Según el Barómetro Global de la Corrupción: América Latina y el Caribe, un informe anual de Transparencia Internacional confeccionado a partir de entrevistas que incluyen a 17.000 ciudadanos de 18 países, pese a los cambios ocurridos en el país tras bullados casos como el fraude en Carabineros y en el Ejército, y a las medidas de probidad que ha tomado el Gobierno para mejorar la imagen ante los chilenos y el extranjero, la percepción no cambia. Aunque, como premio de consuelo para el país, la situación se repite en otros lugares de América Latina y el Caribe.
A pesar del escándalo en Carabineros y el fraude en el Ejército, Chile avanza hacia un país con una mejor regulación en materia y probidad. Pero eso parece no ser suficiente para la ciudadanía, tal como queda demostrado en las diversas mediciones, como la elaborada por Transparencia Internacional.
Según el Barómetro Global de la Corrupción: América Latina y el Caribe -un informe anual confeccionado a partir de entrevistas que incluyen a 17.000 ciudadanos de 18 países- la imagen que proyecta Chile al exterior, no se ve reflejada por los nacionales ya que un 54% de los chilenos cree que la corrupción ha aumentado en el país durante los últimos 12 meses.
De hecho, mientras el 13% de la población local reconoce haber sobornado a un funcionario estatal para obtener un servicio público, casi dos tercios considera que la mayoría o todos los miembros de Congreso son corruptos.
“Pese a los esfuerzos del Gobierno, como la nueva agenda de probidad, preocupa que el fenómeno de la corrupción siga tan presente”, plantea Alberto Precht, director ejecutivo de Chile Transparente, representante del organismo internacional en el país.
En tanto, el 19% afirma que candidaturas a cargos de elección popular le ofrecieron regalos a cambio de votos.
“Por esta razón, hacemos un llamado al Servicio Electoral (Servel) a tomar medidas para que se cumpla la ley que prohíbe todo tipo de dádivas en tiempo de campañas electorales, porque en una democracia ese porcentaje es relevante”, destaca el también miembro del directorio de Transparencia Internacional.
La situación de Chile es similar en otros países. El Barómetro Global de la Corrupción pone de manifiesto que «más de la mitad» de los ciudadanos cree que la corrupción está empeorando en su país, y que sus gobiernos hacen «un mal trabajo» para combatirla, pecan de falta de integridad y de laxismo.
Por ejemplo, según el informe de la ONG, el 91% de los venezolanos «sostiene que su gobierno está fracasando en la lucha contra la corrupción», al igual que el 79% de los panameños y el 72% de los dominicanos.
Según el documento, uno de cada cinco ciudadanos ha sufrido extorsión sexual o conoce a alguien que haya pasado por esa situación, y el 71 por ciento de los sondeados afirmó que se trata de un fenómeno que ocurre, al menos, de forma ocasional. Los países con mayor proporción de casos reportados fueron Barbados (30%) y Guatemala (23%).
Ante esta situación, la organización instó líderes políticos a «reconocer y abordar las formas de corrupción que afectan principalmente a las mujeres» y a aplicar el Compromiso de Lima sobre la corrupción, adoptado en 2018.
En total, un 85% de la población de América Latina y el Caribe califica la corrupción de «gran problema», mientras que solo el 13% la ve como un problema menor. «La ciudadanía tiene derecho a denunciar la corrupción y esperar que los políticos actúen de manera íntegra», señaló Patricia Moreira, Directora General de Transparencia Internacional.