Según detallan en un comunicado, realizaron una convocatoria internacional, la que fue elaborada «bajo estándares OCDE y estricta sujeción a nuestro ordenamiento jurídico, fueron aprobadas por la Contraloría General de la República, lo que permitió la recepción final de 5 propuestas, elaboradas por distintos consorcios, que integran empresas de 8 países». Tomando en cuenta esto, «el Director del Registro Civil, la autoridad competente para resolver esta licitación, ha procedido a adjudicar a la mejor oferta técnica y económica, siendo esta la presentada por el consorcio de empresas chino-alemán, cuyos principales integrantes son la compañía Aisino Corporation, con un 52%, y la alemana Muhlbauer, con un 42% de participación. La primera, tiene la responsabilidad de proveer el software y el hardware, mientras que la europea estará a cargo de la fabricación de los documentos. El monto por el cual se adjudicó esta licitación tiene un costo de 205 millones de dólares», señalan.
A pesar de las polémicas –que lo obligó incluso a emitir una declaración sobre el proceso de licitación del sistema de identificación (cédulas y pasaportes)–, el Registro Civil confirmó que la empresa china Aisino se adjudicó la elaboración de dichos documentos por los próximos 10 años, tras pagar una millonaria suma.
Según detallan en un comunicado, realizaron una convocatoria internacional, la que fue elaborada «bajo estándares OCDE y estricta sujeción a nuestro ordenamiento jurídico, fueron aprobadas por la Contraloría General de la República, lo que permitió la recepción final de 5 propuestas, elaboradas por distintos consorcios, que integran empresas de 8 países».
Sobre el nuevo proceso de licitación, informan que «ha sido desarrollado por el Registro Civil para los próximos diez años y reemplazará al actual, vigente desde el año 2012. Asimismo, contempla la máxima calidad y requerimientos técnicos en materia de identificación, con los mayores estándares de seguridad y confidencialidad a nivel mundial, con una significativa reducción de los costos para el Estado de Chile y especialmente para la ciudadanía».
Tomando en cuenta esto, «el Director del Registro Civil, la autoridad competente para resolver esta licitación, ha procedido a adjudicar a la mejor oferta técnica y económica, siendo esta la presentada por el consorcio de empresas chino-alemán, cuyos principales integrantes son la compañía Aisino Corporation, con un 52%, y la alemana Muhlbauer, con un 42% de participación. La primera, tiene la responsabilidad de proveer el software y el hardware, mientras que la europea estará a cargo de la fabricación de los documentos. El monto por el cual se adjudicó esta licitación tiene un costo de 205 millones de dólares (al valor de hoy) para los próximos 10 años, en comparación con los 680 millones de dólares que le ha costado al país la provisión de este servicio en los últimos 10 años».
«La Dirección del Servicio de Registro Civil e Identificación quiere resaltar que este proceso y su adjudicación se han llevado adelante mediante la aplicación de criterios rigurosa y exclusivamente técnicos, con estricta sujeción a las bases, y con la debida confidencialidad durante la evaluación de las ofertas, proceso que ha permitido concluir exitosamente con la adjudicación que hoy se anuncia», cierran el comunicado.
En cuanto a la polémica por la protección de datos personales, afirman que es lo más importante: «En este nuevo Sistema de Identificación, los computadores y periféricos, la red, el data center y la base de datos, serán de propiedad del Registro Civil y serán gestionados y administrados por el servicio. El nuevo proveedor proporcionará el software y el hardware, los que serán instalados, alojados en las dependencias del Registro Civil y administrados bajo sus normas de seguridad».
«Los usuarios serán atendidos por funcionarios del Registro Civil, nunca del Proveedor, en sus oficinas, y su información será enviada bajo códigos de encriptación a su data center, en el que se validará la información y se enviará la orden para la confección del documento respectivo. Los datos serán almacenados y administrados exclusivamente por el Registro Civil. La fabricación se realizará en dependencias del servicio, sin intervención humana, mediante la interpretación del código en clave que recibe. Esta información es temporal y se elimina automáticamente del sistema, inmediatamente que se realiza la impresión del respectivo documento. Los nuevos niveles de seguridad también se extienden a la prevención de amenazas internas y/o externas, mitigando potenciales accesos no autorizados a los datos personales custodiados por el servicio», añaden.
«El objetivo final que nos ha guiado es el bien superior de los chilenos, la seguridad y confidencialidad de sus datos, las mejores condiciones económicas posibles para el país y para los chilenos, con documentos de identificación del mejor estándar mundial que provee la tecnología disponible actualmente. En este sentido, queremos resaltar que las cédulas de identidad disminuirán su valor en un 20% y los pasaportes, que hoy están entre los más caros del mundo, verán rebajado su precio a la mitad. Así, los chilenos contarán con documentos de identificación con mayor calidad y seguridad, del más alto nivel mundial, y a un menor costo», dicen.