El principal punto que ha hecho fracasar el entendimiento es la insistencia del Gobierno y el oficialismo de obligar a los electores indígenas a constituir un padrón especial, distinto del padrón nacional; otro escollo es si los escaños indígenas son adicionales al número de convencionales constituyentes o se consideran incluidos dentro del número de integrantes original. La idea de los senadores opositores Huenchumilla (DC), De Urresti (PS) y Araya (Ind.) es proceder a la votación del proyecto en la próxima sesión de la Comisión de Constitución. Pero el tema recién será visto la próxima semana, después del plebiscito constituyente del 25 de octubre, con los resultados de la consulta en la mano “y que la opinión pública tenga claro quiénes se oponen”, dijo la diputada mapuche Emilia Nuyado. A juicio de Diego Ancalao, “los cupos reservados para los pueblos originarios es un imperativo ético”, pero también tiene una mirada crítica de la oposición, señalando que “llama la atención que quienes han usufructuado del Estado por más de 30 años, y no han resuelto hasta la fecha la demanda política indígena de cupos reservados, se escandalicen con las negativas del Gobierno” [ACTUALIZADA]
Los escaños reservados para pueblos originarios se han transformado en uno de los nudos del proceso constituyente y el tema está absolutamente en punto muerto en la Comisión de Constitución del Senado, con acusaciones de obstruccionismo hacia el Gobierno y el oficialismo.
Los senadores de oposición dieron por fracasado el acercamiento con el oficialismo en la mesa técnica tendiente a concordar una propuesta común en la votación en particular que aún está pendiente en la instancia. El tema ya está zanjado en general, pero los problemas radican en el articulado de la ley.
«Las conversaciones con el Gobierno fracasaron», enfatizó el senador DC Francisco Huenchumilla en Radio Cooperativa. «Representantes del Gobierno y del oficialismo presentes en esta instancia, han sostenido una permanente postura de obligar a los electores indígenas a constituir un padrón especial, distinto del padrón nacional, para determinar finalmente los convencionales indígenas a elegir», añadió el legislador DC en una declaración suscrita con sus colegas Alfonso de Urresti (PS) y Pedro Araya (Ind.)
La idea de los parlamentarios opositores es proceder a la votación del proyecto en la próxima sesión de la comisión. Pero el tema recién será visto la próxima semana, después del plebiscito constituyente del 25 de octubre, con los resultados en la mano. El problema de no llegar a un acuerdo es que en la votación en Sala se requieren 3/5, lo que podría hacer fracasar cualquier propuesta.
El principal punto que ha hecho fracasar un acuerdo dice relación con el padrón. “Los representantes oficiales del Gobierno, en la comisión técnica señalada, consideran que esta representación solo podría estar sujeta a la cantidad de electores indígenas que sean inscritos en forma apartada, lo que se aleja del principio de representación equivalente al 12,8% de habitantes indígenas en Chile”
Otro punto de discusión es si los escaños indígenas son adicionales al número de convencionales constituyentes definidos en el acuerdo del 15 de noviembre –convención constitucional (155) y convención mixta (172)– o se consideran incluidos dentro del número de integrantes original.
A La Tercera, el senador Rodrigo Galilea (RN) sostuvo que “hicimos una propuesta que ha buscado que se respete lo que es la Ley Indígena, lo que los convenios internacionales dicen respecto de quiénes tienen calidad indígena y que sea compatible con los criterios de proporcionalidad y representatividad de la ley electoral chilena. Y en ese sentido, nos parece que dado que no ha aumentado el número de chilenos que van a votar, los escaños indígenas deben estar dentro de los 155”.
En la Cámara de Diputados y el mundo mapuche, la falta de consenso en el Senado ha generado reacciones. La diputada socialista Emilia Nuyado, acusó que “el Gobierno y la derecha insisten en obstaculizar nuestra participación”.
«Hoy y dado el contexto están exigiendo que los indígenas se inscriban en un padrón especial, y según la inscripción en ese padrón se calculará el porcentaje de escaños reservados, lo que me parece una ridiculez, solo quieren reducir al mínimo la participación indígena. Aquí sin duda al Gobierno y a los poderes económicos no les gusta que podamos escribir una Constitución, porque tienen miedo de la mirada indígena respecto a los derechos territoriales y políticos, que nos han negado siempre», dijo la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara.
«Las Naciones Preexistentes somos casi el 13 % de la población según el Censo Nacional y como tal corresponde que nuestra representación sea en proporción a este porcentaje de población, para tener participación legítima y democrática a la hora de escribir una Nueva Constitución Plurinacional», añadió.
En tanto, Miguel Crispi (RD) puso el foco en que solo restan 5 días para el plebiscito, y que el Gobierno y Chile Vamos siguen entrampando el debate. “Atentos a lo que se vote en la Sala del Senado”.
Para el abogado mapuche Salvador Millaleo, en esta negociación “el Gobierno y derecha siguen subordinando a los pueblos indígenas, sujetando a cerrojos su participación en el proceso constituyente por un padrón especial: no conciben un país donde los pueblos concurran con igualdad en pacto constitucional”.
«Si no hay un mecanismo que asegure la representación indígena, estaremos perdiendo una oportunidad única de asegurar de que estén incluidos en el futuro de este país», añadió.
Sobre este mismo punto, la diputada Nuyado señaló que “dado que esta mesa técnica fracasó, es necesario y urgente que se voten las indicaciones que están en la Comisión de Constitución del Senado y que la opinión pública tenga claro quiénes se oponen a nuestra participación justa y proporcional en la elaboración de nueva Carta Fundamental. Sin Pueblos Originarios, no puede haber Nueva Constitución”.
Pero en este debate también se pronunció Diego Ancalao, presidente de la Fundación Instituto de Desarrollo y Liderazgo Indígena. “Los cupos reservados para los pueblos originarios, es un imperativo ético. El llamado es claro, a aprobar cupos reservados de acuerdo a la densidad poblacional, y registro electoral indígena, donde el más de 12% de indígenas se autorreconozca, sin limitaciones por registros de Conadi, ni ningún intento de cooptación, de la casta política”, dijo a El Mostrador.
Sin embargo, el profesor, político y dirigente mapuche también tiene una mirada crítica de la oposición que ha intervenido en el debate. “Los senadores de derecha y de oposición, como Huenchumilla y De Urresti, son parte del problema, y hoy todo lo hacen solo para congraciarse con la audiencia (…). Llama profundamente la atención que justo hoy, quienes han usufructuado del Estado por más de 30 años, y no han resuelto hasta la fecha la demanda política indígena de cupos reservados, se escandalicen con las negativas de aprobación del Gobierno”.
En esta línea, añadió que “hay que recodarles a estos senadores, que el cambio constitucional y los cupos para pueblos indígenas no es una iniciativa de ellos, y no hay que agradecerles nada, porque es la ciudadanía en las marchas, hastiada por la inoperancia de ellos, quien instaló esta demanda hoy en discusión”.