Los peluches en cuestión son Renacín y Spamina, repartidos a la comunidad en el marco del programa «Maipú Kids» el 27 de junio pasado por el Día del Niño.
La Contraloría General de la República se pronunció este martes respecto a un requerimiento de un grupo de concejales de la Municipalidad de Maipú y parlamentarios de oposición, sobre la adquisición de dos peluches por parte de la alcaldesa Cathy Barriga.
Los peluches en cuestión son Renacín y Spamina, repartidos a la comunidad en el marco del programa «Maipú Kids» el 27 de junio pasado por el Día del Niño.
Según información de La Tercera, Contraloría confirmó que iniciará una auditoria al proceso de aportes provenientes del Ministerio de Educación, ya que los recursos con los cuales se obtuvieron los peluches habrían provenido del Fondo de Apoyo a la Educación Pública, FAEP.
«Los fondos se gastaron de mala manera», dijo al citado medio el concejal Ariel Ramos, quien aseguró que el uso de estos fondos son acotados y que entre sus fines se encuentra el perfeccionamiento docente y mejoras en la infraestructura de los establecimientos educacionales.
«En ningún caso está la compra de estos productos como los peluches. Lo que la administración de la Municipalidad de Maipú está intentando asegurar es que estos peluches se compraron para hacer campañas de retención de matrículas, lo cual es absolutamente falso», señaló Ramos.
Algunas fuentes señalan que los resultados de la auditoria se darían a conocer en el primer semestre de 2019.