“El fracaso de Orrego no es por culpa de él, sino que es por la falta de apoyo del Gobierno”, dijo el diputado Gonzalo Fuenzalida (RN), mientras su colega Andrés Celis apuntó a la ministra Cecilia Pérez, señalando que “el canal se está cayendo a pedazos y ella no se está dando cuenta”. En Palacio asumen que la relación con Orrego no venía atravesando por un buen momento, pero no se esperaban que su salida fuera tan abrupta. De ahí la frase “no me eche a perder el día”, con la que respondió el Presidente Sebastián Piñera al momento de ser consultado al respecto.
Francisco Orrego no alcanzó a estar 8 meses como presidente ejecutivo de Televisión Nacional y decidió dar un paso al costado, en una determinación que tomó por sorpresa y causó molestia en La Moneda.
En Palacio asumen que la relación con Orrego no venía atravesando por un buen momento, y ya había dado señales de que su continuidad estaba en duda. Pero no se esperaban que su salida fuera tan abrupta, porque más bien la aguardaban para fin de año. De ahí la frase “no me eche a perder el día”, con la que respondió el Presidente Sebastián Piñera al momento de ser consultado al respecto.
“Él había manifestado que estaba dando cumplimento a una etapa en la cual había liderado este año TVN y por lo tanto su renuncia fue aceptada”, comentó a tu turno Cecilia Pérez, la titular de la Segegob que está a cargo de las relaciones con el canal.
En La Moneda, intentaron dar una señal de normalidad. Según la vocera, “los argumentos del ex presidente de TVN son personales, se han visto reflejados en una renuncia al rol que le había solicitado que cumpliera el Presidente Sebastián Piñera, y esa renuncia ha sido aceptada”.
La portavoz añadió además que el nombramiento de Orrego “fue estudiado” y ahora están abocados a encontrar un sucesor. “Los procesos cumplen sus etapas y el presidente se encuentra en proceso de buscar al reemplazante para presidir el directorio de TVN», dijo la ministra.
Pero en medio de la crisis, el Gobierno también enfrenta “fuego amigo”, porque la salida de Orrego detonó críticas desde las mismas filas de Chile Vamos. “La renuncia de Orrego deja en evidencia que el Gobierno no tiene voluntad política para hacer los cambios a TVN. Mal el Gobierno. La ministra Pérez ha sido pasiva con respecto a TVN. No le ha tomado el peso de la situación. El canal se está cayendo a pedazos y ella no se está dando cuenta”, dijo el diputado Andrés Celis, quien hizo “un llamado al Gobierno a que se ponga las pilas con TVN”.
Mientras, el diputado también RN Gonzalo Fuenzalida aseguró que “el fracaso de Orrego no es por culpa de él, sino que es por la falta de apoyo del gobierno”, informa La Tercera.
Las críticas desde el Congreso reflejadas en estas palabras de los parlamentarios oficialistas no son nuevas para el Gobierno. Desde el Parlamento se le transmitió a La Moneda que la figura de Orrego era más parte del problema que de la solución. Prueba de ello fue su nula gestión para conseguir la capitalización de TVN, cuyos últimos recursos fueron conseguidos en la negociación del Presupuesto, un espacio donde Orrego no jugó ningún rol.
El factor clave en la renuncia de Orrego fue su relación con el directorio y con el director ejecutivo de la estación, Jaime de Aguirre.
Sin mencionarlo directamente en la carta que envió al Presidente Piñera presentándole su dimisión, Orrego dirigió sus dardos contra el hombre de televisión que desde diciembre de 2016 es el director ejecutivo de TVN. «He llegado a la convicción de que mientras la gestión de TVN siga en manos de las mismas personas que la llevaron a su actual crisis, no será posible sacar adelante al canal”, fue la frase más polémica de la misiva de Orrego.
Las desavenencias de Orrego con De Aguirre son de larga data. En julio, ocurrió la filtración del contrato del director ejecutivo de la estación, y las sospechas inmediatas de los trabajadores y los directores opositores recayeron sobre el presidente del directorio.
En este último tramo, a Orrego se le transmitió desde La Moneda que bajara las revoluciones contra De Aguirre, pese a que la instrucción inicial era alejarlo del canal. Sin embargo, el hilo terminó cortándose por el presidente del directorio, zanjando el asunto con su propia dimisión.
En el canal, interpretan la intempestiva salida de Orrego como el corolario de una mala gestión y lamentan haberse enterado “por la prensa” de su renuncia.
La representante de los trabajadores del canal estatal, la periodista Consuelo Saavedra, dijo que “Orrego de verdad hizo las cosas de la peor manera que yo puedo imaginar, con falta de liderazgo”, mientras el sindicato de Prensa del canal lo acusó de “dejar el canal con pérdidas, un centenar de despidos y acusado de vulnerar la ley”.
El presidente del Sindicato de Prensa de TVN, Rodrigo Cid, también comentó las palabras de Orrego respecto a los responsables de la crisis del canal no es válido porque “entregar como argumento que no se han podido realizar los cambios cuando hoy el directorio es el que tiene el pleno poder para la toma de decisiones de la empresa, me parece que no es una razón válida para presentar esta carta de renuncia”.
«En términos simples, para remover al director ejecutivo (Jaime de Aguirre) se requieren cinco votos (de un total de 9) y Francisco Orrego al parecer, esa era su intención, nunca logró reunirlos», comentó en declaraciones a Radio Universo.