En el clásico programa de análisis político de El Mostrador, el analista Germán Silva señaló que la oposición se encuentra en tan mal pie que “es bueno que salgan de vacaciones”. “Desde la derrota de 2017, que fue estrepitosa, la oposición sigue en estado de shock», comentó. Para la editora de El Mostrador, Marcela Jiménez, el diagnóstico es tajante: «¿De qué oposición me hablan? No ha existido oposición. Lo único que hay son pugnas picantes de poder, salir más en la tele, o meterse por la ventana en La Moneda», cuestionó.
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En una nueva edición de La Semana Política, los editores y panelistas de El Mostrador, Héctor Cossio y Marcela Jiménez, conversaron con el analista político Germán Silva acerca del crítico estado de la oposición durante el segundo Gobierno de Sebastián Piñera, lo que se ha evidenciado en su incapacidad de marcar políticamente la agenda, entre otras dificultades.
«Yo creo que ha habido atisbos de despertar, pero con una mala performance», explicó Silva al comienzo del programa. «Esto tiene que ver con disputas pragmáticas que no tienen nada de fondo. Es un momento donde la oposición debería reflexionar, creo que es bueno que salgan de vacaciones. Mientras no se hable de contenidos, de propuestas para el país, será un año donde la oposición no tiene propuestas y el Gobierno juega solo. Si el Gobierno ha tenido dificultades, es por errores no forzados», comentó.
Y en relación a la situación del oficialismo, dada la ausencia de la oposición, el analista añadió que «con la cancha vacía, se puede jugar bastante mejor».
«¿De qué oposición me hablan? No ha existido oposición», replicó Jiménez, haciendo ver la “intrascendencia e inexistencia” de la ex Nueva Mayoría y el Frente Amplio.
«No hay liderazgos, ese es el tema, no hay manejo político. Los presidentes de partidos son inexistentes, no tienen opinión. Pasan los temas de la agenda… ¿alguien se acuerda de lo que dijo Álvaro Elizalde tras la muerte de Camilo Catrillanca? No opinan, para bien o para mal. Además, no tienen propuestas, no hay proyecto. Lo único que hay son pugnas picantes de poder, donde cada uno se pelea por su parcelita de poder: o salir más en la tele, o meterse por la ventana en La Moneda», cuestionó.
«¿Cómo se llega a ese estado donde no hay proyecto porque no hay norte ni sur?», preguntó Cossio a Jiménez y a Silva.
«La derrota del 2017, que fue estrepitosa, marca desde ese momento un desconcierto. La oposición sigue en estado de shock, sin preguntarse bien por qué Piñera volvió a ser Presidente. El PPD, por ejemplo, hizo una reflexión al mes siguiente, pero pareció más como una terapia colectiva, y después no se supo nada más. En el caso de la DC, la candidatura de Carolina Goic fue un desastre», respondió el analista político.
Al describir el panorama opositor, Jiménez aseveró que “la fórmula de la unión DC-PS, ya estaba agotada, ya no existe. Nosotros el año pasado ya hablábamos de que eran un matrimonio mal avenido”. “Por otro lado, el Frente Amplio, que eran la gran promesa de la renovación de la política, y terminaron no superando la prueba de jugar en las grandes ligas, haciendo noticias por las cosas más insólitas, regalándole los puntos a la derecha para que se generen caricaturas del debate público, como el tema de la polera de Jaime Guzmán», agregó.
Silva insistió en la situación en que se encuentra la DC. «El presidente de la DC, por ejemplo, hablando de temas tan intrascendentes. ¿De qué está hablando él? Es muy lejano a la realidad del país», agregó.
En respuesta, Cossio explicó que «antes del proyecto, debe existir un relato de la centroizquierda, siempre ha habido un relato, pero ahora ese relato es el que yo me pregunto si existe y que nos permita aglutinar fuerzas». «No hay relato porque no hay visión de país. Yo creo que al final terminarán negociando para sobrevivir electoralmente, pensando en las próximas municipales», remató Jiménez.
