Fernando Guarello De Toro -hermano del popular periodista deportivo- es el director ejecutivo de una empresa de arquitectos ligada al ámbito deportivo, sobretodo a los estadios del fútbol chileno. Como tal, vieron en la remodelación del estadio Tierra de Campeones una oportunidad para seguir ligados al fútbol. Para eso, decidieron aliarse de palabra, con la empresa Icafal, reconocida en el mundo de edificaciones mineras. Pero luego vino el conflicto: «la licitación en cuestión data del año 2016, rotulada 819-4LR16, MOP D.S. 108. El 21 de septiembre de 2017 fue adjudicado el contrato por casi 24 mil millones de pesos. Al día siguiente a mi me sacan del contrato, se quedaron con mi proyecto, no me pagaron nada, no me compensaron», explicó el profesional, razón por la que demandó a la constructora y al Ministerio de Obras Públicas.
Era un sueño que anhelaban en Iquique. Tras el terremoto del 2014, su estadio «Tierra de Campeones» sufrió severos daños, por lo que de inmediato se comenzó a buscar alguien que se haga cargo de las reparaciones. Se abrió una licitación el año 2016 y, un año después, la constructora Icafal y la empresa de arquitectos GuarelloArq se adjudicaron -en conjunto- el proyecto por casi 24 mil millones de pesos.
De esa fecha, van dos años y el estadio aún no se puede utilizar. ¿La razón? Un cambio en la dirección del proyecto que dejó de lado a quienes diseñaron el nuevo recinto deportivo, la empresa de arquitectos, lo que terminó con una demanda presentada en el 21° Juzgado Civil de Santiago.
Fernando Guarello, director ejecutivo, relató a El Mostrador los motivos de la demanda: «la licitación en cuestión data del año 2016, rotulada 819-4LR16, MOP D.S. 108. El 21 de septiembre de 2017 fue adjudicado el contrato por casi 24 mil millones de pesos. Al día siguiente a mi me sacan del contrato, se quedaron con mi proyecto, no me pagaron nada, no me compensaron».
Agregó que «los estoy demandando por infracción a la propiedad, porque siguieron el contrato con mi proyecto que firmamos nosotros y no es de ellos. A mi me robaron el proyecto». La constructora no es la única demandada. También el Ministerio de Obras Públicas de la región y su dirección de arquitectura -quienes avalaron este cambio- y el arquitecto, Alberto Montealegre, quien fue designado por Icafal como nuevo director del proyecto que GuarelloArq había diseñado.
Icafal es una constructora bastante conocida, sobretodo por sus construcciones y edificaciones en el mundo minero. De hecho, tres integrantes de su directorio pertenecen a la Cámara Chilena de la Construcción: el ingeniero civil Jorge Letelier, es su vicepresidente, Juan Enrique Ossa, es director de la Corporación de Desarrollo Tecnológico de la Cámara y Sergio Icaza, uno de los fundadores de Icafal, es jefe de la comisión de estatutos de socios de ésta. Sólo Letelier es mencionado, con nombre y apellido, en la demanda presentada por Guarello.
Pero, a juicio de distintos arquitectos consultados, no lo es tanto en el mundo de las edificaciones que no están relacionadas con la minería. Por eso abusan de su estatus para sacar provecho en sus acuerdos «de palabra».
A juicio de Guarello y reafirmado por su abogada Paulina Nakouzi, el problema radica en que Icafal decidió cambiar al arquitecto, que es el consultor principal del proyecto y responsable del diseño, algo que no sería nuevo en el modus operandi de la constructora.
Icafal y el MOP trabajaban codo a codo en la remodelación del estadio. Los arquitectos de GuarelloArq subían sus planos a un servidor manejado por la constructora. Tras la ruptura, la constructora les bloqueó el acceso a estos documentos, pero GuarelloArq tenía respaldo de todo lo que había diseñado y que había sido robado por los demandados.
«Icafal tiene más de 100 contratos judicializados. Si tú miras su Rut en el Poder Judicial, han sido demandados por un montón de gente, incluso por el municipio de Peñalolén, por las obras del Velódromo», precisó el arquitecto. Según la página del Poder Judicial, desde el año 2001 son 119 causas las que tiene la constructora y sólo este año, ya aparece en 8.
Ni los contratistas del estadio han podido mantenerse alejados de la polémica, ya que Icafal no les pagó lo acordado y éstos, en señal de protesta, cruzaron sus camiones e implementos en la entrada del recinto. Literalmente, se tomaron el estadio.
Al momento de la publicación de este reportaje, la justicia falló a favor de GuarelloArq, ganando la demanda preliminar. Mientras tanto, la gente de Iquique sigue esperando que se solucione el conflicto, ya que la firma final tiene que ser de Fernando Guarello. Y mientras la demanda siga en curso, se paralizará el estadio.
Tras diversos intentos de El Mostrador, Icafal no quiso referirse a la situación.