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“No pondremos en discusión el proyecto hasta que clarifique todas las dudas que hay respecto a la iniciativa (…) Llama la atención que el Gobierno coloque discusión inmediata a un proyecto hoy no tiene urgencia y que divide a la opinión pública”, indicó el vicepresidente del Senado, Rabindranath Quinteros (PS). Durante el fin de semana, el Gobierno decidió poner el acelerador a este proyecto, emplazando a la oposición que “votar en contra del tratado es hacerlo contra de uno de los legados más importantes de la Presidenta Bachelet”. Desde la centroizquierda hicieron ver lo inconveniente de tramitar el proyecto en este momento, y la senadora DC Ximena Rincón advirtió que “antes de aprobar tratados, primero tengamos nueva Constitución”. La decisión de la mesa del Senado sobre el TPP-11 suma otro traspié a la ya tensa relación con el Gobierno, que se ha reflejado en las críticas del Ejecutivo a los proyectos que considera “inconstitucionales” o sus quejas por el escaso avance de su agenda de seguridad en el Legislativo [ACTUALIZADA]
Un nuevo flanco de conflicto se abrió entre el Gobierno y el Congreso, luego de la notificación de la mesa del Senado de que no pondrá en tabla el proyecto del Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TPP-11), iniciativa que hace algunos días cuenta con discusión inmediata tras indicación del Gobierno.
Así lo ratificó el vicepresidente del Senado, Rabindranath Quinteros (PS) quien argumentó que la decisión tomada junto a la presidenta de la mesa de la Corporación, Adriana Muñoz (PPD), responde a que no existe claridad respecto al impacto que tendrá esta normativa en el país.
“Llama la atención que el Gobierno coloque discusión inmediata a un proyecto hoy no tiene urgencia y que divide a la opinión pública”, dijo.
Quinteros agregó que “notificaremos al Gobierno que no pondremos en discusión el proyecto hasta que clarifique todas las dudas que hay respecto a la iniciativa”.
Durante el fin de semana, el Gobierno decidió poner el acelerador a este proyecto. “No podemos seguir perdiendo oportunidades para el país”, dijo el canciller Andrés Allamand, quien emplazó a la oposición señalando que “votar en contra del tratado es precisamente hacerlo en contra de uno de los legados más importantes de la Presidenta Michelle Bachelet, y nosotros esperamos que este elemento de juicio sea considerado particularmente por los senadores de oposición”.
En la oposición hay coincidencia que no es el momento para abordar la iniciativa. A través de una columna de opinión, los senadores José Miguel Insulza (PS), Jorge Pizarro (DC) y Ricardo Lagos Weber (PPD) plantearon que “tenemos la convicción que el TPP es un buen acuerdo para Chile”, pero advierten que no es el momento de poner este tema en tabla. “Los gobiernos deben sopesar bien los momentos políticos que se viven para no generar ni profundizar las crisis. En especial para este Gobierno que tiene su legitimidad por el piso y un proceso constituyente en marcha (…) Hay que cuidar el clima político, hagamos un debate con todos los actores. Démonos el tiempo que sea necesario”, advirtieron.
La postura opositora fue reforzada hoy por la senadora y precandidata presidencial del Partido Demócrata Cristiano, Ximena Rincón. “Antes de aprobar tratados, primero tengamos nueva Constitución (…) No es función de la Convención Constitucional aprobar o rechazar tratados, pero sí debiese establecer las condiciones generales de procedimientos y quórum para la aprobación de éstos. Por eso, creo prudente y sano esperar a que se redacte y apruebe la nueva Carta Fundamental”, aseguró la parlamentaria.
La decisión de la mesa del Senado suma otro traspié a la ya tensa relación con el Gobierno, que se ha reflejado en las críticas del Ejecutivo a los proyectos que considera “inconstitucionales” –como los del retiro del 10% de las AFP- o sus quejas por el escaso avance de su agenda de seguridad en el Legislativo, o el proyecto de indultos para presos del estallido social promovido –entre otros senadores- por la presidenta de la Corporación, Adriana Muñoz.
De acuerdo a Quinteros, entre las múltiples dudas que presenta el texto del acuerdo entre la comunidad nacional se cuenta la falta de claridad en temas como la importación, comercialización y uso de plaguicidas, las potenciales limitaciones en el uso de semillas y la falta de regulaciones en material laboral, respeto por los derechos humanos y pueblos originarios, entre otros.
El senador por Los Lagos hizo ver que “el Gobierno no puede perder el foco y lo llamo a seguir concentrando sus propuestas y esfuerzos para salir de la crisis sanitaria y económica generada por el Covid”.
“Hay mucho por hacer todavía para reactivar la economía y apoyar a las familias chilenas que viven la agonía de no poder salir de esta crisis que afecta a Chile y el mundo”, sentenció.
Según Allamand, el retraso en la aprobación “está afectando a la recuperación económica, y ha puesto el foco en que “han surgido argumentos incorrectos en contra del acuerdo. Por ejemplo, sostuvo que los dichos de que el tratado impide que un futuro gobierno pudiera eventualmente expropiar una empresa extranjera “es completamente falso”.
De esta misma forma, sostuvo que las facultades regulatorias en materias ambientales, de seguridad social o laborales, “se mantienen absolutamente intactas”.
