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Crédito: Agencia UNO
La pública demostración de apoyo del Presidente, con su declaración en La Moneda, era la pieza que faltaba en el blindaje oficialista hacia el ministro del Interior, en medio de los pedidos de renuncia y la amenaza de una acusación constitucional desde la oposición. Según la mirada particular de los hechos que tiene Piñera, Chadwick nunca validó las versiones entregadas por Carabineros sobre el crimen de Camilo Catrillanca, por lo que “no existe fundamento alguno para una acusación constitucional contra el ministro”. [ACTUALIZADA]
Andrés Chadwick “es un muy buen ministro y cuenta con toda mi confianza”. Esas fueron las palabras con las que el Presidente Sebastián Piñera abrió, en La Moneda, su esperada declaración a la prensa para referirse a la crisis por el manejo oficial del caso Catrillanca.
El blindaje de Piñera era la pieza que faltaba en las públicas demostraciones de apoyo hacia el jefe de gabinete, expresadas por sus colegas ministros y los partidos oficialistas, ante los pedidos de renuncia y la amenaza de una acusación constitucional desde la oposición.
Respecto de este libelo, el mandatario fue enfático en señalar que “no existe fundamento alguno para una acusación constitucional contra el ministro”, y que perseverar en este intento implica un “mal uso de este instrumento constitucional”.
Piñera tomó las riendas para controlar la crisis desde ayer mismo, cuando decidió acortar abruptamente su gira por Magallanes y la Antártica y retornar a Santiago.
Esta mañana, el Mandatario encabezó un comité político extraordinario en La Moneda, desde donde salió un sonriente Andrés Chadwick, quien descartó cualquier rumor de cambio de gabinete.
Luego, La Moneda esperó a ver qué decía la oposición, que durante la mañana tuvo una larga reunión en el Congreso para abordar cómo proceder con respecto a la acusación constitucional. Y la decisión opositora de “patear” para marzo el asunto dio un alivio a Palacio, que ve de nuevo cómo amaina la crisis y se esfuma la presión por sacar del gabinete al hombre ancla del Gobierno.
Al defender a su mano derecha, Piñera hizo un repaso de la gestión del Gobierno tras el crimen del comunero mapuche Camilo Catrillanca. Con una mirada particular de los hechos, el Mandatario aseguró que ni el Ejecutivo –ni Chadwick– validaron nunca las versiones entregadas por Carabineros. Además, declaró que el ministro pidió al día siguiente de los hechos un fiscal y presentó las querellas criminales correspondientes.
“Desde el primer día, este Presidente acordó con el ministro del Interior no validar ni avalar ninguna de las versiones iniciales que surgieron de Carabineros”, dijo Piñera.
La declaración del Presidente llama la atención, tomando en cuenta que en su primera versión a la prensa, Chadwick fue enfático en contextualizar la muerte del comunero señalando que «estos son los hechos (…) han tenido su origen en un delito común, en un asalto contra 4 mujeres». El Gobierno, además avaló desde el inicio la versión del “fuego cruzado”. Incluso, la vocera de Gobierno Cecilia Pérez llegó a hablar de un enfrentamiento de “4 horas”, una declaración que han quedado rotundamente desmentida con el curso de la investigación.
Sin embargo, de acuerdo a la visión de Piñera, nada en el actuar de Chadwick se ajusta a las causales que establece la Constitución para interponer una acusación constitucional. Tampoco lo justificarían los dichos y actuaciones del ministro. Por todo esto, hizo un llamado a la “responsabilidad y espíritu cívico” de todos los parlamentarios.
