Alberto Fica, infectólogo y académico de la Escuela de Medicina de la Universidad Austral, dijo a El Mostrador que «la situación epidemiológica del COVID-19 en Chile es mala en todo el sentido de la palabra. Estamos en el surgimiento de la segunda ola, y las medidas de control epidemiológico en Chile han sido relajadas, no por mejoría epidemiológica, sino por una sobreposición de la parte económica sobre los criterios epidemiológicos (…). Pareciera que Trump o Bolsonaro estuvieran realmente gobernando el país». Por otra parte, el secretario nacional del Colegio Médico, José Miguel Bernucci, sostuvo que “hemos perdido una nueva oportunidad de poder cortar la cadena de contagio para esta nueva cepa”, mientras el presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados y Diputadas, Ricardo Celis (PPD), señaló que el caso “habla de la necesidad de aumentar los controles a las personas que ingresan al país”.
Era cuestión de tiempo. La nueva cepa del coronavirus ya está en Chile. Fue una ciudadana chilena quien estuvo tres semanas en Reino Unido y Dubái, quien llegó al país el 22 de diciembre y, al hacerse un PCR, se confirmó que estaba contagiada con la nueva variante del COVID-19.
La noticia ha generado reacciones y críticas, especialmente por el poco control que ha existido respecto a la entrada y salida de ciudadanos chilenos y extranjeros del territorio nacional, una situación que contrasta con las fuertes medidas restrictivas que se han aplicado principalmente en la Región Metropolitana, donde no es posible viajar a otra región, salvo excepciones muy específicas.
Al respecto, el infectólogo y académico de la Escuela de Medicina de la Universidad Austral, Alberto Fica, dijo a El Mostrador que «la situación epidemiológica del COVID-19 en Chile es mala en todo el sentido de la palabra. Estamos en el surgimiento de la segunda ola, y las medidas de control epidemiológico en Chile han sido relajadas, no por mejoría epidemiológica, sino por una sobreposición de la parte económica sobre los criterios epidemiológicos».
Sobre la llegada a Chile de la cepa británica del virus, sostuvo que era algo que iba a ocurrir tarde o temprano y que «se sobrepone a un control epidemiológico muy débil. Por lo tanto, cualquier regulación que aparezca sobre viajes es solo tangencial al problema de fondo. El problema no son las regulaciones en los viajes internacionales, sino que el pésimo diseño de control epidemiológico que ya existe».
«En ninguna parte del mundo se hacen regulaciones por comunas, sino que se hacen cuarentenas o restricciones amplias en regiones enteras», criticó, en referencia al modelo de cuarentena que se ha aplicado en el país, en el que ciertos municipios pueden tener más o menos restricciones.
En esa línea, señaló que «en Chile se da un modelo de control creativo, criollo, sin base científica, que está basado en comunas, pretendiendo que el virus se desplaza solo en ciertos barrios y no salta de comuna, o que solo viaja de lunes a viernes y queda paralizado los fines de semana (…). Ese diseño es solo una invención criolla que no tiene ninguna base ni respaldo».
«Hay un negacionismo epidemiológico. Pareciera que Trump o Bolsonaro estuvieran realmente gobernando el país», agregó.
Respecto a los pasos a seguir y ante el anuncio de nuevas medidas por parte del Ministerio de Salud en los próximos días, Fica consideró que «tenemos un panorama con un control deficitario de la pandemia y existe el riesgo de reintroducción en múltiples puntos de cepas extremadamente contagiosas. Si se combina un mal control epidemiológico con una cepa de mayor transmisibilidad, solo hay dos caminos de control lógicos. El primero es volver a una cuarentena general intensa y prolongada, y el segundo, que puede ser en combinación con el anterior, es acelerar el programa de inmunización de la población».
Por otra parte, el secretario nacional del Colegio Médico, José Miguel Bernucci, dijo que la llegada de la cepa británica al país «era algo bastante previsible, principalmente porque la cepa ya se había encontrado en distintos países de Europa, y el cierre de fronteras que se había realizado en nuestro país había sido solamente un cierre parcial para vuelos que venían provenientes directamente de Australia y no del resto de los países donde se había encontrado la cepa, tales como España y Francia».
«Creemos que hemos perdido una nueva oportunidad de poder cortar la cadena de contagio para esta nueva cepa. La verdad es que no es una buena noticia», agregó.
Comentó además que «lo que sí hay que saber es que, a pesar de que sabemos que produce un aumento de contagiosidad, todavía no está claro si esto conlleva un aumento de mortalidad y hospitalizaciones, o requerimiento de pacientes en ventilador mecánico. Es una cepa que todavía estamos aprendiendo y que todavía no conocemos los alcances, por lo tanto, esperamos que las autoridades puedan tomar los resguardos necesarios para poder cortar la cadena de transmisión de esta nueva cepa en nuestro país».
En tanto, el presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados y Diputadas, Ricardo Celis (PPD), sostuvo que «la llegada al país de una persona contagiada con una cepa de alta contagiosidad, que ha significado medidas excepcionales en Gran Bretaña y en distintos países de Europa, y que llegue directamente hasta Panguipulli en la Región de Los Ríos, habla de la necesidad de aumentar los controles a las personas que ingresan al país, o bien hacer controles distintos en los puntos fronterizos y en la llegada a Santiago de personas provenientes de otras latitudes».
«Esto es un punto de alerta en el sentido de que Chile debe prepararse para recibir a personas que van a venir contagiadas y probablemente ya se están contagiando en el país con cepas distintas de coronavirus», añadió.
Finalmente, planteó que «hay una pregunta acá que queda pendiente, que tiene que ver con la efectividad de la vacunación con Pfizer que se está realizando en Chile, y esta variante. Creo que es una respuesta que debe estar preparada en Chile respecto a la necesidad de establecer políticas públicas especiales para ese efecto».