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Crédito: Agencia UNO
En el contexto de la reducción de delitos violentos como encerronas y con altas tasas de sensación ciudadana de inseguridad según las encuestas, el Gobierno sale al paso de las cifras, reconociendo una mejor sincronización entre el trabajo policial y la labor mancomunada entre los sectores público y privado. Sin celebrar nada, el subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, se refirió a los principales desafíos del Ejecutivo en materia de seguridad, y aseguró que en la práctica han decidido darle la misma importancia a la criminalidad objetiva que a la sensación de temor en la ciudadanía.
Considerando que según la última edición de la Encuesta Criteria, cerca un 70% de los chilenos «prefiere seguridad por sobre libertad», Vergara señaló que el Ejecutivo está trabajando para que «las personas puedan ejercer su derecho de estar seguros en los espacios públicos, en el día a día, no dejen de hacer y llevar adelante acciones porque tienen miedo”.
Al respecto, agregó que para enfrentar este tipo de fenómenos, como es la inseguridad, «se requiere de un esfuerzo que supera al Ministerio del Interior, y también tiene que ir más allá de la frontera de lo público». Por su parte, la autoridad de Gobierno afirmó que la seguridad debe seguir siendo vista como un derecho, no como un limitante ni tampoco como un privilegio, porque “es un garante para que se puedan ejercer libertades, pero también otros derechos”.
En ese sentido, el subsecretario de Prevención del Delito señaló que como Gobierno tomaron la decisión de darle la misma importancia a la criminalidad objetiva, los datos y la cantidad de víctimas, que a la sensación de temor. Esto, porque a su juicio, «cuando una persona deja de hacer su vida cotidiana o cambia sus patrones de vida porque tiene miedo, para nosotros merece la misma importancia”.
En ese sentido, recalcó que si bien ha habido una baja en los índices de robo violento de vehículos gracias al reforzamiento de las policías, asistiendo al mercado secundario, y al trabajo público-privado, esto no es razón para alegrarse. «Nunca hemos celebrado una baja, pero si hemos constatado un trabajo que ha permitido reducir el robo violento de vehículos», planteó.
Finalmente, la autoridad aseguró que para el Ejecutivo «es muy importante que tengamos una forma de evaluar lo que hacemos en seguridad, pero mientras existan víctimas de robo violento o en cualquier caso, como Gobierno no vamos a descansar». Palabras que se enmarcan en un contexto político complejo, donde precisamente este lunes la ministra del Interior y seguridad Pública, Carolina Tohá, recibirá en el Palacio de la Moneda a los representantes de los partidos de Chile Vamos para convencerlos sobre la partida presupuestaria de seguridad, rechazada en primera instancia por la Cámara de Diputadas y Diputados.
