El movimiento que defiende los derechos humanos no quiso pasar por alto lo sucedido con el joven comunero y manifestó su preocupación por la vulneración del Pueblo Mapuche.
Como «indignante y alarmante» calificó Aministía Internacional-Chile el operativo policial que se está efectuando en la región de La Araucanía tras la muerte de Camilo Catrillanca, la primera victima fatal que ha dejado el Comando Jungla.
La entidad mundial posó su mirada en el Estado y dijo que «es quien se encuentra obligado a respetar y garantizar los derechos humanos de todas las personas, en conformidad a los tratados internacionales que Chile ha ratificado y que se encuentran vigentes».
Frente a los allanamientos masivos que han sucedido en la zona de conflicto, Amnistía Internacional manifestó que estas prácticas vulneran los derechos humanos de las personas mapuches y agregó que este accionar «da cuenta de la persecución y criminalización del Estado a los pueblos indígenas».
En último punto, el movimiento instó al Gobierno a repudiar este suceso y solicitó que se investigue «a fondo y de manera imparcial» lo ocurrido y que estos hechos «no queden en la impunidad, brindando garantías de reparación y no repetición a las víctimas y sus familiares», indicó la organización.