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Créditos: Captura de pantalla
A pesar de la mega sequía que afecta a Chile la última década, fueron 10,2 milímetros de agua lo que cayó en la región Metropolitana, una situación que no se vivió desde 2015 con el «ultimo gran temporal» en la capital, y el Embalse el Yeso es la prueba de ello.
Aguas Andinas mediante un video mostró como se encuentra el embalse El Yeso -principal fuente de agua potable del Gran Santiago- tras las últimas precipitaciones registradas en la zona central del país.
A pesar de la mega sequía que afecta a Chile la última década, fueron 10,2 milímetros de agua lo que cayó en la región Metropolitana, una situación que no se vivió desde 2015 con el «ultimo gran temporal» en la capital, y el embalse El Yeso es la prueba de ello.
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A estas alentadoras cifras se suma lo que reportó la Estación de Monitoreo de la Universidad de Santiago con 25 centímetros de profundidad en la caída de nieve. En 2021, la profundidad era de 0 centímetros en la misma fecha.
Video vía Twitter: @aguas_andinas
El climatólogo de la Universidad de Santiago, Raúl Cordero, valoró que las precipitaciones dejaron una gran cantidad de nevadas. «La superficie cubierta de nieve en la zona central se acercó a valores típicos para la fecha, es decir, alrededor de 15.000 km² de nieve, entre La Serena y Chillán», sostuvo en La Tercera.
A pesar que las cifras promedio han disminuido por el cambio climático, Cordero indicó que «sigue siendo un excelente notición comenzar el invierno meteorológico (1 de junio) con una cordillera nevada».
«Al menos este junio ha tenido un mejor comienzo que junio de 2021. La cobertura nivel promedio entre La Serena y Concepción registró un déficit superior a 40% durante el mes de junio del año pasado», señaló de forma optimista el experto.
Aunque para el climatólogo, la única forma de evitar un racionamiento para el Gran Santiago «es mantener niveles aceptables en los embalses El Yeso y Los Aromos. Es importante que la autoridad, es decir la Dirección General de Aguas (DGA), se preocupe de mantener niveles altos del embalse El Yeso. El nivel de éste no solamente depende de las precipitaciones, sino del uso del agua que se hace en la cuenca. Actualmente presenta niveles ligeramente inferiores a los de igual fecha del año pasado(146,7 millones de m3 en 2022, 175 en 2021)».
A destacar que el embalse El Yeso es la principal reserva de agua potable para aproximadamente seis millones de habitantes, quienes consumen 700 millones de metros cúbicos. En la actualidad, el lugar cuenta con el 67% de su capacidad, distante del 30% amenazante de 2019.
La importancia de El Yeso recae en la época de primavera y verano, puesto que es en ese momento se abastece la ciudad de sus reversas, precisó Cordero. «Y no siempre, ya que se utiliza cuando baja el caudal del río Maipo. Cabe destacar, que puede sostener el consumo humano en Santiago por hasta tres meses solamente. Eso significa que somos vulnerables a períodos largos con caudales débiles en el río Maipo», complementó.
El profesional puntualizó que en la reserva ecológica de Yerba Loica -estación de investigación ubicada a2600 metros de altura- «se registraron hasta el día sábado 25 cm de nieve. Este valor es notoriamente superior al registrado hace un año cuando prácticamente no había caído nieve. La nieve que se acumula durante el invierno es un embalse natural, y buena parte del caudal de nuestros ríos en la zona central durante la primavera corresponden a nieve derretida».
«Por lo tanto, de cara al complicado escenario hídrico que se prevé en la próxima temporada primavera-verano, las nevadas registradas en los últimos días son un excelente noticia», añadió.
A pesar de los buenos registros, Cordero enfatizó en que «lejos están los días en que en un solo día podían caer más de 55 mm de lluvia en Santiago. La última vez fue el de 3 de junio de 2002 (hace 20 años).Una de las consecuencias del cambio climático en la zona central es la baja, no solo en lluvias, sino en el número de días de lluvia. Si en los primeros días del año en Santiago solían haber nueve días de precipitaciones durante los cinco primeros meses del año, en 2022 llevamos solo tres».
