PAÍS
Créditos: Agencia Uno (referencial)
Este día llega con la lamentable noticia de la muerte de Félix Pérez Pereira, quien era trabajador de una empresa forestal privada y falleció cuando se encontraba construyendo un cortafuegos en Angol, región de La Araucanía. A recordar que desde que comenzaron los incendios forestales en nuestro país, más de 2.300 brigadistas nacionales han sido desplegados por los distintos focos de siniestros, a lo que se les suma otras 800 personas que se dividen entre expertos, bomberos y brigadistas internacionales. Su labor ha sido elogiada desde el Gobierno hasta las personas comunes, debido a que se encuentran en lugares donde nadie más puede entrar arriesgando su vida en el combate de los incendios forestales. Sin embargo, se desconoce muchos detalles de su labor y su organización.
Este miércoles se conmemora el día del Brigadista Forestal en honor a los 12 funcionarios fallecidos en un accidente aéreo en 2009. Los brigadistas pertenecientes a la Corporación Nacional Forestal (Conaf) han jugado un rol importante en el combate contra los incendios que afectan los bosques de la zona centro-sur del país. Sin embargo, no se conoce su trabajo y organización a nivel profundo.
Este día llega con la lamentable noticia de la muerte de Félix Pérez Pereira, quien era trabajador de una empresa forestal privada y falleció cuando se encontraba construyendo un cortafuegos en Angol, región de La Araucanía.
A recordar que desde que comenzaron los incendios forestales en nuestro país, más de 2.300 brigadistas nacionales han sido desplegados por los distintos focos de siniestros, a lo que se les suma otras 800 personas que se dividen entre expertos, bomberos y brigadistas internacionales.
Su labor ha sido elogiada desde el Gobierno hasta las personas comunes, debido a que se encuentran en lugares donde nadie más puede entrar arriesgando su vida en el combate de los incendios forestales. Sin embargo, se desconoce muchos detalles de su labor y su organización.
Para llegar a ser brigadista forestal, se puede postular desde los 18 años, con una salud física y mental compatible. Esto se debe al tipo de tareas que se llevan a cabo, puesto que se necesita un alto rendimiento físico, a lo que se suma sumergirse a niveles de estrés, adrenalina, frustración que se requieren cierto grado de manejo.
A todo postulante -sin condición de género- se les realiza un examen físico que incluye resistencia, salto a distancia, fuerza, capacidad aeróbica y anaeróbica. En tanto, por la parte psicológica, se realiza un examen y entrevista personal para descartar a quienes tengan reacciones adversas o favorables al fuego.
El jefe de Prevención de Incendios Forestales de Conaf, Rolando Pardo, comentó en Emol sobre la organización interna de los brigadistas. Si bien, han existido procesos de selección -la mayoría asume niveles de jefatura-, los brigadistas trabajan de forma temporal en Conaf.
Asimismo, Pardo indica que alrededor del 60% de los brigadistas vuelven a la siguiente temporada, hay casos que llevan entre 10 a 20 temporadas. Lo normal es que en marzo se van por agotamiento físico, pero en septiembre comienzan a contactarse entre ellos para volver, precisa la autoridad de Conaf.
Es más, entre los brigadistas se encuentran trabajadores agrícolas, estudiantes de liceos, universitarios, profesionales tales como abogados, técnicos, entre otros.
Al momento de organizarse para dirigirse a combatir los incendios, estos se reúnen en forma de campamentos, armados por uno o más equipos que se dividen las distintas actividades en sus horarios de trabajo. La composición estándar de una Brigada de Combate de Incendios Forestales o Brigada Forestal cuenta con un jefe de Brigada, dos jefes de Cuadrilla y entre seis a siete brigadistas por cada cuadrilla. Sin embargo, pueden existir unidades más pequeñas, todo depende del lugar donde están emplazados.
A ellos se suma un equipo de acción aérea y local que miden el viento segundo a segundo para proteger la labor de los Brigadistas y no arriesgarlos en la contención del fuego, y que su labor sea más eficaz.
Los brigadistas no se encuentran combatiendo los siniestros durante todo el día, sino que tienen un descanso regulado para cumplir la legislación vigente. Esto porque al ser un trabajo de alto esfuerzo, es necesario el descanso para recuperar energías y la oxigenación necesaria para la labor.
Las jornadas de trabajo se organizan por turnos, hay de trabajos de seis días y seis de descanso; otros de 10 días y cuatro de descanso, según Pardo todo depende de la región en la que están desplazados.
Conaf es la encargada de proporcionar la alimentación necesaria, es decir, que tengan las calorías acordes al consumo de energías. También deben entregar los equipamientos de seguridad necesarios, tales como botas de alta resistencia a las temperaturas, poleras, pantalones, calcetas, entre otros. Los instrumentos de seguridad son reemplazados cada vez que son dañados.
En cuanto a la remuneración, según detalló el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, a Emol, esta se encuentra en los 700 mil pesos en términos brutos (horas normales + extras). El secretario de Estado indicó que no hay diferencias entre regiones, pero esperan con la reforma tributaria contar con una mayor cantidad de brigadistas y en mejores condiciones.
En cuanto a la salud mental, desde Conaf indican que hay constantes capacitaciones permanentes con mutualidad para mejorar el combate del fuego para los brigadistas, puesto que saben lo que puede provocar en las personas estar en contacto con las llamas en una emergencia.
