Publicidad
De la incertidumbre a la máxima preocupación: Gobierno pierde piso político para amarrar los votos de Valencia PAÍS

De la incertidumbre a la máxima preocupación: Gobierno pierde piso político para amarrar los votos de Valencia

Publicidad
Raúl Espina
Por : Raúl Espina Periodista de El Mostrador
Ver Más

Senadores oficialistas y de oposición han comenzado a explicitar su malestar por la sorpresiva nominación de Ángel Valencia a Fiscal Nacional, donde algunos cuestionan su nombre, las defensas que ha asumido de imputados en causas polémicas, y sus vínculos con el mundo político, mientras que otros cuestionan el proceso a través del cual fue elegido. En pocas horas, los votos que se pensaban asegurados, de pronto comienzan a tambalear. Esto, en medio de versiones que hablan de solapadas negociaciones entre el Gobierno y senadores de oposición para instalar a Valencia, aun cuando nunca fue el candidato de La Moneda. En esta pasada, diversas fuentes del Congreso reparan en que la voltereta del Presidente para nombrarlo dejó a las ministras Marcela Ríos y Ana Lya Uriarte sin piso para, ahora, salir a amarrar los votos en favor del abogado externo a la Fiscalía.


En el Congreso Nacional abunda la incertidumbre. La sorpresiva nominación de Ángel Valencia como el tercer candidato del Gobierno para liderar la Fiscalía Nacional, desnudó la volatilidad de los parlamentarios de la Cámara Alta. Si en un momento el voto es A, cualquier gestión considerada inconveniente hace cambiar el voto a B. Precisamente, esa situación es la que tiene al Gobierno hoy en día con suma preocupación. Los votos de los parlamentarios que supuestamente estaban ayer a favor de Valencia, hoy comenzaron a bajar, sin siquiera escuchar la exposición del abogado ante al Senado, prevista para el próximo lunes 9 de enero.

Desde la orilla de Apruebo Dignidad, el senador PC Daniel Núñez, en conversación con El Mostrador en La Clave, acusó que el actual candidato de La Moneda es un nombre que «instaló la derecha dura» y que su nominación no le parece una buena señal para el país y, aunque dejó entrever los resquemores que abundan al respecto en Apruebo Dignidad, evitó adelantar el contenido de su voto.

Desde Socialismo Democrático que en el papel están con Valencia también comenzaron a experimentar fisuras. Una de estas la representa la senadora Loreto Carvajal (PPD), quien anunció que votará en contra de Valencia, debido a que a su juicio no cumple con la ética ni con la competencia profesional requeridas para el cargo, y que «el Gobierno ha sido vencido frente a un gallito iniciado por senadores».

«Un fiscal debe ser la reserva moral para perseguir el crimen organizado. Se debe entender que la defensa en base a proteger la riqueza de algunos y causas sentenciadas de abuso de menores y mujeres no puede ser sino contrario a lo que es un Fiscal Nacional (…). El nombre del señor Valencia, descartado en dos ocasiones anteriores, hoy puesto sobre la mesa, atendiendo a sus cualidades profesionales, no sé de qué tipo, por supuesto que llama y existe la atención respecto a cómo se llega a un nombre descartado en dos ocasiones”, planteó la parlamentaria.

El senador Iván Flores (DC), en tanto, cuestionó también la candidatura de Valencia, entendiendo que según su óptica– el fiscal Juan Agustín Meléndez era el nombre que concitaba mayor apoyo cerca de 40 votos, según se calcula, por lo que el repentino nombramiento de Valencia causó sorpresa y malestar en el Senado, sobre todo en un sector del oficialismo. «Este viraje que hace el Gobierno se vio mal, huele mal y parece mal, porque claramente, cuando todas las señales estaban en esa línea, cuando había dos ministras (Ríos y Uriarte) trabajando al respecto, el Presidente las dejó sin piso. Es cierto que es atribución del Mandatario, pero, entonces, ¿para qué manda a conversar, para qué manda a preguntar, si al final va a hacer lo que se le antoja? A no ser que, en este ambiente enrarecido de la política, el Gobierno haya decidido negociar con la derecha más dura», advirtió Flores.

