“Si yo hubiera sabido que en esta reunión, además de la gente de salmonicultura iba a haber alguien que también tenía participación en pesca, probablemente hubiera decidido no ir, o hubiera pedido que esa persona no asistiera, señaló el ministro de Economía.
En conversación con el programa Mesa Central, el ministro de Economía, Nicolás Grau, respondió a los cuestionamientos tras revelarse que sostuvo un encuentro con empresarios de la industria salmonera en la casa del lobista Pablo Zalaquett, a semanas de la presentación del proyecto de nueva Ley de Pesca. Reunión que no quedó registrada mediante Ley de Lobby.
“Pablo Zalaquett me señaló que íbamos a tener una conversación general con un conjunto de personas del mundo de la salmonicultura para que cada uno pudiera decir sus perspectivas sobre el desarrollo de esa industria, y lo que yo fui a hacer es transmitir mis perspectivas o más bien las perspectivas del Gobierno. (…) La industria de la salmonicultura es importante, es un hecho de la causa, pero a veces se olvida, ha sido relevante en las últimas décadas de nuestro país. Pero lo segundo, es que para que se pueda seguir desarrollando tiene que hacer cambios muy importantes, cambios que tienen que ver con su tecnología, con la relación con las comunidades, también con su ubicación, nosotros hemos planteado como Gobierno que el hecho de que parte importante de las concesiones estén en áreas protegidas es un problema y tenemos que lograr que por lo menos una parte importante de aquello se puede relocalizar”, señaló.
En relación a la presencia de una persona que pertenece a la industria pesquera en este encuentro, el titular de Economía indicó que no tenía conocimiento. “En particular yo no supe la lista, y esto es algo que si lo hiciera ahora, por supuesto lo haría distinto”.
“Si yo hubiera sabido que en esta reunión, además de la gente de salmonicultura iba a haber alguien que también tenía participación en pesca, probablemente hubiera decidido no ir, o hubiera pedido que esa persona no asistiera. Simplemente porque quería dejar claro que la conversación sólo iba a ser sobre salmonicultura, en la práctica, sólo fue de salmonicultura y en estos términos que hemos señalado públicamente”, afirmó.
Respecto a las críticas por no registrar este tipo de encuentro bajo Ley de Lobby, Grau aclaró que no era estrictamente necesario porque fue una conversación de carácter general. “La Ley del lobby dice, esto suena un poquito redundante, pero dice que uno tiene que registrar una reunión cuando lo que ocurrió en esa reunión es lobby. Si uno tiene una conversación como la que yo tuve, que es una conversación en términos generales, no para influir una ley en particular o una cosa en específico, sino respecto a nuestra visión de cómo se tiene que desarrollar la industria, eso la Ley de Lobby no exige que sea registrado”, enfatizó.
En esa línea, Grau agregó que la interpretación que se le ha dado a la Ley de Lobby, es la interpretación que se ha hecho desde el 2014 en adelante por todos los gobiernos”.
“Yo tengo 250 audiencias de lobby y me he juntado con todas las industrias y con todos los sectores de la salmonicultura. (…) Dos o tres días después del 15 de noviembre, tuvimos una audiencia de lobby en el Ministerio Medio Ambiente, con la ministra Medioambiente, que también participó en la otra reunión, con la salmonicultura, pedida también por asociaciones que estaban presentes en esa conversación (en la casa de Zalaquett) y allí sí conversamos cosas más específicas”, indicó.
Respecto a la llamada “cocina política”, la autoridad señaló que este caso “es bien distinto”, porque no se trató de discutir una reforma tributaria, ni una ley en particular. “Ahora si el tema más de fondo es que lo que uno quiere conversar acá es cómo se regula la interacción público privada, de manera tal que exista el mayor nivel de transparencia, el nivel de transparencia que nosotros hemos tenido en nuestra discusión de leyes ha sido altísimo”, agregó.
Asimismo, comentó el proceso de redacción del actual proyecto de Ley de Pesca. “Nosotros para armar el proyecto que reemplaza esta ley que tiene problemas de corrupción y legitimidad serios, tuvimos 150 encuentros con la pesca artesanal, 10 con la pesca industrial que están mucho más agrupados, con el mundo académico, y todos esos encuentros están grabados. (…) Todo nuestro proceso ha sido muy transparente y es más, es cosa que usted vea lo que dice nuestro proyecto, la reacción de la industria, para saber que una de las cosas que busca hacer esta ley es corregir una distribución de los recursos que no tiene ninguna justificación, ni científica, ni de política pública”.