Luego de encabezar su primer consejo de gabinete tras el regreso de sus vacaciones, el Presidente emplazó a la oposición, y dijo que no se trata solo de condenar la violencia, “sino que se tiene que condenar a quienes no condenan la violencia y a los que no defienden la democracia”. Asimismo, agregó que «Chile ya ha tenido demasiada violencia», y llamó a avanzar en el «Acuerdo por la Paz y la Democracia» de cara a marzo. También manifestó su «apoyo y gratitud» a Carabineros y la PDI.
Tras el regreso de sus vacaciones y luego de un consejo de gabinete que convocó a casi todos sus ministros en la Moneda, el Presidente Sebastián Piñera fijó sus prioridades de cara a marzo, insistiendo en la necesidad de avanzar a un Acuerdo por la paz, la democracia y contra la violencia.
El Mandatario aludió a los últimos hechos, señalando que no se trata solo de condenar la violencia, sino que “recuperar el orden público, esa es la prioridad número uno porque la violencia es un atentado a la democracia, en un atentado a los derechos humanos, es un atentado a los proyectos de vida de millones y millones de chilenos y por eso lo que estamos planteando que el país necesita con urgencia un gran acuerdo nacional en contra de la violencia y en beneficio de la democracia. Y ese acuerdo tiene que no solamente condenar la violencia y resguardar la democracia, sino que tiene que condenar a quienes no condenan la violencia y a los que no defienden la democracia”.
Rodeado de sus ministros, Piñera manifestó su «apoyo y gratitud» a Carabineros y la PDI, y emplazó a la oposición, señalando que “la línea divisoria no es entre Gobierno y oposición, este es un tema entre los que creemos en la democracia y los que no creen en la democracia, en los que creemos que la violencia no es el camino y en los que creen que la violencia es el camino”.
En este contexto, el Presidente remarcó en la necesidad de tener “paz y orden público” para así poder concretar un plebiscito democrático, limpio y transparente” aludiendo a la consulta del 26 de abril donde se zanjará el tema de la nueva Constitución y su mecanismo.
En cuanto a las prioridades para marzo, Piñera dijo que se va a impulsar con fuerza la agenda social, el ingreso mínimo garantizado, la reforma a la salud y la agenda de orden público y seguridad ciudadana.
En este sentido, el Presidente puso acento en avanzar “en el proyecto de ley que mejora el sistema nacional de inteligencia para poder anticiparnos y combatir con inteligencia la delincuencia, el crimen, el narcotráfico y el terrorismo”.
Para lo anterior, el Mandatario explicó que es necesario aprobar también la ley de infraestructura crítica para poder permitir que las Fuerzas Armadas colaboren en la protección de lugares como hospitales, plantas de agua potable y plantas de electricidad.
Por otra parte, el Presidente también señaló que “tenemos que avanzar en el proyecto de ley que moderniza a Carabineros, para tener un cuerpo de Carabineros que pueda cumplir el rol asegurar el orden público y seguridad ciudadana”.
Según Piñera, “esas son medidas fundamentales en la seguridad ciudadana y por esa razón yo creo que tenemos que hacer todos los esfuerzos para lograr este acuerdo por la democracia y contra de la violencia, se concretice, se clarifique, que denunciemos y aislemos a aquellos que están por la violencia y contra de la democracia, y al mismo tiempo avanzar en forma significativa en estas dos grandes agendas”.
En cuanto a la agenda social, el Mandatario mencionó la necesidad de lograr avances en “mejoras a las pensiones 860 mil personas de clase media, especialmente mujeres y ese proyecto está actualmente en el Congreso. Tenemos que tener avances significativos en crear el ingreso mínimo garantizado, que va a beneficiar a más de 700 mil trabajadores de bajos ingresos de nuestro país. Tenemos que lograr avances significativos en la reforma a la salud, mejorar Fonasa que le va a mejorar el acceso y la calidad de la salud a más de 14 millones de chilenos”.