Los nueve integrantes del Tribunal –compuesto por la presidenta Julia Panez, Marcela Carrasco, Constanza Tobar, Luis Thayer, Héctor Ruiz, Matías Valdés, Octavio Arellano, Óscar Osorio y Sebastián Llantén– decidieron expulsar y eliminar a Chahin, David Morales y Rogelio Zúñiga “de todos los registros partidarios”, como señala el fallo fechado el 30 de enero de 2023. Las razones se resumen en dos: una, la existencia de fondos sin rendir, correspondientes a los años 2019, 2020 y 2021; y la otra, el precio en la compraventa de inmuebles ubicados en las comunas de La Florida, Macul y Talagante. Cabe destacar que, al momento de la resolución del TS, algunos de los nombres sancionados –como el propio Chahin– ya no eran militantes de la colectividad. Por lo mismo, los estatutos de la DC puntualizan que, cuando el Tribunal Supremo inicia una investigación, los investigados se consideran militantes hasta el término del proceso, para poder sancionarlos debidamente. Consultado por El Mostrador, Fuad Chahin afirmó que la resolución lo tiene “sin cuidado, porque era totalmente esperable. Aquí desde un principio estaba definido cuál era el objetivo, que era de venganza y de tratar de enlodar”, añadió.
Por unanimidad, el Tribunal Supremo (TS) de la Democracia Cristiana resolvió expulsar del partido a Fuad Chahin, histórico militante que llegó a la presidencia de la colectividad, además de David Morales, exsecretario nacional, y Rogelio Zúñiga, exadministrador general de la tienda.
Los 9 integrantes del TS –compuesto por la presidenta Julia Panez, Marcela Carrasco, Constanza Tobar, Luis Thayer, Héctor Ruiz, Matías Valdés, Octavio Arellano, Óscar Osorio y Sebastián Llantén– decidieron expulsarlos y eliminarlos “de todos los registros partidarios”, como señala el fallo –al que tuvo acceso El Mostrador– fechado el 30 de enero de 2023. Así, en caso de que alguno de los sancionados quiera regresar al partido, estos antecedentes harán que sea prácticamente imposible.
Las razones se resumen en dos: una, la existencia de fondos sin rendir, correspondientes a los años 2019, 2020 y 2021, a nombre de David Morales y Rogelio Zúñiga, lo que fue considerado por la instancia un incumplimiento de “carácter grave”, por no cumplir con la obligación de “rendir o restituir los fondos solicitados, tanto por su excesiva extensión en el tiempo y por la alta proporción que respecto del gasto general representaban los fondos en cuestión”; y la otra –en que se apunta a Chahin–, dice relación con el precio en la compraventa de inmuebles ubicados en las comunas de La Florida, Macul y Talagante, los que fueron fijados a un valor menor que el correspondiente a su precio de mercado. Por ejemplo, el de Talagante se fijó en un precio de 28.830 UF, mientras que su tasación era de 41.806 UF. Es decir, la DC perdió 12.976 UF. Lo mismo ocurrió con los otros inmuebles.
“Es menester señalar que los encartados Chahin, Zúñiga y Morales se relacionan en cuanto a las transacciones de inmuebles, en razón de que el primero es el único representante legal del partido en capacidad de suscribir los actos jurídicos que se analizan sobre los inmuebles y que efectivamente fueron suscritos por él, mientas que David Morales Nordetti, en tanto ministro de fe del partido, ha tenido conocimiento de los acuerdos de la Directiva Nacional y Consejo Nacional que integró en su calidad de Secretario Nacional; en circunstancias que Rogelio Zúñiga Escudero, en su calidad de Administrador y jefatura del personal contable y legal, ha debido supervisarles en la gestiones previas a la conclusión de los contratos referidos y en el registro y justificación de los ingresos y egresos contables que se han debido registrar de acuerdo al manual de procedimientos de la administración”, señala el fallo.
Por tal motivo, Morales y Zúñiga fueron acusados de falta de rendición –en tiempo y forma– de los fondos. Y debido a sus cargos, infringieron además el deber del militante contemplado en el estatuto partidario, “por cuanto actuaron en contra de estatutos y normativa interna, sin atender a las instrucciones que se les impartió para rendir o reincorporar los fondos pendientes”.
En cuanto a los inmuebles, a los tres también se les acusa a partir de normativas contenidas en los estatutos. Lo importante es que, como señala la resolución, en ambos casos, los tres expulsados incurrieron en actos que amenazaron los intereses permanentes de la DC y el “prestigio moral de la colectividad”.
Cabe destacar que, al momento de la resolución del TS, algunos de los nombres sancionados –como el propio Chahin– ya no eran militantes de la colectividad. Por lo mismo, los estatutos de la DC puntualizan que, cuando el Tribunal Supremo inicia una investigación, los investigados se consideran militantes hasta el término del proceso, para poder sancionarlos debidamente.
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Conocida la resolución de la DC, Fuad Chahin conversó con El Mostrador y afirmó que el fallo “la verdad que me tiene sin cuidado, porque era totalmente esperable. Aquí desde un principio estaba definido cuál era el objetivo, que era de venganza y de tratar de enlodar”, añadió.
A su juicio, el fallo comete errores “tan brutales”, porque “no se hicieron cargo de la resolución de ninguno de nuestros argumentos de derecho, que fueron tremendamente sólidos e incontestables, diciendo que no habíamos acompañado documentos que lo probaran. Un alumno de primer año de derecho sabe que el derecho no se prueba. Son los hechos los que se prueban y tampoco se fijaron puntos de prueba. Nunca se fijaron hechos a probar, ni se habló ni siquiera de un término probatorio, es decir, una oportunidad procesal para poder rendir prueba, y sobre qué es lo que había que rendir pruebas”.
“Así de vulneratoria del debido proceso fue esta actuación del Tribunal Supremo. Por lo tanto, era esperable. Me tiene sin cuidado, porque justamente son esos abusos, donde se actúa con verdadera prevaricación por parte del Tribunal Supremo, entre otras cosas, los que me llevaron a renunciar ya hace exactamente dos meses a la Democracia Cristiana”, cerró.
La militancia de Fuad Chahin se encontraba suspendida por apoyar la opción del Rechazo en el plebiscito del 4 de septiembre, contraviniendo la postura oficial de la DC de apoyar la propuesta de nueva Constitución.