Además de ser el abogado de uno de los narcos beneficiados por el juez Urrutia, Carlos Quezada -representante de magistrado en causas particulares- fue abogado del líder del clan de narcotraficantes “Los Gaete”, defensor de Pancho Malo y de imputados por delitos sexuales.
El polémico juez Daniel Urrutia sigue en el ojo del huracán luego de que se reveló que comparte abogado con un narcotraficante colombiano que cumple una condena de 15 años de prisión por tráfico de drogas en la Cárcel de Alta Seguridad, el que fue beneficiado por una resolución del magistrado. Este hecho provocó inmediata reacción del Gobierno, asegurando que hay conflicto de interés en esta materia.
El abogado de Urrutia se llama Carlos Quezada, quien se tituló el año 2001 en la Universidad Andrés Bello y que ha representado a Urrutia en diversas causas.
Al respecto, el ministro de Justicia, Luis Cordero advirtió que “por la responsabilidad del cargo que tengo y como tenemos una disputa pendiente respecto a la resolución judicial, lo que a mi más me importa es garantizar la máxima seguridad del establecimiento. Algunas de esas comunicaciones permitidas son precisamente las que se buscan evitar en la máxima seguridad”.
“Yo me quiero seguir focalizando, porque lo que creo que no corresponde en estos momentos, es que esto sea una disputa con un juez con nombre y apellido”, añadió, en conversación con radio Universo.
Dicho eso, explicó que “el atributo central de la función jurisdiccional, es la independencia judicial y eso es lo que justifica que le reconozcamos la independencia y que le reconozcamos la inamovilidad a un juez. Por eso los estándares que le exigimos a los jueces para el desempeño de su nivel jurisdiccional, deben ser mayores o superiores a las de cualquier otro funcionario público”.
Sobre el caso del abogado Quezada, Cordero aseguró que es una información “que al menos pone en riesgo la condición de independencia”. “Para evaluar en concreto un caso de conflicto de interés, yo creo que es conveniente tener todos los antecedentes, pero es evidente que hay un principio que podría generar una hipótesis de conflicto de interés“, agregó.
“A mí me parece inconveniente, por el contexto en el que estamos y por la naturaleza de la función jurisdiccional”, acotó Cordero, quien cerró diciendo que es un hecho que tiene que despejar “tanto el juez Urrutia como su abogado”.
Carlos Quezada ha representado en varias causas al polémico juez Urrutia. Una de esas ocurrió en 2023, cuando el juez se querelló contra el exdiputado Mario Desbordes, que lo calificó de “activista político” y que “liberaba delincuentes”, la cual fue desestimada por tribunales.
También lo representó en 2020 cuando Urrutia se querelló contra un hombre que lo amenazó de muerte en redes sociales, y la semana pasada asumió su defensa en otra querella por el mismo tipo de amenazas.
En su ámbito profesional, como abogado penalista ha sido defensor en varias causas de connotación pública. Según registros de prensa, le ha tocado defender a miembros de la Garra Blanca -entre los que representó a Francisco Muñoz, alias “Pancho Malo”- y a fallecidos en el incendio de la cárcel de San Miguel.
Además, según un reportaje de Ciper, le tocó defender a miembros de la banda de narcotráfico Los Gaete. En este caso trabajó junto a Reiniero García de la Pastora. Ambos defendieron a Marcelo Gaete, el líder de la banda, y a su esposa.
“Quezada ha participado de causas célebres. Defendió al ingeniero Ricardo Jiménez y a su pareja en un juicio por producción y supuesto tráfico de mezcalina que era usada con fines terapéuticos. También al ex inspector de la policía antinarcóticos Gonzalo Araya. En estos días participa del juicio oral contra Roberto Silva Cerpa, acusado de ser el financista de un tráfico de 30 kilos de cocaína desde Bolivia”, señala la nota en cuestión.
También representa a imputados por delitos sexuales.
Según el sitio Ex-Ante, el beneficiado por el juez Urrutia es el colombiano Rafael Marín Vielma. ¿El beneficio? Que pudiese recibir una visita íntima de su pareja Lady Nelly Martínez Moreno.
La resolución de Urrutia fue dictada el 19 de enero, donde ordenaba a Gendarmería permitir la visita íntima a Marín y dando un plazo de 15 días a Gendarmería para cumplir la medida. Desde Gendarmería reclamaron que no tienen dependencias para este tipo de reuniones.
“Bueno, por eso el Tribunal ordenó que se realice la visita íntima y se adopten las medidas de seguridad para hacerlo en el venusterio que tiene la Penitenciaría o Santiago Uno (…) A los internos se les saca muchas veces por ejemplo a tribunales. Encuentra el Tribunal que no es razonable la respuesta que Gendarmería está dando y por lo tanto el Tribunal sigue con la orden de que dentro los próximos días a partir del viernes pasado, se deba realizar la visita íntima de Leydi Nelly Martínez Moreno, siempre que ella quiera, obviamente”, dijo Urrutia según la transcripción.
El vínculo entre Quezada y el narcotraficante colombiano se reporta a una causa por tráfico a España en 2020, donde fue condenado a 15 años de prisión. Además era reincidente, pues fue condenado a 7 años de prisión por el mismo delito, pero por un hecho ocurrido en 2016 en Antofagasta.