Publicidad
Problemas de confianza política de la oposición con el Gobierno marcan la reunión convocada por La Moneda para un “gran acuerdo nacional” PAÍS Crédito: Agencia UNO

Problemas de confianza política de la oposición con el Gobierno marcan la reunión convocada por La Moneda para un “gran acuerdo nacional”

Publicidad

«Sé que hay un riesgo de que (el Gobierno) no escuche y que tenga todo más menos cocinado. Pero prefiero correr ese riesgo y pecar de ingenuo”, dijo uno de los participantes, el presidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chahin, en la antesala de la reunión convocada por La Moneda. Otros, como el senador socialista Carlos Montes, ponen paños fríos a las lecturas que pretenda instalar la administración Piñera “Este no es un acuerdo nacional, para eso está el proceso constituyente”, dijo. En tanto, desde el FA acusan exclusión: «Se ha pintado un acuerdo nacional que realmente no es, se ha utilizado de manera mentirosa estos titulares por parte del Gobierno», acusó la presidenta de Convergencia Social, Gael Yeomans.


Los problemas de confianza han marcado la reunión convocada para este viernes por La Moneda en el marco del “gran acuerdo nacional” al que ha convocado el Presidente Sebastián Piñera.

En el Frente Amplio hay quejas por la exclusión de algunos partidos, mientras en la ex Nueva Mayoría -aparte de la anunciada automarginación del Partido Comunista- cunde el escepticismo, la desconfianza, las dudas y los cuestionamientos por el resultado de este diálogo.

Así lo graficó esta mañana el presidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chahin: «Sé que hay un riesgo de que no escuchen y que tengan todo más menos cocinado. Pero prefiero correr ese riesgo y pecar de ingenuo».

Entrevistado en Radio Duna, el exdiputado justificó de todos modos su participación en la instancia, señalando que “este es el momento para pensar en el país y en la gente, no nos podemos restar. Esto no es tirarle un salvavidas al Gobierno pero entendemos que es el que tiene que conducir».

«No estamos representados»

En el encuentro virtual encabezado por el  ministro del Interior, Gonzalo Blumel, no se consideró a todos los partidos del FA, lo que indignó a este bloque. «Se ha pintado un acuerdo nacional que realmente no es, se ha utilizado de manera mentirosa estos titulares por parte del Gobierno, porque la verdad es que -primero- ni siquiera es un acuerdo nacional con todos los partidos», acusó la presidenta de Convergencia Social, Gael Yeomans.

“No estamos representados en la reunión con el Gobierno, queda en evidencia que buscan restringir el diálogo desde el inicio y eso habla muy mal de si realmente están con voluntad de construir un acuerdo que enmiende el rumbo”, añadió la diputada a Radio Cooperativa.

El reclamo de Yeomans se suma al diputado del Partido Liberal Vlado Mirosevic, quien sostuvo que el llamado es “ni tan diálogo, ni tan nacional”. Según denunció el parlamentario, el Gobierno no los invitó, a pesar de haber mostrado nuestra disposición».

Las sobreexpectativas del Gobierno

En la oposición también tienen temor de las expectativas del Gobierno y además esperan un diálogo urgente, acotado y que se limite a enfrentar la emergencia sanitaria, como lo expresó el senador socialista Carlos Montes

“Este no es un acuerdo nacional, para eso es el proceso constituyente. Estamos hablando de un diálogo para resolver los problemas más fuertes que tenemos en este momento», indicó el legislador en Radio Universo.

A juicio de Montes, “el Gobierno no lo ha hecho bien y tiene que disponerse a un diálogo para rectificar…La oposición ha sostenido una línea argumental, no cree tener la razón en todo, pero lo que busca es tener un diálogo”, añadió.

En cuanto a las expectativas, Chahin recordó que la DC pidió que se instalara una mesa de diálogo y trabajo y además se esperan resultados concretos. «El país necesita que el diálogo sea conducente, que esto no sea algo simbólico para poder responder a las familias que no solo están en la incertidumbre, sino que están cayendo en la desesperación», indicó.

A su juicio, hay posibilidades de llegar a una salida, argumentando -en alusión al acuerdo constituyente del 15 de noviembre- que “si fuimos capaces de ponernos de acuerdo en 36 horas para cambiar la Constitución, cómo no vamos a ser capaces de ponernos de acuerdo, en una semana, para tener propuestas para que nuestros compatriotas no pasen hambre”.

Publicidad

Tendencias