Publicidad
Se Vende: el plan de la DC para terminar una deuda de más de $600 millones antes de las municipales PAÍS Crédito: Agencia Uno

Se Vende: el plan de la DC para terminar una deuda de más de $600 millones antes de las municipales

Publicidad
Carlos Saldivia
Por : Carlos Saldivia Periodista de El Mostrador
Ver Más

La Democracia Cristiana puso en venta una serie de inmuebles para pagar una deuda que hasta octubre era de $1.189 millones. La enajenación de dos predios la redujo a casi $630 millones, pero el partido requiere la comercialización de dos o tres más para enfrentar las municipales sin déficit.


“No tenemos problemas con las finanzas. Lo que no tenemos es plata”, dice con humor un dirigente histórico de la Democracia Cristiana, al comentar las medidas urgentes implementadas por el partido para solucionar una deuda de $1.189 millones, que se arrastra desde hace varios años, para lo cual se está en un proceso de venta de inmuebles y en un ajuste severo de sus gastos.

El histórico edificio de tres pisos que por más de 50 años fue sede de la DC, en Alameda 1460, se encuentra en arriendo, y de los 42 inmuebles que posee la colectividad, dos pudieron ser vendidos a fines de octubre, pese al momento que vive el sector inmobiliario en el país.

“El edificio de Alameda, de 2.300 metros cuadrados, fue puesto en arriendo por cerca de 17 millones de pesos al mes, han llegado interesados, pero no ha logrado arrendarse por la crisis inmobiliaria y económica que hay”, comenta una fuente de la colectividad a El Mostrador.

El presidente de la DC, diputado Alberto Undurraga, explica que el partido mantenía deudas por $1.189 millones, las cuales han ido disminuyendo. “Se está en proceso de venta de propiedades y de ajustar gastos. Se han vendido una propiedad en La Calera y otra en Ñuñoa, que permiten bajar la deuda, pero aún falta, hay otras propiedades en venta, incluyendo una de Linares, por ejemplo”, detalla Undurraga a este medio.

Y agrega que “respecto del edificio de Alameda, claramente tenemos que salir de ahí, es muy cara la mantención, o bien quedarnos solo en un piso, pero aún no se concreta ningún arriendo. El sentido político e institucional de todo lo anterior es resolver este año 2023 los problemas económicos, para enfrentar las municipales y regionales con el partido económicamente saneado y concentrarnos en tener un buen resultado en esas elecciones”.

Según señalan en la falange, en una sesión del Consejo Nacional realizada el pasado septiembre, se acordó acelerar el “proceso de saneamiento de la deuda” con el propósito de tenerla finiquitada a más tardar en enero de 2024, pero la crisis del mercado de los inmuebles ha atrasado un poco ese cronograma. El timonel de la DC, junto con la directiva, han definido que las ventas cumplan con concretarse al precio de mercado, por la regulación legal existente y, también, para cuidar su patrimonio histórico, toda vez que casos anteriores han generado críticas a los procesos de venta y tensión entre las corrientes internas.

Con los comicios municipales de 2024 en el horizonte, hay bastante optimismo, porque se ha logrado rebajar la deuda con un recorte de gastos internos, más la recepción de un dinero remanente del Servel de $209 millones, que se suma  a la mencionada venta de los dos inmuebles, por $118 millones y $230 millones. Lo anterior redujo los números rojos de $1.189 millones a cerca de $640 millones.
Además, la directiva y la administradora Camila Briceño acordaron pedirles a los senadores, diputados y gobernadores un aporte mensual cercano a los 100 mil pesos, mientras que a alcaldes, concejales y consejeros regionales que contribuyan con una cifra menor para la gestión y operaciones administrativas de la tienda.
“Pese a esos aportes, desde el punto de vista de los grandes números, esto se resuelve con la venta de activos. Los aportes van a servir para la operación administrativa del partido para adelante, pero no sirve para el déficit”, puntualiza una fuente de la directiva.
En concordancia con ello, el vicepresidente de la DC, Gianni Rivera, indica que “hay un plan de remate programado, donde con la venta de dos propiedades con valor de mercado se podría terminar la deuda. Ya, por ejemplo, estamos al día en los sueldos, los compromisos laborales y estamos colocándonos al día en las deudas programadas. El partido parecía estar funcionando, en estructura, como cuando tenía 30 parlamentarios. Teníamos varias propiedades y predios con contribuciones altas, y nuestra vía de financiamiento era la vía legal de la Ley de Partidos. Con la baja en las votaciones, los aportes fueron menores a los esperados desde el Servel. Entonces, hay que acomodarse a vivir con esa realidad”.

La enajenación de los inmuebles es interpretada como un alivio al interior del partido. Enfatizan en la DC que, en cualquier caso, la transacción de las propiedades representa solamente entre un 8 y un 11 por ciento de los activos y propiedades de la falange, por lo que en ningún caso se produce una merma significativa para la colectividad que en 1966 tenía casi la mitad de los legisladores de la Cámara y, en la actualidad, tiene cinco.

Según comentan en la Democracia Cristiana, si se enajenan los predios que mantienen en Linares y Macul, los problemas de dinero se resolverán. O, bien, con la venta de una tercera propiedad como máximo.

Paralelamente, y aunque no tiene “vasos comunicantes” con el financiamiento del partido, el think tank Centro Democracia y Comunidad (CDC), ligado a la falange, dejará de recibir el aporte basal que tiene de la Fundación alemana Konrad Adenauer, ya que los germanos recortaron su presupuesto, aunque se mantendrán los recursos asignados por proyectos.

Inscríbete en el Newsletter +Política de El Mostrador, súmate a nuestra comunidad para informado/a con noticias precisas, seguimiento detallado de políticas públicas y entrevistas con personajes que influyen.

Publicidad

Tendencias