwick, por la muerte del comunero tras recibir un disparo por parte del Comando Jungla en Ercilla. “Estos hechos son lamentables y exigimos que el Gobierno nos explique cómo este procedimiento policial llegó a este nivel, donde lamentamos la muerte de un comunero (…) nosotros queremos que se nos asegure que no existió abuso de ningún tipo, nos parece que debe ser investigado a fondo el procedimiento. Ojalá por organismos independientes. Hay que tener, además, la declaración de la comunidad, no podemos solo quedarnos con la información de Carabineros (…). Esto demuestra que la presencia del Comando Jungla difícilmente puede ayudar a lograr la Paz en La Araucanía”, concluyó la diputada Nuyado.
El senador Alejandro Guillier afirmó que «la responsabilidad política de la muerte de Camilo Catrillanca es del Gobierno. El Comando Jungla, altamente militarizado, en pesquisas de un supuesto delito común, terminó con un joven baleado en el cráneo. Llamo al Presidente a poner fin a la fuerza paramilitar en La Araucanía».
La Asociación de Municipalidades con Alcalde Mapuche (AMCAM) también lanzó sus dardos al Estado y exigió que se aclare la muerte de Catrillanca. «Creemos que esto es un portazo al diálogo y a todo impulso, porque una vez más se han quebrado las confianzas políticas con el pueblo nación mapuche», manifestaron.
Ya se convocó para la tarde de este jueves a una movilización de protesta en Plaza Italia.