Sobre la posible negociación con un sector de la derecha, a cambio de evitar las acusaciones constitucionales contra Ríos y Jackson, el senador por la Región de Los Ríos agregó que «sería muy penoso y muy complicado, donde, por salvar el pellejo de sus ministros, eventualmente se nombra a una persona que el Gobierno no quería nombrar».

Aunque como diputado no tiene velas en este entierro, René Alinco dio cuenta de un clima transversal en el Congreso. No solo senadores concuerdan con la hipótesis de que el nombramiento de Valencia «obedece a una transacción y a un acuerdo político entre la derecha y gente de La Moneda», señaló. Además, dijo que «fue toda una trama la que se fue gestando», y acusó al Gobierno del Presidente Boric de estar, desde un tiempo a esta parte, «negociando tras bambalinas con la derecha, la derecha parlamentaria y económica».

Las dudas en la oposición

Si bien en la derecha estaría el bolsón de votos que necesita Valencia para alcanzar el quórum de 2/3, en la oposición también comienzan a levantarse resquemores, particularmente por el proceso de su nominación, y esta posible negociación, liderada por senadores de la UDI y RN. Y aunque el gremialismo se cuadraría detrás del candidato del Gobierno, en la bancada de RN hay voces de molestia, a causa de que esta transacción con La Moneda no habría sido comunicada, por lo que por el momento es posible que algunos votos de dicho sector se inclinen por rechazar la carta del Presidente Boric.

Una de las voces críticas en torno a este proceso fue la del senador Alejandro Kusanovic (Ind. RN), quien aseguró que «hasta el momento voy a votar en contra del candidato». A juicio del parlamentario, el tema ha sido demasiado manoseado, provocando que el proceso actual haya estado «incluso más contaminado que el proceso anterior», en referencia a la polémica elección de Jorge Abbott en 2015. En ese sentido, Kusanovic denunció que «hubo negociaciones entre los partidos, que es algo que no me gusta. No me parece correcto este manejo de información, negociaciones. Es precisamente de lo que la gente está cansada, de las malas prácticas de la política, y seguimos cometiendo los mismos errores», sostuvo.

Por su parte, y sin adelantar su voto en la sesión de este lunes, el senador de dicha tienda, Manuel José Ossandón, reconoció que no tendría problemas en votar a favor de Valencia, porque según dice confía en los cinco candidatos propuestos por la Corte Suprema. No obstante, el parlamentario reconoció que las conversaciones internas continuarán su curso y que habrá una nueva reunión del comité de RN en el Senado, previo a la comparecencia del candidato a Fiscal Nacional, agendada para el próximo lunes 9 de enero.

«Aquí hubo una negociación de último minuto, entre el Gobierno y la UDI, donde probablemente también pudo haber participado algún parlamentario de RN. Hasta el momento, se desconoce qué fue lo que negociaron, pero hasta este miércoles siempre se habló de Meléndez y Palma, nunca de Valencia. Fue una nominación sorpresiva, donde las ministras (Ríos y Uriarte) también resultaron perjudicadas», planteó Ossandón.

En ese contexto, con una oposición donde también comienzan a surgir dudas y resquemores ante la tercera carta del Ejecutivo para liderar el Ministerio Público, en los próximos días La Moneda deberá intentar salvar al Gobierno de una situación catastrófica, en medio de un proceso enrarecido, y que tuvo en la nominación de Ángel Valencia una nueva polémica arista. Con las ministras Ríos y Uriarte deslegitimadas, cuyo trabajo en torno al posicionamiento de Juan Agustín Meléndez en el Senado finalmente no fue considerado por el Presidente Boric, el Ejecutivo se queda sin margen de error, asumiendo que una nueva derrota podría agravar su compleja relación tanto con el Poder Judicial como con el Congreso Nacional.

Publicidad

Tendencias