En un nuevo capítulo de La Semana Política en El Mostrador, el director ejecutivo Federico Joannon y la editora periodística, Marcela Jiménez, conversaron con la directora de MORI Chile, Marta Lagos, sobre las primarias en Argentina, donde la analista aseguró que “fue un plebiscito sobre la economía y como la promesa de Macri no se cumplió recibió un castigo electoral brutal”. En el caso chileno, asume que la percepción que existe “es de que hemos retrocedido y que hemos perdido”, sobre todo a nivel institucional, y pese a que el Presidente Sebastián Piñera es visto como el «culpable» de este complejo momento, “puede pasar perfectamente que gane Lavín, porque la gente vota por personas y se acabó el voto ideológico”.
Las encuestas nuevamente fallaron, y en forma estrepitosa. Esta vez, ocurrió en las primarias de Argentina en las que el candidato opositor Alberto Fernández apabulló al oficialista Mauricio Macri. Para abordar este tema, y otros de la agenda nacional, el director ejecutivo de El Mostrador Federico Joannon y la editora periodística Marcela Jiménez conversaron con la directora del MORI Chile Marta Lagos en un nuevo capítulo de La Semana Política.
Al ser consultada sobre las causas del fallo generalizado de los sondeos de opinión en Argentina, Lagos sostuvo que «cuando las encuestas fracasaron en Colombia, los encuestadores en América Latina se reunieron en Buenos Aires y llegamos a la conclusión de que las encuestas habían fracasado en ese entonces, por tres motivos. Primero porque no son presenciales, segundo porque son baratas, es decir se gasta poca plata, se hacen pocas entrevistas y no se cubre la totalidad del universo».
«Y tercero, porque no se sigue el protocolo de controles y eso también cuesta plata. El protocolo de controles es más bien un tema de rigor, de aplicación, entonces estos tres elementos hacen que la encuesta tenga toda la apariencia de ser una encuesta propiamente tal, pero no es el instrumento capaz de anticipar en resultado de una elección», agregó.
Respecto al problema de las encuestas hoy en día, Lagos señaló que «si haces 700 entrevistas en vez de 1.500, no puedes hacerlo, pero tú publicas el resultado de 45% y no sabes cuántas entrevistas hay detrás».
«Cuando los medios de comunicación publican todas las encuestas que se hacen, sin distinguirlas, entonces al final terminan todos los números comparados consigo mismo, pero ninguno representa al país», añadió.
«Juntan peras con manzanas», complementó Federico Joannon.
Respecto a la razón por la que habrían fallado las encuestas al otro lado de la cordillera, Lagos dijo que el problema fue «que no se hizo ninguna presencial, ninguna con el número de casos suficientes».
«En este caso, yo habría hecho 2.000 casos con controles súper fuertes y muy rápido, lo que significa un ejército de gente movilizada, algo que nadie hizo, que nadie lo quiso financiar, porque los políticos tienen muchas veces la impresión de que da lo mismo, de que lo que importa es tener el número al final, que salga el número publicado en la primera página (de los diarios)», aseveró.
«Entonces las encuestas quedan súper dañadas porque en realidad los propios encuestadores saben lo que están haciendo, saben que le aceptaron al cliente en vez de los 20 que necesitaban, aceptaron 10 e hicieron una cosa que se tambalea y que se cae por el precipicio», explicó.
Trasladándonos a lo que pasa en Chile, Marcela Jiménez señaló que «hay algo que se le ha criticado a la Cadem y que habla del prestigio de las cifras y que tiene relación con ¿cuánto ha sido el daño cuando las encuestas pasaron a ser parte de la estrategia política para marcar o generar realidades?”.
Al respecto, Lagos reiteró sus críticas a esta medición semanal. «La encuesta Cadem está financiada por el Gobierno y aparenta ser independiente. Ahí hay una contradicción que los medios de comunicación no han transparentado», acusó.
«En segundo lugar, tiene un problema de cobertura, es una encuesta que no cubre la totalidad del país y aparenta cubrirla. Tiene un sesgo que se notó cuando salió la encuesta CEP y nosotros sacamos una encuesta también en la que teníamos mucha similitud con la CEP. En cambio, ellos tenían 9 puntos de diferencia. Entonces tienen un sesgo socioeconómico y geográfico que tampoco está transparentado», explicó.
«Y tienen también un tema con las preguntas, por ejemplo, esta pregunta sobre las 40 horas que ellos parecen con el 75%, yo creo que está sobredimensionado. Eso es un poco de constructivismo, como se le llama a la tesis sociológica de que tú construyes una realidad, y tú con una encuesta pueden construir cualquier realidad», sostuvo.
