De acuerdo a una declaración firmada por el gerente del hotel viñamarino, José Antonio Dávalos, “los hechos pusieron en riesgo la vida y la integridad de nuestro personal y de nuestros clientes, hechos que no tenemos ninguna seguridad no vuelvan a ocurrir”.
Las imágenes del Hotel O’Higgins, el emblemático recinto de Viña del Mar atacado por encapuchados y con automóviles incendiados en su exterior, marcaron la previa de la inauguración del Festival Internacional de la Canción y obligaron a los encargados del recinto a tomar drásticas medidas.
La gerencia del hotel comunicó esta tarde que suspenderá indefinidamente su funcionamiento, “frente a los hechos de público conocimiento acontecidos el día de ayer, que causaron graves daños a la propiedad municipal y privada”.
De acuerdo a la declaración firmada por el gerente del hotel, José Antonio Dávalos, “los hechos pusieron en riesgo la vida y la integridad de nuestro personal y de nuestros clientes, hechos que no tenemos ninguna seguridad no vuelvan a ocurrir”.
Además de los incidentes en el Hotel O’Higgins hubo una serie de hechos de vandalismo en la Ciudad Jardín, como ataques a automotoras y sucursales bancarias, además de apedreos incluso a las camionetas que trasladaban a los artistas a la Quinta Vergara.
El Hotel O’Higgins es uno de los iconos del festival, y funcionaba como centro de operaciones de medios de comunicación que trabajan en la cobertura del certamen veraniego, además de alojamiento para los profesionales que trabajan en el evento.