En el seminario «Desinformación y vacunas: los efectos negativos de la contaminación informativa en la salud pública», la presidenta del Consejo para la Transparencia, Gloria de la Fuente fue enfática en que “si se trata de Covid-19 y de la vacunación –la política pública en materia sanitaria más relevante que tendremos en el mundo en 2021-, es necesario ir en contra de toda información que comulga en contra de una toma de decisiones adecuada de los ciudadanos”. Otros expertos alertaron que “dar espacio en los medios a los antivacunas es irresponsable» y pidieron una estrategia adecuada de comunicación en torno a la vacuna.
Ante el riesgo que generan las noticias falsas y en general la desinformación y la contaminación informativa en procesos sociales y políticos de enorme relevancia para el país, como la vacunación contra el Covid-19, el Consejo para la Transparencia (CPLT) abordó con un grupo de expertos de diversos ámbitos en un foro organizado con El Mostrador los peligros que este tipo de contenidos pueden generar en materia sanitaria.
Que las vacunas están hechas de restos de fetos, que modifican el material genético o que se aprobaron con rapidez porque se saltaron fases de testeo, son algunos ejemplos de un sinnúmero de mitos y contenidos falsos que circulan actualmente en redes sociales y otras plataformas online sobre la vacuna para combatir el nuevo coronavirus.
“Si se trata de Covid-19 y de la vacunación –la política pública en materia sanitaria más relevante que tendremos en el mundo en 2021-, es necesario ir en contra de toda información que comulga en contra de una toma de decisiones adecuada de los ciudadanos”, dijo la presidenta de la entidad, Gloria de la Fuente.
“Toda la información que circule, ojalá sea de fuentes que nos permitan acceder a datos objetivos, reales, que permitan tomar mejores decisiones y no a la desinformación o noticias falsas, que tienen en general, a proliferar mucho más que otro tipo de noticias”, explicó en el seminario «Desinformación y vacunas: los efectos negativos de la contaminación informativa en la salud pública».
Por eso, recalcó la urgencia de la entrega de información en lenguaje claro y de forma oportuna a la ciudadanía en momentos relevantes para las personas, con el fin de que éstas puedan ejercer control social de la autoridad, exigir rendición de cuentas o combatir la corrupción, entre otros fines, y “reconocer a las personas el derecho fundamental que tienen de acceder a la información pública”.
La titular del CPLT destacó algunas acciones impulsadas por la entidad para conocer los fundamentos de las decisiones de las autoridades y recalcó la responsabilidad de éstas de no sólo dar cumplimiento a obligaciones en materia de transparencia, sino también ir más allá de lo establecido por la ley, apuntando a la transparencia proactiva.
Asimismo, comentó que con estas preocupaciones, el CPLT generó una alianza con distintos expertos del mundo académico, organizaciones de la sociedad civil, representantes de medios de comunicación, entre otros actores sociales, y ha iniciado una conversación con representantes de la industria tecnológica, para generar una mesa de la desinformación. Esta instancia busca “generar una estrategia nacional que de alguna manera nos permita combatir este fenómeno, donde se involucren distintos actores”, finalizó.
En representación del Colegio Médico, Francisca Crispi recalcó el dañino efecto que genera la desinformación sobre las vacunas –que salvan anualmente a tres millones de personas-, y apuntó a que este fenómeno puede generar un impacto aún peor cuando exista mayor disponibilidad de dosis, por lo que se requiere una comunicación de riesgo clara y efectiva desde ahora.
También destacó el papel que deben desempeñar los medios de comunicación no sólo para transmitir contenidos sino para no dar espacio a mensajes que no son validados por la comunidad científica. “Dar una portada a un médico antivacunas, es un acto irresponsable”, sentenció.
Respecto a las campañas de vacunación, la abogada, doctora en derecho y especialista en diseño institucional, regulación y tecnología, Danielle Zaror, detalló hallazgos de investigaciones internacionales que establecieron que mediante estrategias focalizadas –como recordatorios, capacitaciones, fomento en el personal sanitario- son más exitosas. Asimismo, destacó la relevancia de conocer las conductas o reacciones de la población, desde sus propios sensibilidades y realidades territoriales, para generar una adecuada estrategia de comunicación en torno a la vacuna.
Por su parte, Fabián Padilla, uno de los expositores en el encuentro, periodista de fastcheck.cl, advirtió que “hasta ahora, en mi opinión, no hay voces lo suficientemente tranquilizadoras para darle paz y calma a la gente sobre este proceso”, mientras Enrique Núñez, profesor Facultad de Comunicaciones UC y editor general del medio de verificación Factchecking.cl, destacó el rol que desempeñan en este proceso los “influencers”, es decir, las personas más influyentes que pueden expandir el mensaje.
“A quiénes están escuchando los chilenos”, es una pregunta clave para desarrollar la estrategia, planteó Núñez. Sobre ello agregó: hay que pensar quiénes dentro de los distintos segmentos se va a escuchar en una sociedad más horizontal. «Don Francisco ya no es el líder de opinión», quizás lo sea hoy “una persona de mi grupo de whatsapp”, sostuvo.