Es el caso de la trabajadora de la salud Beatriz Valenzuela, quien solicitó poder retirar sus ahorros previsionales de la AFP Habitat, la que fue rechazada a inicios de este mes por la Corte de Apelaciones de Punta Arenas.
Antes del debate por el proyecto que permitirá el retiro de fondos de pensiones en medio de la pandemia del Covid-19, dos mujeres habían estado luchado antes por obtener estos recursos. Una fue la profesora de Antofagasta, María Angélica Ojeda, cuya solicitud de poder sacar sus fondos desde la AFP Cuprum fue acogida por la Corte de Apelaciones de dicha ciudad.
La otra, sin embargo, no corrió la misma suerte. Es el caso de la trabajadora de la salud Beatriz Valenzuela, quien solicitó poder retirar sus ahorros previsionales de la AFP Habitat, la que fue rechazada a inicios de este mes por la Corte de Apelaciones de Punta Arenas.
Debido a esto, Valenzuela apeló ante la Corte Suprema, en un escrito que fue ingresado ayer ante el tribunal.
“Lo resuelto por la Ilustrísima Corte de Apelaciones de Punta Arenas vulnera la Convención Interamericana sobre la protección de los derechos humanos de las personas mayores publicada el 7 de octubre del año 2017″, señala el documento que publica el diario La Tercera.
En el fallo de la Corte de Punta Arenas, se lee que “no se advierte arbitrariedad o ilegalidad en el actuar de la recurrida, por lo que en la especie es posible concluir que no se reúne la exigencia contenida en la letra b del considerando segundo, motivo por el cual el presente recurso deberá ser desestimado”.
Por lo que, de acuerdo al Decreto Ley 3.500, que creó el sistema de capitalización individual, se establece que “los afiliados al sistema de pensiones no pueden retirar sus fondos previsionales acumulados en las cuentas de capitalización individual, sino es bajo la modalidad de una pensión, que puede ser de vejez, invalidez o de sobrevivencia”.