«Entonces construyeron este dato, un 75% que golpeó al Gobierno tremendamente y que tiene instalada esta discusión sobre las 40 y 41 horas, que yo creo que si se hiciera una encuesta nacional con todas las de la ley, ese número no sería 75%, sino que sería 60% o 65%», agregó.
¿Cuál es tu interpretación de lo que pasó en las primarias de Argentina?, preguntó Joannon.
«Yo creo que Cristina Kirchner es un genio político que ha demostrado no solo esta vez, sino que en varias ocasiones en que ella estuvo en las cuerdas, logró dar vuelta la película», respondió Lagos.
«Ella tiene 5 acusaciones de corrupción por lo que tiene la posibilidad de ir a la cárcel. ¿Pero cuál es la cuenta que ella sacó? Sola no llego, si pierdo me voy a la cárcel, por lo tanto qué es lo que hay que hacer para no ir a la cárcel. Tengo que ganar. ¿Y cómo gano?, sumando a todos los peronistas. Me muerdo la lengua, llamo a mi oponente principal (Alberto Fernández) y le digo que lidere la cuestión, con lo cual sumo a toda la gente que está en contra mía», sostuvo.
«Yo creo que esa movida transformó la elección las PASO (primarias) en un plebiscito sobre la economía, porque logró hacer que el foco no fuera ella, las acusaciones de corrupción desaparecieron en la discusión de la campaña», añadió.
«Lo que ganó fue el plebiscito sobre la economía. La promesa de Macri no se cumplió por lo que hay un castigo electoral brutal», señaló.
Haciendo un parangón con Chile, Jiménez planteó que “también hay promesas incumplidas, se prometieron los Tiempos Mejores y no pasa nada. Ya pasamos a los Tiempos Difíciles y se vienen los tiempos negros parece”.
«Yo creo que hay un paralelo que se produce no en cuanto a los niveles, porque Argentina tiene un nivel de crisis distinto al chileno, pero sí en cuanto a las percepciones. Chile está viviendo un momento bastante complejo en términos de que la población siente que está muy mal, en circunstancias que objetivamente hablando, la población chilena no está en recesión, no estamos en crisis económica, sin embargo, la percepción que existe es de que hemos retrocedido y que hemos perdido», dice Lagos.
«Esa percepción de retroceso económico, político y social con la caída de las instituciones, el tema de Renato Poblete, todo eso se refuerza, entonces la percepción en que estamos de alguna manera derrumbando en este cascarón súper fuerte que tenía Chile que era su institucionalidad», añade.
Ante esto, Jiménez sostiene que «entonces no se ve nada en este Gobierno para mejorar esa percepción, porque convengamos que la reforma tributaria no apunta a eso, la reforma laboral tampoco. Se hablan de temas cáscaras que no apuntan a esa sensación o esa percepción de la gente».
«Si hoy hubiera una votación sobre Piñera, perdería porque él es la figura de la culpabilidad de lo que está sucediendo, en él recae finalmente el estado de situación actual», asegura Lagos.
«Pero hoy día la política no está basada en sectores, ni en ideologías, no importan los partidos, sino que valen las personas, entonces puede pasar perfectamente que este Gobierno sea un tremendo fracaso y que los chilenos sigan sintiendo en el 80% que vamos en retroceso y gane Lavín, porque la gente vota por personas, se acabó el voto ideológico, se acabó el voto de conglomerado», señaló.
Respecto a la carrera presidencial que ha sido un tema en el tapete considerando el difícil escenario del actual Gobierno, Joannon consultó si es real que Lavín tiene la “pole position”.
«En abril preguntamos cuál era el político con más futuro, y Lavín salía con 8 puntos de distancia con la Beatriz Sánchez, que se sitúa en el segundo lugar», recordó Lagos.
¿Qué tan perjudicial es este adelantamiento de la carrera presidencial?, considerando que el Gobierno lleva recién dos años de mandato, plantea Jiménez. Ante esto, Lagos sostiene que que “el adelantamiento de la carrera presidencial es una excelente nube para tapar el fracaso del cumplimiento de las expectativas”.
En este esquema, qué pasa con el centro político, pregunta Joannon. «No hay elección que se gane sin el centro político, el 40% de la población se ubica valóricamente en el centro político, pero al mismo tiempo yo te diría que el centro político no existe porque no tiene liderazgo, no tiene interpretación, no tiene personas. El centro político es una quimera metodológica», finalizó Lagos.